En el marco de la aprobación de la Ley Garrote, las protestas que Andrés Manuel López Obrador (AMLO) abanderó en su natal Tabasco –por supuestos fraudes electorales e injusticias a campesinos– resurgen del pasado y lo han colocado en el foco de atención de sus adversarios, quienes consideran que el presidente cayó en una contradicción que incluso lo hubiera llevado a prisión.
En días pasados, la mayoría del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) aprobó una iniciativa en el congreso de Tabasco que tiene como objetivo castigar a quienes se manifiesten con marchas o bloqueos en las carreteras o impidan la ejecución de obras públicas, con 10 y hasta 20 años de cárcel.
El nuevo gobernador de la entidad, el morenista Adán Augusto López Hernández, fue quien envió la propuesta al Congreso del Estado.
En este sentido, los artículos 299; 306; 307 y 308 del Código Penal de Tabasco fueron modificados y se adicionarán el artículo 196 Bis; y del artículo 308 Bis.
La supuesta contradicción
AMLO nació el 13 de noviembre en Tepetitán, población del municipio de Macuspana, en Tabasco. Durante los años 90, el presidente encabezó varias protestas en la entidad por presuntos fraudes electorales e injusticias contra los campesinos.
En 1988, López Obrador compitió por la gubernatura de Tabasco, mientras era presidente del Partido de la Revolución Democrática (PRD), sin embargo denunció que los gobiernos priistas habían cometido fraude electoral e inició una marcha a la que llamó “éxodo por la democracia”.
El destino era el entonces Distrito Federal, capital a la que llegó con 5 mil personas, en enero de 1992, después de haber partido sólo con 150 personas en noviembre del 91.
AMLO competiría nuevamente por el gobierno de la entidad en 1994, pero una vez más fue vencido por el candidato del Partido de la Revolución Institucional (PRI), Roberto Madrazo, con quien se encontraría en el 2006 para competir por la presidencia de México.
Para exigir justicia a más de 40 campesinos y pescadores que habrían sido afectados por la actividades de Petróleos Mexicanos (Pemex), Andrés Manuel abanderó en 1996 los bloqueos en varios pozos de la empresa estatal.
Incluso, durante las elecciones del 2006, sus adversarios utilizaron varias imágenes de estas protestas para evidenciar que el tabasqueño era violento, aunque hasta el día de hoy el presidente ha negado esta consideración.
De acuerdo con Tabasco Hoy, declaró el estado, “territorio de desobediencia civil”, y “convocó” e “incitó” a sus seguidores –según los diarios del momento– a aislar las instalaciones de Pemex.
No estamos dispuestos a seguir viviendo en la miseria, en tanto que una empresa supuestamente propiedad de la nación extrae nuevas riquezas, expresó entonces.
Asimismo, llamó a los tabasqueños a que no pagaran la luz y a impedir que se hicieran nuevos pozos.
Cuando lleguen a cortarnos la luz, a desalojarnos de la tierra o de nuestra vivienda, tiren cuetes para avisar a todos, que se toquen las campanas o el caracol para llamarnos y correr a defender, agregó.
Si usted, señor Presidente @lopezobrador_ hiciera esto en Tabasco hoy en día, habría pasado hasta 13 años en la cárcel. Esto según el Art. 308 de la Ley Garrote aprobada por Morena.
La doctrina de usted y su partido es el autoritarismo y la hipocresía. pic.twitter.com/CKjlx3asta
— Julen Rementeria (@julenrementeria) July 30, 2019
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Alcanzaría prisión
En días pasados, la senadora del PAN, Kenia López Rabadán, aseveró que AMLO tendría más de 50 años de prisión si se actuara conforme a la Ley Garrote.
¿Cuánto le hubieran dado a López Obrador cuando tomaba los pozos petroleros?, cuatro veces, cuatro veces tomó los pozos petroleros, 13 años, digo porque si es así pues entonces estaría o hubiera estado más de 50 años en la cárcel, señaló la panista.
