Las casas de Borgio en Miami
El departamento está ubicado en el penthouse de uno de los edificios más vistosos de Brickell, en Miami.
El condominio se llama Jade. Es considerado “un ejemplo de la sofisticación de Miami, un paraíso tropical”.
El edificio de 48 pisos alberga 326 residencias de lujo con tecnología avanzada. Tiene un spa estilo europeo y un gimnasio.
Dentro de los departamentos hay un controlador tecnológico para todos los servicios electrónicos que se maneja desde una pantalla táctil.
Peniley RamírezEl departamento está ubicado en el penthouse de uno de los edificios más vistosos de Brickell, en Miami.
El condominio se llama Jade. Es considerado “un ejemplo de la sofisticación de Miami, un paraíso tropical”.
El edificio de 48 pisos alberga 326 residencias de lujo con tecnología avanzada. Tiene un spa estilo europeo y un gimnasio.
Dentro de los departamentos hay un controlador tecnológico para todos los servicios electrónicos que se maneja desde una pantalla táctil.
Si el edificio es lujoso, el departamento que se lleva la mejor parte es el penthouse donde se ubica, desde 2004, la residencia de descanso de Javier Rodríguez Borgio, dueño del Grupo Gasolinero Mexicano, los casinos Big Bola y socio de Oceanografía, la compañía acusada de haber defraudado a Banamex con facturas falsas de Pemex.
Jade Residences at Brickell Bay fue construido en 2004 y el penthouse cuenta con 373 metros cuadrados con vista al mar.
Ese mismo año la compañía Altara Properties Investments, Inc. lo compró en 3.4 millones de dólares.
Altara es una empresa fundada en mayo de 1998 y aún activa.
Desde su creación, es propiedad de Rodríguez Borgio, dueño de los barcos más importantes de Oceanografía y socio -junto a Martín Díaz Álvarez- del 15 por ciento de la contratista de Pemex, según información difundida este miércoles por la paraestatal.
Desde agosto del año pasado, el empresario delegó la mitad de las acciones de la empresa a María Echavarría, una contadora especializada en devolución de impuestos.
El empresario dejó de pagar su predial sobre el inmueble en 2010 y ya tiene un adeudo con la ciudad de Miami de 142 mil 488 dólares.
La ruta del dinero y las empresas
Cuando terminaba en México el gobierno de Vicente Fox, en julio de 2005, Javier Rodríguez Borgio fundó la compañía Jorov International, actualmente inactiva.
Le puso como dirección fiscal un edificio en Collins Avenue, la calle más importante del distrito Art Deco de Miami Beach.
El edificio funciona actualmente como un hotel boutique art deco.
Es casi imposible conseguir una habitación en el lugar, ya que su categoría de exclusivo obliga a los clientes a rentar los cuartos con meses de anticipación.
En 1998, Rodríguez Borgio creó la compañía Dorset International Corporation por medio del despacho de abogados Albornoz, Segredo & Weiz.
La utilizó para adquirir el inmueble en Miami Beach por 2.4 millones de dólares.
En mayo de 2007, Dorset vendió el hotel en 10.3 millones de dólares a Catalina Dorset, LLC, su dueña actual. En la transacción ganó cinco veces lo que le había costado la propiedad.
Las redes llegan a Querétaro
A finales de los 90, Javier Rodríguez Borgio creó la empresa Verger International en sociedad con el actor Guillermo Larrea y el político Gerardo Vázquez Mellado, actual
Delegado federal de la Secretaría del Trabajo en Querétaro.
Unos días antes de que se destapara el escándalo de Oceanografía, los hermanos Alejandro y Jorge Vázquez Mellado fueron señalado por conexiones con Tirso Martínez Sánchez, detenido por narcotráfico, delitos contra la salud y lavado de dinero por medio del club de futbol Gallos Blancos de Querétaro, actualmente propiedad de Amado Yáñez.
El funcionario defendió a sus hermanos y dijo al diario Plaza de Armas en Querétaro que el vínculo era falso y que son una familia “aguerridos, pero no tramposos”.
La sociedad Verner fue disuelta en 2001. Pero no fue la única en que estuvieron juntos.
Rodríguez Borgio, Vázquez Mellado y Marco Antonio Reyner Portes Gil crearon también en 1998 Javar International.
Vázquez Mellado apareció por última vez en esta empresa en 2001; dos años más tarde fue disuelta por el dueño de Big Bola.
La dirección registrada para Javar ante la División de Corporaciones de Florida era un departamento en el condominio Santa Maria, sobre Brickell Avenue, el corazón financiero de Miami.
En 1998 la compañía de bienes raíces Altara, propiedad de Rodríguez Borgio, pagó 825 mil dólares por la residencia de tres recámaras y cuatro baños, con embarcadero propio y vista al mar.
Seis años más tarde la vendieron a un ciudadano puertorriqueño por 1.4 millones de dólares (15.4 millones de pesos al cambio de ese año).