La militancia, el otro reto para permanencia del PAN
El PAN encara un nuevo proceso interno para elegir a su dirigencia nacional mientras los aspirantes a relevar a Marko Cortés acusan que no hay piso parejo, una problemática que se viene dando al menos desde 2015, y a la cual se suman la falta de identidad y una postura clara como partido y oposición a AMLO
Carlos MontesinosLa militancia de Acción Nacional (PAN) consiste de 270 mil 799 afiliados en el país, por lo que apenas libra el límite del 0.26 por ciento del padrón electoral que la Ley General de Partidos Políticos establece para mantener el registro nacional.
Por este motivo, incrementar el número de militantes registrados ante el PAN y el Instituto Nacional Electoral será uno de los grandes retos de quien asuma la dirigencia tras el proceso interno.
Al respecto, Ernesto Ruffo, quien encabezó la actualización del padrón de militantes panistas en 2014, señala a Reporte Índigo que las afiliaciones han sido bloqueadas como un mecanismo del grupo en el poder del que emanan tanto Ricardo Anaya como Marko Cortés para mantener el control del partido.
“La afiliación ha estado cerrada, en términos prácticos, en forma absoluta. De cuando en cuando hacen una apertura sorpresiva para afiliar a algún padrón procreado bajo el control de la élite. Son chispazos, se abre y se cierra, pero no es más que por el interés de continuar con el control político de la pandilla. La afiliación debe de estar permanentemente abierta al público y ser presencial. Eso le quitaría el control al PAN burócrata, al que se va a trabajar a los gobiernos.”
En tanto, José Manuel Urquijo, estratega político, opina que es un “foco rojo” que el PAN no tenga un registro claro de sus militantes y que su padrón se encuentre envuelto en polémicas sobre su utilidad o hasta su existencia. Agregando que la dirigencia emanada del proceso interno deberá lidiar con esta situación a la par que define la identidad ideológica del partido.
Es un foco rojo que el PAN no tenga un registro claro de sus militantes y que su padrón se encuentre envuelto en polémicas sobre su utilidad o hasta su existencia.
“Es un reto para la próxima dirigencia nacional. Quien encabece el partido tendrá que buscar la forma de aumentar la militancia, pero ¿bajo qué argumento, qué propuesta ideológica, qué plataforma de narrativa alterna? De otra manera, si simplemente es en contra de López Obrador, sin ofrecer una opción distinta clara de proyecto al que ofrece el régimen actual, simple y sencillamente se van a quedar con lo que tienen hoy.”