La “travesía por la vida” zapatista a Europa
A 20 años de distancia de “La Marcha del Color de la Tierra” y el arribo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) a la Ciudad de México, ahora los zapatistas están por emprender la “Travesía Por La Vida. Capítulo Europa”. Este 3 de mayo su “Escuadrón 421”, con una mayoría de mujeres, zarpará hacia el Viejo Continente en el navío “La Montaña”
Luis HerreraYa es sólo cuestión de días para que la delegación marítima del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) emprenda la denominada “Travesía Por La Vida. Capítulo Europa”, un viaje que llevará a los integrantes zapatistas a recorrer casi una treintena de países europeos para encontrarse con los grupos de lucha anticapitalista de aquellas tierras.
El 10 de abril del 2021 los zapatistas dieron a conocer detalles del programa que seguirán sus delegados: “El día 26 de abril del 2021 saldrán rumbo a un puerto de la República Mexicana. Llegarán a más tardar el 30 de abril y abordarán la embarcación que hemos bautizado como ‘La Montaña’. Durante dos o tres días con sus noches, permanecerán a bordo del barco, y el día 3 de mayo del 2021, día de la Santa Cruz, Chan Santa Cruz, el navío ‘La Montaña’ zarpará con nuestr@s compañer@s con destino a las costas europeas, en un viaje que se supone tomará de seis a ocho semanas. Se calcula que en la segunda mitad del mes de junio del 2021 estarán frente a las costas europeas”.
Unos días después, el 17 de abril de 2021, el EZLN publicó que su delegación marítima llevará el nombre de “Escuadrón 421”, por esta razón: “Siete personas, siete zapatistas, forman la fracción marítima de la delegación que visitará Europa. Cuatro son mujeres, dos son varones y unoa es otroa. 4, 2, 1 (sic)”.
Los nombres de los integrantes del “Escuadrón 421” zapatista son: Lupita, de 19 años; Carolina, de 26 años; Ximena, de 25 años; Yuli, de 37 años; Bernal, de 57 años; Darío, de 47 años; y Marijose, de 39 años.
En ese mensaje del EZLN, firmado por el subcomandante Galeano (antes subcomandante Marcos), se señala, inclusive, que será precisamente Marijose la primera en bajar del barco una vez que alcancen el continente europeo, y que también ya tienen definidas cuáles serán las primeras palabras que expresará al momento del arribo.
Así que la primera planta que se posará sobre suelo europeo (claro, si es que nos dejan desembarcar) no será de un hombre, tampoco de una mujer. Será de unoa otroa (sic)”, escribe el subcomandante.
Lo que dirá Marijose al pisar tierra firme, será: “A nombre de las mujeres, niños, hombres, ancianos y, claro, otroas zapatistas, declaro que el nombre de esta tierra, a la que sus naturales llaman ahora ‘Europa’, de aquí en adelante se llamará: SLUMIL K´AJXEMK´OP, que quiere decir ‘Tierra Insumisa’, o ‘Tierra que no se resigna, que no desmaya’. Y así será conocida por propios y extraños mientras haya aquí alguien que no se rinda, que no se venda y que no claudique”
El porqué de la travesía zapatista
Desde el 5 de octubre de 2020 en que anunciaron por primera vez que partirían hacia Europa, los zapatistas han ido publicando diversos escritos donde comparten sus motivos para haber trazado esa travesía internacional, así como los objetivos que se han fijado para la misma
Por ejemplo, en su escrito del 1 del enero de 2021, titulado “Primera Parte: Una Declaración…Por La Vida”, los zapatistas señalan que más allá de todas las diferencias que puede haber entre las personas y sus naciones, hay algunas “pocas cosas” que los unen.
“El que hacemos nuestros los dolores de la tierra: la violencia contra las mujeres; la persecución y desprecio a los diferentes en su identidad afectiva, emocional, sexual; el aniquilamiento de la niñez; el genocidio contra los originarios; el racismo; el militarismo; la explotación; el despojo; la destrucción de la naturaleza”.
Detrás de todos esos males, aseveran, está el sistema capitalista como causa universal de los mismos, por eso, otro elemento que une a los pueblos es: “El entendimiento de que es un sistema el responsable de estos dolores. El verdugo es un sistema explotador, patriarcal, piramidal, racista, ladrón y criminal: el capitalismo. El conocimiento de que no es posible reformar este sistema, educarlo, atenuarlo, limarlo, domesticarlo, humanizarlo”.
Y como los efectos del capitalismo son globales, la lucha también debe serlo. De ahí que otro vínculo unificador sea: “El compromiso de luchar, en todas partes y a todas horas –cada quien en su terreno– contra este sistema hasta destruirlo por completo. La supervivencia de la humanidad depende de la destrucción del capitalismo. (…) La certeza de que la lucha por la humanidad es mundial. Así como la destrucción en curso no reconoce fronteras, nacionalidades, banderas, lenguas, culturas, razas; así la lucha por la humanidad es en todas partes, todo el tiempo”.
Diálogo global
A partir de estas reflexiones, los zapatistas determinaron que van a “realizar encuentros, diálogos, intercambios de ideas, experiencias, análisis y valoraciones entre quienes nos encontramos empeñados, desde distintas concepciones y en diferentes terrenos, en la lucha por la vida”, pues “conocer lo diferente es también parte de nuestra lucha y de nuestro empeño, de nuestra humanidad”
El llamado a participar en estos encuentros lo hace el EZLN a “quienes comparten las mismas preocupaciones y luchas parecidas, a todas las personas honestas y a todos los abajos que se rebelan y resisten en los muchos rincones del mundo”
A 20 años de distancia de “La Marcha del Color de la Tierra”, la que realizó el EZLN desde Chiapas hasta la Ciudad de México en 2001, la travesía que ahora emprenderá hacia Europa será apenas la primera estación, pues también decidieron “que estos s encuentros y actividades se realicen en los cinco continentes”.
En el escrito del 22 de diciembre de 2020 titulado “Tercera Parte: La Misión. De cómo Defensa Zapatista trata de explicarle a Esperanza cuál es la misión del zapatismo y otros felices razonamientos”, firmado por el Subcomandante Galeano, se lee que “Defensa Zapatista” dice lo siguiente, dirigiéndose a “Esperanza”:
“Aguantamos la tormenta con lo que sabemos, pero ya estamos preparando lo que sigue. Y lo preparamos ya de una vez. Por eso hay que llevar la palabra lejos. No importa si quien la dijo ya no va a estar, sino que lo que importa es que llegue la semilla a buena tierra y que, donde ya hay, se desarrolle. O sea apoyar. Esa es nuestra misión: ser semilla que busca otras semillas”.