¿La UdeG del futuro?

Tras la postulación de Tonatiuh Bravo Padilla a la rectoría general de la Universidad de Guadalajara (UdeG) se creó la expectativa de que el entonces rector del  moderno Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) implementaría ese modelo en toda la red, que se formó a finales de los 90 por el líder moral de la UdeG y presidente de la FIL Guadalajara, Raúl Padilla López.

Sin embargo, para el Frente Autónomo Universitario, el Colectivo Estudiantil y el Colectivo Reflexión Universitaria (CRU), conformado en su mayoría por académicos críticos de la situación de la UdeG, dicha modernización ha venido con un aumento en los precios escolares y una velada privatización de la educación superior.

Debido a la limitada transparencia en los portales electrónicos de la máxima casa de estudios del estado, es poco lo que se sabe respecto a las finanzas.

En los últimos tres años, de 2011 al 2013, el presupuesto asignado al CUCEA cambió de 312 millones 123 mil 950 pesos a 425 millones 624 mil 541 pesos, lo que representó un incremento superior a los 113 millones de pesos.  Su matrícula incrementó en poco más de mil alumnos, de 15 mil 722 a 16 mil 890 en el mismo periodo.

De acuerdo a un sondeo realizado por Reporte Indigo en las instalaciones tanto del CUCEA como el Centro Universitarios de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), los alumnos de este último señalan que se encuentra en pésimas condiciones, a diferencia del CUCEA, aunque la matrícula es más baja.

El total de alumnos entrevistados afirmaron que los poco mas de 600 pesos que pagan por semestre no representan un gasto fuerte a sus bolsillos. En el CUCSH se pagan poco menos de 200 pesos. 

Las cifras de ingreso de la Universidad apuntan a que los ingresos generados por servicios escolares han ido en aumento. 

De acuerdo a las estimaciones del presupuesto de la Universidad de Guadalajara, en el CUCEA, el total de los ingresos recabados por matrícula en licenciatura aumentó 803 mil 620 pesos en el 2013, en relación con lo recolectado en 2011; así mismo el ingreso por exámenes aumentó 92 mil 859 en el mismo periodo.

Otro de los rubros que aumentó fue el de las aportaciones voluntarias, con un ligero incremento  superior a los 12 mil pesos, también de 2011 a 2013

Enrique Cuevas Rodríguez, profesor investigador del CUCEA y vocero del CRU, afirma que por medio de estudios han podido detectar que dicho plantel es el más caro de toda la red universitaria y que deben revisarse con detenimiento los montos cobrados a los alumnos, pues a simple vista no demuestran un alto costo.

“La matrícula dentro de la universidad se ha venido encareciendo, no tanto hay que fijarnos en el monto que paga el estudiante semestralmente sino por todos los servicios y todos los costos que tiene que pagar, se le cargan costo de cuota de mantenimiento y esto el CUCEA ha sido ejemplo de ello, es el centro universitario más caro porque los costos adicionales a la matrícula son de los más altos y los rubros se multipliclan”, explicó Enrique Cuevas.

Así mismo, el CUCEA recibe un total de 18 millones 827 mil 283 pesos por concepto de ingresos propios y otras fuentes de financiamiento.

Cabe destacar que el CUCEA también se encarga del manejo del Corporativo de Empresas Universitarias a través de la Secretaría de Vinculación y Desarrollo Empresarial, el cual funciona desde dicho centro y cuyos ingresos del 2013 fueron superiores a los 664 millones de pesos. Se encarga de la administración del complejo Calle 2 ubicado en el cruce de Periferico Norte y Parres Arias, cuyo valor patrimonial es mayor a los 54 millones de pesos

De acuerdo con el académico Enrique Cuevas Rodríguez los cambios en el CUCEA han desviado los verdaderos problemas que debería atender la UdeG y muestra solo un centro universitario “bonito”.

“Efectivamente el CUCEA se ha presumido como uno de los centros universitarios de más alta calidad, nuevamente estamos hablando de indicadores de tipo cuantitativo, los profesores y los estudiantes más que nada sabemos cómo este centro universitario se logró posicionar, por supuesto, hace algunos años, pero que de un tiempo para acá, estamos hablando de cinco años para acá, cuando menos, si no es que más, el CUCEA se ha estancado en mucho”, apuntó Cuevas Rodríguez.

Y agrega: “Realmente lo que hemos visto muchos profesores y sobre todo estudiantes, es que tenemos un centro universitario bonito (…) pero no es suficiente con tener un centro universitario bonito”.

Abajo en el ranking

A pesar de las aplaudidas instalaciones, cuya opinión merecen el visto bueno de los estudiantes del centro según el sondeo, la calificación de algunas carreras no presentan buenos resultados.

Según el ranking “Mejores Universidades 2014” del periódico El Universal, que se presentó a mediados de marzo de este año, cuatro licenciaturas del CUCEA fueron calificadas en dicho estudio: Administración, la cual se encontraba en el lugar 29 de 30 lugares; Mercadotecnia en el 20 de 28; Contabilidad 25 de 30; y Economía, en el 19 de 23 lugares.

Las mejoras en el CUCEA han ido de la mano con la entrada de servicios privados, una sucursal de banco y concesiones a empresas para la distribución de bebidas y alimentos, cuestiones que han mejorado la imagen del centro, pero que son criticadas porque representan mayores costos para el alumnado. 

Aunque los cambios no han permeado en el resto de los centros universitarios, el modelo del CUCEA podría resultar favorable para la mejora de las descuidadas instalaciones, aunque la absorción de nuevos costos terminará en los estudiantes, un modelo más privado que público, de mejora educativa, que pone sobre la mesa el tema de la gratuidad de la educación pública.

Servicios privados en CUCEA

Si algo ha destacado en el Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas es la oferta de servicios por parte de comercios privados, a los cuales se dio paso en dicho centro y cuyos costos han sido denunciados por quienes tienen que consumirlos.

“Una de las quejas más comunes que encontramos en el estudiantado y también en los profesores, que vivimos practicamente en la universidad por los horarios de trabajo que tenemos, son los costos en servicios de alimentación, y estos a su vez están subrogados a empresas de tipo privado, de ahí que sean tan caros”, señaló Enrique Cuevas Rodríguez, profesor investigador del CUCEA.

De acuerdo al padrón de concesiones de la Universidad de Guadalajara en su portal web, los únicos contratos de ese tipo que se han dado al interior de la casa de estudios han sido en el CUCEA.

En los demás centros universitarios existen puestos de comida al interior de los mismos; sin embargo este servicio es proporcionado y atendido por el propio plantel y no comercios privados, como sucede en CUCEA.

En el año 2011 se entregaron seis contratos de concesiones: cuatro para la Embotelladora Zapopan S.A. de C.V. para la distribución de bebidas hidratantes, jugos, néctares y agua embotellada y garrafones. Y cuya empresa volvió a firmar la concesión en 2012.

También en el 2011 se otorgó una concesión a la empresa Geusa de Occidente S.A. de C.V. para la distribución de té helado al interior del CUCEA.

Y a la salida de Tonatiuh Bravo, a mediados del pasado año 2013, se dio entrada a empresas como Pepsico, Bimbo, Sello Rojo y Bebidas Mundiales S. de R.L de C.V., cuya empresa se dedica a la distribución del Powerade.

Según el documento de concesiones de la UdeG, la distribución de bebidas “Del Valle”, cuyo contrato tendría vigencia de tres años, está pendiente. 

Tambíen existe un banco Santander al interior del centro. 

Así mismo hubo un intento de cobrar el uso de estacionamiento en CUCEA, esto cuando el actual rector general aún fungía como rector de centro. De acuerdo al dictamen 015/2013, se pretendía cobrar diez pesos a los externos y una pequeña cuota de un peso 67 centavos a las personas que integraran la comunidad del CUCEA.

Dicho intento fue denunciado tanto por alumnos, académicos y administrativos, y por lo tanto se echó para atrás.