A pesar de que la afectación es para más de 33 mil 500 alumnos de los 20 planteles, todo indica que las autoridades del Instituto de Educación Media Superior del Distrito Federal no buscaron tender un puente con la dirigencia del Sindicato de la Unión de Trabajadores del IEMS.
Desde ayer fueron cerrados los planteles y algunos sindicalizados hacen guardias afuera de ellos.
Los casi mil agremiados del Sindicato de la Unión de Trabajadores del Instituto de Educación Media Superior marcharán hoy a las oficinas centrales del Gobierno del Distrito Federal (GDF), para buscar una reunión con el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera Espinosa, o la secretaria de Gobierno del DF, Patricia Mercado.
Karla Hernández Santoyo, secretaria de Prensa y Propaganda del SUTIEMS, explicó que debido a la dura posición del director general del IEMS, Ulises Lara, buscarán diálogo directo con el mandatario local, a fin de poner sobre la mesa de negociación un incremento salarial del 20 por ciento.
“A las diez de la mañana en mitin en las oficinas centrales a fin de emprender las mesas de negociación”, acotó.
“Nos parece que siempre nos mandan a diversos actores a negociar y ahora buscamos diálogo directo con Mancera. Somos el sindicato mayoritario con 960 trabajadores afiliados, lo que nos permitió conforme a derecho cerrar de manera pacífica los 20 planteles y el área central”, declaró la también docente en el plantel de Álvaro Obregón 1.
Cuestionada respecto a si encontraron alguna oposición al cierre de planteles por parte de grupos de estudiantes o de profesores, la integrante del sindicato explicó que tienen el apoyo de su base e incluso de algunos estudiantes, por lo que desde las seis de la mañana de ayer se cerraron con éxito los 20 planteles.
Las demandas sindicales
Mientras el Sindicato plantea un incremento salarial del 20 por ciento, la propuesta del GDF alcanza apenas el 3.5 por ciento.
Hernández Santoyo detalló que el Gobierno del Distrito Federal (GDF) ha incumplido en la revisión del Contrato Colectivo del Trabajo y la instalación de las mesas como lo prometió en su momento la secretaria de Educación, Alejandra Barrales Magdaleno.
“A Barrales sí la aceptamos como interlocutora siempre y cuando acuda a negociar con voz resolutiva”, acotó Hernández Santoyo.
El SUTIEMS tiene siete años de vida sindical en el Distrito Federal. Se conformó en el sexenio de Marcelo Ebrard Casaubón cuando obtuvo su registro sindical en junio de 2008 por parte de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje.
Dos años después de su reconocimiento, en el 2010 hizo estallar la primera huelga del IEMS-DF con la demanda (como el de ahora) de un incremento salarial y la reinstalación de algunos integrantes de la plantilla de profesores que habían sido despedidos.
Un año después de la primera huelga, el Sindicato de Trabajadores logró que las autoridades revisaran el Contrato Colectivo de Trabajo en el año 2011.
Del cual se desprenden, aseguran, muchos de los pendientes que el GDF no cumplió, como la instalación de las Comisiones Mixtas Transitorias, basificación y tabuladores.
Ya con Miguel Ángel Mancera al frente del Gobierno del Distrito Federal, dicho sindicato estalló en mayo de 2013 la segunda huelga en la historia del Instituto de Educación Media Superior del Distrito Federal que opera los 20 planteles de educación gratuita.
Fue desde ese movimiento que la administración de Mancera, teniendo como secretaria de Educación a Mara Robles, firmó el reglamento interior de trabajo que permitió definir claramente quién era trabajador de base y quiénes de confianza.
Luego vino una tercera huelga en noviembre de 2013 y una cuarta en noviembre de 2014.
Lejos de toda premura para que las actividades escolares reinicien lo más pronto posible en los 20 planteles de la capital, Ulises Lara, director del IEMS, abrió la posibilidad de sentarse a negociar con el Sindicato de Trabajadores hasta el viernes próximo, por lo que dio por perdida toda esta semana.
Aunque los alumnos cursan la recta final de este semestre, que termina en diciembre próximo, el funcionario confió en que no se afecte ni se pierda el ciclo escolar debido a la huelga.