La negación de la violencia feminicida
El nuevo gobierno niega la existencia de una ‘ola de feminicidios’ en la entidad, aunque los registros oficiales han destacado un incremento de asesinatos contra mujeres en el último año y la Segob activó la alerta de violencia de género
Jonathan ÁvilaLa violencia contra las mujeres parece no tener la importancia suficiente en el nuevo gobierno de Jalisco. La entidad recibió hace unas semanas la declaratoria de Alerta de Violencia de Género, pero para el gobernador Enrique Alfaro Ramírez las recientes muertes de mujeres son parte de la dinámica de pugnas del narcotráfico.
En las últimas semanas del 2018 y en la primera del 2019, que corresponden con los primeros días del gobierno de Alfaro, ocurrieron más de 20 homicidios de mujeres, indican cifras preliminares del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF).
Del 6 de diciembre, un día después en que el gobernador tomó protesta, al 7 de enero, el ICJF registró 22 muertes de mujeres por arma de fuego. También hubo otras por los que comúnmente se reconoce la violencia de género estrangulación (5), golpes (3) y con objetos punzo-cortantes (2).
Por estas muertes los medios destacaron una presunta oleada de feminicidios en la entidad, lo que provocó una respuesta similar tanto del fiscal general, Gerardo Solís Gómez, como del gobernador
La coyuntura de inseguridad ha llevado a que el mandatario niegue el contexto de violencia que se vive contra las mujeres de Jalisco, pues aún cuando presuntamente se podría tratar de muertes por el narco se debe revisar un contexto más amplio en las implicaciones del género de la víctima, señala Patricia Ortega Medellín, académica de la Universidad de Guadalajara y una de las expertas que participó en el Grupo de Trabajo que emitió la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres en Jalisco.
Otro de los puntos que se destaca es que la emisión de la alerta marca la pauta de una tendencia preocupante de la violencia para las instancias nacionales, donde los análisis de las muertes y usos violentos contra las mujeres no pueden ser tomados a la ligera.
Situación alarmante
Las cifras de diversas dependencias muestran que la violencia contra la mujer ha sido un suceso en todo el 2018 y no sólo de sus últimas semanas, como para quedar explicado en una coyuntura de disputa de grupos criminales en la entidad.
El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en su información delictiva y de emergencias con perspectiva de género, expone que cinco de los principales municipios de Jalisco están entre los 100 con mayor cantidad de presuntos feminicidios.
Los mismos registros dan cuenta de que Jalisco está en el tercer lugar en lesiones dolosas contra mujeres, por las cuatro mil 200 averiguaciones previas que abrió la Fiscalía General del Estado entre enero y noviembre de 2018.
En el mismo periodo, el Secretariado Ejecutivo da cuenta de 181 homicidios dolosos cometidos contra mujeres en Jalisco, lo que coloca a esta entidad en la quinta más violenta contra este género a nivel nacional. Según las últimas cifras de este organismo, que contemplan las muertes hasta el 30 de noviembre, en este estado se abrieron 25 carpetas de investigación por el tipo penal del feminicidio.
No obstante el bajo número de feminicidios oficiales en la entidad, que ponen a Jalisco en el lugar doce, un análisis del Instituto de Información Estadística y Geográfica (IIEG) del estado muestra que sí hubo un aumento importante en los decesos de mujeres en 2018.
El documento que compara las víctimas de feminicidio, homicidios dolosos y parricidios contra mujeres, ocurridos entre enero y octubre, de 2017 y 2018, muestra que en el último año se incrementó un 15.8 por ciento el feminicidio. Mientras que la cifra de homicidio doloso contra mujeres es más alarmante, pues en el periodo comprendido se dieron 91.6 por ciento más muertes en 2018 que un año antes.
En total, estos tres tipos de muertes, según lo muestra el IIEG Jalisco, incrementaron 66.4 por ciento en 2018, es decir, la situación de la violencia contra las mujeres empeoró.
La respuesta de las autoridades y que se comparte en algunos análisis académicos es que no todas las muertes de mujeres pueden ser consideradas como feminicidios. El fiscal general de Jalisco ha explicado que al ocurrir la muerte de una mujer se le investiga primero bajo el protocolo de feminicidio.
Protocolo mal implementado
De las 13 muertes de mujeres ocurridas en las primeras semanas de diciembre, sólo en tres se comprobó el tipo penal de feminicidio según el protocolo, explicó el fiscal Gerardo Octavio Solís. Dicha herramienta ministerial señala que para saber si una muerte femenina es un feminicidio se debe conocer al victimario, cómo llevó a cabo la muerte y qué contexto tuvo.
El problema, explica la catedrática Patricia Ortega, es que durante las investigaciones sobre la implementación de protocolo de feminicidio por parte del Grupo de Trabajo de la alerta se detectó que éste no se realizaba debidamente.
La experta también agrega que para poder señalar que sólo tres muertes están contempladas como feminicidio en diciembre de 2018, se debe haber contado con un dictamen por parte de la Unidad de Análisis y Contexto y no solo por parte de los investigadores de la Fiscalía General.
Patricia Ortega recalca la importancia del contexto, pues con esto se pueden ampliar la perspectiva de las muertes violentas, donde hay motivos de género en los asesinatos también en mujeres atropelladas, ahorcadas, muertas bajo sumersión o caídas, lo que amplia a 49 el número de mujeres que podrían haber sufrido violencia de género entre el seis de diciembre y el siete de enero, según el IJCF.
Guadalupe Ramos, del Comité de América Latina y el Caribe para la Defensa de los Derechos de la Mujer (CLADEM) en Jalisco, explica que el 80 por ciento de las muertes de mujeres han sido feminicidios según sus propios registros.