En dos meses y medio estará la primera planta potabilizadora que será parte de una red que tendrá una inversión de 21 millones de pesos
PIBSA tenía la concesión de forma indefinida para brindar el servicio del agua en Nueva Galicia, pero será revocada para mayo o junio
“Nueva Galicia Residencial, tu nueva vida”, se lee en el eslogan del fraccionamiento rodeado de parques industriales, que desde sus inicios ha enfrentado problemas de abasto de agua, y que para los vecinos ha significado de verdad un cambio de estilo de vida.
En reuniones con representantes del Ayuntamiento de Tlajomulco de Zúñiga, algunos colonos se quejan de las recomendaciones sobre el uso del agua que llega a sus hogares. Apenas el pasado lunes 13 de enero, se convocó a vecinos a una reunión “para revisar avances”.
En un comunicado enviado a los residentes de Nueva Galicia, firmado por el alcalde Ismael del Toro, se lee:
“Recuerde que especialistas en el tema aseguran que el agua en su fraccionamiento es segura para uso doméstico (lavar, bañarse, limpieza general), sin embargo, no es apta para beber, preparar alimentos (caldos o guisos en general) y para lavar frutas, verduras, carnes, etc”.
El párrafo anterior causó polémica en foros de redes sociales en los que participan vecinos de Nueva Galicia (como el de “Vecinos Nueva Galicia por la calidad del agua”), y en la reunión del pasado lunes a la que convocó el Municipio con los habitantes.
Padres y madres de familia formulan las mismas preguntas: ¿y si mi niño abre la boca cuándo se está bañando?, ¿ahora tendremos que lavarnos los dientes y se tendrá que lavar la fruta con agua de garrafón?
Es una de las zonas que más generan ingresos al Ayuntamiento de Tlajomulco de Zúñiga por pago de predial y otros servicios, y sus habitantes lo saben, por lo que demandan al Municipio una solución al problema, que ha ocasionado cortes de agua y mal servicio de parte de la empresa que otorga el servicio del agua: PIBSA, S.A. de C.V.
Agua administrada por una empresa
La administración de Del Toro logró que PIBSA entregara voluntariamente la concesión, según palabras del director de Servicios Públicos, Érick Tapia Ibarra, en entrevista con Reporte Indigo.
Dicho proceso se espera que sea terminado entre mayo y junio del 2014.
Pero por el momento PIBSA tiene la concesión de forma indefinida para brindar el servicio del agua a los vecinos de Nueva Galicia, cuyo permiso fue dado en sesión de Cabildo en el año 2000.
“En los primeros dos meses del año vamos a estar nosotros como Municipio construyendo la planta potabilizadora que requiere el ayuntamiento. Y para mayo-junio esperamos concluir el proceso administrativo en el cual nos está ayudando también el Departamento Jurídico del Municipio, para poder hacer la entrega de la concesión y ya como Municipio estar otorgando el servicio a los habitantes de Nueva Galicia”, indicó Tapia Ibarra.
Algunos vecinos cuestionan, ¿cuál es la relación entre la empresa que fraccionó Nueva Galicia y PIBSA?
En diversas ocasiones, varios funcionarios del Ayuntamiento invitaron a los vecinos a no pagarles por el servicio a la empresa encargada de llevar el agua a los cotos del desarrollo, para de este modo acelerar el proceso de salida de la empresa, y la entrada del Sistema de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento de Tlajomulco (SIAT).
Agua que no se puede beber
Para todos los cuestionamientos de cambios de hábitos de limpieza que llevarán a los colonos de Nueva Galicia a comprar más garrafones, los empleados del Ayuntamiento tienen un sí por respuesta, “nadie debería tomar agua de la llave, de ningún municipio”.
Para los vecinos esa garantía, por supuesto, que no es suficiente. Los vecinos se sienten intranquilos, aunque el agua del pozo número dos clausurado el pasado 24 de diciembre de 2013, que abastecía a varios cotos del exclusivo fraccionamiento, ya está en la norma, según el Ayuntamiento.
Algunos vecinos hicieron sus propios estudios, donde el arsénico sigue en cifras preocupantes: en hasta .065 miligramos por litro, cuando la Norma Oficial Mexicana vigente (NOM-127-SSA1-200) se estipula que debe ser de .025 miligramos cómo máximo.
Pero el estudio “notariado” que presentó el Ayuntamiento de Tlajomulco -fechado el 26 de diciembre- indica que el agua del pozo clausurado que ya fue reabierto tiene una presencia de arsénico de .020 miligramos por litro.
La diferencia radica en que los vecinos hicieron sus estudios del agua que sale del grifo de sus casas, no directamente del pozo, con lo que la autoridad alega que la contaminación puede venir de los tinacos, tuberías o cisternas de los fraccionamientos.
Por eso en aquella reunión en el Coto Barcelona los vecinos inconformes pidieron estudios de ambas aguas, que sean realizados cada mes, para de este modo monitorear que la calidad no varíe, como se ha visto en los distintos estudios.
El arsénico es acumulativo en el cuerpo y se asocia al cáncer, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), por lo que a los vecinos les preocupan las consecuencias de haber ingerido el agua con dicho elemento.
Pero al menos se necesitan dos meses y medio para que se construya la primera planta potabilizadora que será parte de una red para la que el Municipio planea una inversión de alrededor de 21 millones de pesos.
“Es una inversión de aproximadamente 21 millones de pesos. El día de mañana (ayer) tenemos reunión en la Secretaría General de Gobierno, en el Gobierno del Estado, entre CEA, Secretaría de Salud, el Municipio de Tlajomulco y la Secretaría General de Gobierno”, señaló al respecto Tapia Ibarra.
Agua politizada
“Sí, ya están detectados cuáles son los niveles de arsénico que marcan fuera de norma, ya se está trabajando en las plantas potabilizadoras.
“El arsénico es un elemento natural que se encuentra en el subsuelo, que se encuentra presente con mayor incidencia en los mantos que se encuentran sobreexplotados, el Acuífero de Toluquilla tiene características, y no nada más está en Tlajomulco, se encuentra en municipios circunvecinos también”, señaló el director de Servicios Municipales de Tlajomulco.
Que Tlajomulco de Zúñiga es el único municipio metropolitano que es gobernado por el partido Movimiento Ciudadano, en vez de (como el resto) por el PRI, es un hecho que utilizan como argumento para distintos problemas funcionarios y representantes del partido de oposición.
El caso del agua no parece ser la excepción, las preguntas que hacen algunos funcionarios son: ¿de verdad no hay arsénico en las fuentes de agua de Tlaquepaque?
Sin embargo, puede servir de salida fácil para olvidar el verdadero problema: el agua estuvo (¿o está?) contaminada y los habitantes de algunas colonias afectadas no se sienten seguros con la calidad del líquido con el que se bañan y lavan sus trastes todos los días.
Arsénico en acuífero Toluquilla
Para el director de Servicios Públicos la presencia de arsénico no puede ser exclusiva de Tlajomulco:
“Las cuencas y los mantos freáticos no respetan delimitaciones territoriales, las delimitaciones municipales las crea la ley, pero las cuencas las crea la naturaleza, entonces la cuenca está de Toluquilla, el Acuífero de Toluquilla, pues no es un hecho que nosotros estemos diciendo sino que lo ha dicho la CEA y la Conagua: es un acuífero que se encuentra sobreexplotado y al encontrarse sobreexplotado se tiene que bajar más y más cada vez para poder encontrar agua.
“Los pozos ya tienen profundidades de 300 metros aproximadamente y esto nos produce un incremento en la posibilidad de encontrar este tipo de materiales como el arsénico”, señaló el funcionario.
Cuestionado sobre los otros municipios metropolitanos (integrados al SIAPA) que no presentaron los mismos niveles fuera de norma, indicó:
“La presencia de las fuentes de abastecimiento ahí están. Lo que tú haces con la potabilización es cuando tu extraes el agua de estas plantas potabilizadoras, lo inyectas a las plantas potabilizadoras a través del sistema del pozo y ya después del tratamiento puedes estar dentro o fuera de la norma”.
