La vida en juego, la línea de defensa contra el Covid-19
Integrantes de distintos equipos de futbol americano que actualmente se encuentran en la primera línea de defensa en contra de la pandemia de Covid-19 relatan cómo el deporte les ha servido para enfrentar las tareas en las que diariamente arriesgan su salud para ayudar a la población
Manuel CuéllarLos campeonatos se ganan en equipo. Así como en la cancha los jugadores de futbol americano utilizan su fortaleza para triunfar en los partidos y obtener trofeos, fuera de ella, debido a la emergencia sanitaria por la pandemia de coronavirus Covid-19, integrantes principalmente de la Liga Mayor de México se han unido al equipo de salud para aportar en la contención de la enfermedad.
Tanto jugadores como miembros del staff de equipos como Pumas Acatlán o Frailes de la Universidad de Tepeyac, entre otros, han dejado atrás los botines y uniformes para apoyar a la sociedad ejerciendo su profesión como médicos, enfermeros o camilleros.
Aunque la situación es crítica en México en plena Fase 3 del Covid-19, poner en riesgo su integridad personal es lo que menos preocupa a quienes han dejado por el momento la cancha de juego para sumarse al ‘team’ médico, pues primero está su profesión y después su pasión por el deporte.
“Claro que extraño jugar, pero yo conozco mi juramento de esta profesión, por algo estudio enfermería, por algo busqué trabajar en un hospital, porque me motiva ayudar a la sociedad, y entiendo que ahorita mi posición en este terreno de juego es trasladar a las personas para que sean atendidas lo más rápido posible, es apoyar a mis compañeros, esa es mi función en estos momentos”, dice Víctor Daniel Cruz, jugador de los Frailes del Tepeyac, quien es camillero en el hospital Fernando Quiroz del ISSSTE, en entrevista con Reporte Índigo.
Para la doctora de Pumas Acatlán, esta emergencia sanitaria será solo una anécdota en la historia de México, para lo cual se debe parar a la brevedad la curva de infecciones, razón por la que se ha sumado al grupo de combate.
“Lo que realmente me motiva es hacer algo por la sociedad, que el día de mañana cuando todo esto pase pueda decir: ‘yo ayudé para evitar la propagación del virus en México’, poder contárselo a mis nietos, hacer algo bueno.
Pero ellos no son los únicos que han trasladado la filosofía de ayuda aprendida en el deporte al tema de la salud.
Otros jugadores que ayudan en distintas zonas de México son: Alejandro Loka González, de Búhos IPN; Carlos Moreno, exintegrante de las Águilas Blancas del Politécnico; la seleccionada nacional Karla Villavicencio; Juan Marín, campeón de Liga Mayor en 2019 con Leones Cancún, así como el árbitro Óscar Vera o la porrista de LFA, Odette Núñez.
Todos ellos conforman parte del equipo ofensivo que intenta anotarle un touchdown al Covid-19.
La doctora Barroeta explica que mientras ellos atacan, necesitan que la zona defensiva, es decir, las personas que están en cuarentena, sigan todas las instrucciones para evitar los contagios y poder erradicar el virus lo más pronto posible.
“Hay que ser sinceros, no somos conscientes hasta que nos pasa o hay un caso en la familia o necesitamos el lugar en un hospital porque muchas veces confundimos esta enfermedad con otros síntomas y lo primero que hacen es irse a los hospitales privados, pero cuando en ese momento les dicen que son positivos de Covid-19, la cuenta asciende hasta 70 mil pesos diarios y muchas familias mexicanas no tenemos para pagar eso.
“En ese sentido sí es importante que las personas que no creen que existe este virus tomen conciencia para evitar una propagación más grande y por eso es importante decirles que nosotros, el sector salud, necesitamos de su apoyo y sigan cada recomendación que les hacen”, sentencia.