La sombra del anfitrión, corrupción en Qatar

La sede mundialista se ha visto opacada por diversos factores que van desde actos de corrupción en la asignación del evento hasta racismo y explotación laboral
Francisco Sánchez Francisco Sánchez Publicado el
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Al margen de las violaciones a los derechos humanos, la otra gran “mancha” para Qatar fueron los rumores de que fue seleccionada gracias a presuntos sobornos; sin embargo, esta versión fue negada por las autoridades del país anfitrión a través de una producción de Netflix titulada “FIFA Uncovered”.

En el documental se le plantea la pregunta a un funcionario qatarí considerado clave, Hassan Al-Tawadi, líder de la candidatura en 2019 y quien ahora encabeza el comité organizador de la Copa del Mundo, si participó en la oferta de 1.5 millones de dólares a cada uno de los tres votantes africanos en la FIFA.

Algo que la informante Phaedra Almajid, ha afirmado durante más de una década, al decir que estaba en una habitación de un hotel en Angola con Al-Thawadi, en enero de 2010, cuando se ofreció dinero a tres votantes, de un total de 24, que debían otorgar las sedes mundialistas de 2018 y 2022 a finales de aquel año.

“Sus acusaciones son inherentemente falsas, y hay hechos que lo demuestran”, dice el funcionario qatarí.

Sin embargo, Issa Hayatou, Jacques Anouma y Amos Adamu, los entonces directivos de FIFA implicados, fueron suspendidos debido a irregularidades financieras antes de las votaciones de la sede mundialista. Los tres han negado las acusaciones.

Hace unos días, Joseph Blatter, presidente del máximo órgano del futbol en aquel entonces, admitió en una entrevista que calificó la decisión de dar a Qatar la sede mundialista como un error.

“Fue una mala decisión. Y yo soy responsable de ello porque era el presidente en ese momento”, dijo quien también enfrentó un juicio por malos manejos financieros en la FIFA.

El exdirectivo resaltó la petición de activistas y varias federaciones integrantes de la FIFA  de crear un fondo de compensación para las familias de los trabajadores que han muerto o resultado heridos en la construcción de la infraestructura del Mundial.

Pero, “¿qué podría decir la FIFA si su presidente está metido en la misma cama que Qatar?”, dijo Blatter sobre Gianni Infantino, mandamás del organismo, quien vive en Doha desde hace unos meses.

Así, bajo este manto de irregularidades, el domingo rodará el balón en Qatar, arrancará la fiesta del futbol, y la afirmación de Maradona se convierte en interrogante.

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