El conflicto en el interior de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) comienza a menguar o, al menos, eso parece.
El viernes pasado, los huelguistas dieron muestras de sus intenciones de acabar con la huelga que casi llega a los 100 días con la entrega de tres de los cinco planteles que tiene la institución académica.
Los centros escolares que el Consejo Estudiantil de la universidad del Gobierno del Distrito Federal liberó son Centro Histórico, Cuautepec, San Lorenzo Tezonco y Del Valle.
De acuerdo con los detractores de la rectora Esther Orozco, la entrega de los planteles es una muestra del interés que tienen en negociar, pero eso no significa que la lucha haya claudicado.
El responsable de formalizar la entrega fue el alumno Ángel Quetzalcoatl Rojas y estuvieron presentes huelguistas que no dejaron de lanzar gritos de apoyo a los anti-orozquistas, mientras las autoridades se limitaron a revisar las instalaciones.
La dinámica se replicó en el plantel Cuautepec, donde al mediodía se
oficializó la liberación del centro educativo.
Tal y como anunciaron, el conflicto comenzaría a destrabarse con el término del sexenio de Marcelo Ebrard al frente de la ciudad de México.
Pero por diferencias históricas con la rectora anuncian que las protestas e intenciones de derrocar a Orozco de la dirección de la UACM seguirán siendo una prioridad.
Mientras tanto Víctor Campos, uno de los integrantes del Comité, insistió en que el movimiento gana con la entrega de los planteles, ya que el objetivo primordial era que el Consejo Universitario tomara protesta.
