Las mejoras en el Metro de la Ciudad de México no se encarrilan.
A seis años del incremento del boleto de este sistema de transporte, diez de los once compromisos que se anunciaron en ese entonces no se han cumplido.
El 5 de marzo una falla en las escaleras eléctricas dejó a ocho personas lesionadas en la estación Mixcoac de la Línea 7 y el 9 de febrero también hubo dos lesionados en la terminal de Tacubaya por la misma causa
En el 2013, el Gobierno capitalino a cargo de Miguel Ángel Mancera subió de 3 a 5 pesos el precio del boleto del Metro con la promesa de que habría una mejora en el servicio.
Pero al cierre de ese sexenio, en diciembre de 2018, aún se adeudaban la mayoría de estos acuerdos. Incluso se han sumado otros problemas con los que diariamente tienen que lidiar millones de usuarios, como los recientes accidentes por fallas en escaleras eléctricas.
De los once puntos anunciados en el 2013 solo el número 6, que consiste en incorporar mil 200 policías más, fue el que se cumplió, de acuerdo con la información disponible en la página de internet del Sistema de Transporte Colectivo (STC).
Mientras que los otros compromisos presentan avances entre el 10 y el 40 por ciento en el desarrollo del proyecto, de acuerdo con los datos publicados.
El primer acuerdo fue la compra de 45 trenes nuevos con aire acondicionado para la Línea 1 y doce trenes más para la Línea 12. Pero solo hay un avance del 12 por ciento en la gestión y del 40 por ciento del desarrollo del proyecto, según la información.
“Actualmente se encuentra en proceso de elaboración de Ficha Técnica para la solicitud de multianualidad ante la Secretaría de Finanzas del Distrito Federal, los cuales tienen un avance del 40 por ciento, asimismo se cuenta con los alcances y programas de ejecución, los cuales vienen integrados en la especificación técnica para la adquisición de 45 trenes para Línea 1”, se señala
En el 2016, el SCT adquirió 10 de los 45 convoyes anunciados en el 2013 a través de un contrato otorgado a la empresa CAF México. Según el Fideicomiso Maestro del Sistema de Transporte Colectivo, los otros 35 trenes no se compraron por deficiencias administrativas, falta de recursos presupuestados y el incremento del cambio peso-dólar.
Sin embargo, el pasado 6 de marzo, la actual directora del Metro, Florencia Serranía, anunció que apenas iniciaría operaciones el primero de estos trenes de la Línea 1, conocido como “Toro” e informó que de los 10 trenes comprados a CAF sólo se han entregado 3.
Entre los otros compromisos pendientes se encuentra la renovación integral de la Línea 1 y remodelación de estaciones, dar mantenimiento mayor a los 45 trenes de la Línea 12, la reparación de 105 trenes fuera de servicio, la mejora de tiempos de recorrido de trenes y la sustitución de 50 escaleras eléctricas por nuevas en la Línea 1, 2 y 3.
Estos acuerdos se establecieron entre el Metro y la extinta Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) en el 2013, durante la administración de Miguel Ángel Mancera, como una forma de compensación ante el encarecimiento de la entrada
El costo de esta decisión tuvo consecuencias políticas, pues fue uno de los primeros reclamos que los capitalinos le hicieron a Mancera, quien había llegado con un alto nivel de aprobación a la jefatura de Gobierno.
Pero no fue la única secuela. En el 2016, la Comisión de Derechos Humanos (CDH) local emitió la recomendación 14/2016 con el fin de que el STC mejorara las condiciones de los usuarios a bordo de este sistema de movilidad.
Aunque fue aceptada por el entonces director del Metro, Jorge Gaviño, quien hoy es diputado local por el PRD, éste se negó a aceptar los plazos y términos que dio la dependencia.
Acusan rapiña y abandono
A poco más de tres meses de llevar la dirección, Florencia Serranía, la titular del SCT, ha dicho que se recibió al organismo en un estado de rapiña, canibalismo y abandono.
“No estamos aquí para buscar culpables ni hacer una cacería de brujas, ese no es nuestro trabajo. Nuestro labor es poner más trenes en beneficio de los 5.5 millones de usuarios”, dijo.
5.5
Señaló que en los próximos días se presentará un diagnóstico de las condiciones del Metro y dijo que se está en proceso para firmar un contrato para cambiar 90 escaleras eléctricas.
Esto lo informó luego de que el pasado 5 de marzo una falla en las escaleras eléctricas dejara a ocho personas lesionadas en la estación Mixcoac de la Línea 7.
El 9 de febrero pasado también dos pasajeros resultaron lesionados en las escaleras eléctricas de la estación Tacubaya por sobrecupo, dio a conocer la dependencia.
Promesas sin cumplir
El retiro de vagoneros y bocineros de las instalaciones del Metro fue una promesa que se hizo en el 2013, tras el incremento del boleto, pero está en el olvido.
Joel Ortega, entonces titular del Sistema de Transporte Colectivo (SCT), dijo que con la contratación de mil 200 agentes de la Policía Bancaria e Industrial (PBI) habría operativos permanentes para sacar a los ambulantes.
Pero a la fecha los vendedores informales continúan operando en los vagones, incluso en la zona reservada para mujeres, donde los hombres tienen restringido el acceso.
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Además, los comerciantes irregulares se han adueñado de pasillos, escaleras y accesos de entrada y salida en estaciones como Cuatro Caminos, Indios Verdes, Pantitlán y Peñón Viejo.
Otro de los problemas que los usuarios aún padecen son la falta de aire acondicionado, lámparas fundidas y escaleras eléctricas que no funcionan.
En los últimos meses también se ha registrado un repunte en el número de quejas y denuncias de pasajeras por acoso e intento de sustracción en el interior y en las inmediaciones de las instalaciones.
