La deuda secreta de Emilio

La discrecionalidad en el manejo de los recursos públicos por parte del gobernador de Jalisco Emilio González Márquez lo ha llevado a endeudarse de varias formas.

Ahora, sale a la luz un endeudamiento a corto plazo de mil 400 millones de pesos con la banca.
Y es que el gobierno saliente se caracterizó por ser dadivoso, pues no discriminó apoyos a entes privados como televisoras, o a la propia Iglesia Católica.

González Márquez aprovechó la mínima coyuntura para solicitar créditos bancarios para paliar sus gastos excesivos de gobierno.

Paloma Robles Paloma Robles Publicado el
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por ciento creció la deuda de Jalisco de 2006 a 2011
"La deuda también es superior al presupuesto que tiene toda la Secretaría de Desarrollo Humano del Estado y de la Procuraduría del Estado"
El Ejecutivo solicitó créditos a corto plazo en repetidas ocasiones en los últimos dos años para financiar "necesidades urgentes"
Solicitar créditos de corto plazo no es un asunto ajeno a ningún gobierno, “el problema es que no se le informe a la gente”, señaló Harold Dutton, académico de la UdeG

La discrecionalidad en el manejo de los recursos públicos por parte del gobernador de Jalisco Emilio González Márquez lo ha llevado a endeudarse de varias formas.

Ahora, sale a la luz un endeudamiento a corto plazo de mil 400 millones de pesos con la banca.
Y es que el gobierno saliente se caracterizó por ser dadivoso, pues no discriminó apoyos a entes privados como televisoras, o a la propia Iglesia Católica.

González Márquez aprovechó la mínima coyuntura para solicitar créditos bancarios para paliar sus gastos excesivos de gobierno.

Desde los Juegos Panamericanos hasta La Ruta del Peregrino, su administración se caracterizó por proyectos millonarios que terminaban siendo liquidados con recursos de pensiones del estado o hasta del fondo para emergencias.

A finales de 2011 solicitó un crédito por mil 500 millones de pesos para seguridad y otro de más de 900 millones para subsanar los daños en la costa sur ocasionados por el huracán Jova.

Lo anterior aunque el gobierno pagó por un seguro de riesgo en caso de un desastre natural en la costa del estado.

Por otro lado, el gobierno de Emilio invirtió el dinero público a proyectos de infraestructura e imagen, y nunca transparentó la totalidad de los contratos firmados.

Un gasto desmedido que dejó al Gobierno de Jalisco con problemas de liquidez.

Por eso la administración de González Márquez tuvo que solicitar créditos a la banca que no forman parte de la deuda pública oficial.

El Ejecutivo solicitó créditos a corto plazo en repetidas ocasiones en los últimos dos años para financiar “necesidades urgentes”.

Se trata de seis créditos “quirografarios” que contrató y con los que hizo gastos que solo él conoce.

Y aunque los de 2011 se liquidaron  en dicho año y los de 2012 tendrán que pagarse a finales de éste, se abre el debate sobre el gasto y la liquidez de los gobiernos estatales.

Una discusión que cobra relevancia con la propuesta de ley de contabilidad fiscal del PRI y el presidente electo de México, Enrique Peña Nieto.

En ésta se contempla transparentar también las deudas a corto plazo y las que se tienen con proveedores.

Y es que esta nueva deuda que asciende a los mil 400 millones de pesos, solo se dio a conocer mediante una solicitud de información.

La poca transparencia en temas de liquidez del Gobierno de Jalisco no es nueva.

Hasta la fecha no se conoce a totalidad la deuda que dejaron los Juegos Panamericanos.

No es casualidad que en semanas anteriores el presidente de la organización deportiva Panamericana, Mario Vázquez Raña, lanzara fuertes señalamientos en contra del gobernador por este manejo discrecional de recursos.

Vázquez Raña aseguró que existe una deuda de mil millones de pesos.

La versión no fue desmentida, pero sí matizada por el gobierno del estado; la deuda según dijeron las autoridades de Jalisco es de apenas 400 millones de pesos.

La caja chica de Emilio

Reporte Indigo solicitó información sobre los créditos a corto plazo que tramitó el gobierno del estado en los últimos dos años.

La respuesta de transparencia refiere que para 2012 se pidió un crédito por mil 400 millones de pesos con el Banco Interacciones.

El monto deberá ser saldado al final del año, según reza en los contratos de ese tipo de créditos.

González Márquez accedió desde enero de 2012 a estos mil 400 millones de pesos.

La cifra no es menor considerando que esa suma es superior al presupuesto total de este año del Poder Legislativo, 819.5 millones de pesos; o el del propio Poder Judicial cuya bolsa ronda los 919 millones de pesos.

La discreta deuda también es superior al presupuesto que tiene toda la Secretaría de Desarrollo Humano del Estado y de la Procuraduría del Estado.

No se sabe en qué se invirtió ese dinero, la explicación de la Secretaría de Finanzas es que se gastó en “necesidades urgentes”.

Pero el monto de esas necesidades de último momento, es incluso superior a la escandalosa deuda de mil 100 millones que contrajo el municipio de Guadalajara por la pavimentación de 30 calles.

También es mayor al crédito de mil 200 millones de pesos que el SIAPA adeuda a Banobras y que derivó en un fraude al Banco Interamericano de Desarrollo porque el dinero fue utilizado para gasto corriente del organismo.

Pero solicitar deudas a corto plazo ha sido una práctica común en la administración de González Márquez.

En 2011 se pidieron cinco préstamos del tipo a lo largo del año, que juntos sumaron 2 mil 110 millones de pesos.

Fueron dos créditos por 300 millones, uno de 700 millones, otro más de 410 millones y un último de 400 millones.

La respuesta de transparencia no especifica cuándo fueron adquiridos, sólo refiere que fueron liquidados en diciembre de 2011.

Lo extraño de 2012 es que se pidió solo un gran crédito de mil 400 millones.

En esas transacciones intervinieron el Banco Interacciones y el Banco Mercantil del Norte.

Reporte Indigo solicitó entrevista con el secretario de Finanzas del estado, pero fue negada.
La oficina de comunicación social se limitó a entregar una ficha informativa que deja más dudas.

Finanzas justifica que los créditos quirografarios son una herramienta de política presupuestal, con la que se busca “afrontar la falta de liquidez temporal”.

“Que puede deberse a fluctuaciones en la recaudación de impuestos y derechos, y de las participaciones de la Federación”, refiere el documento.

En cuanto al destino de los recursos de estos créditos, la dependencia es ambigua, pues la ficha señala que el dinero se ingresó “para pagar diversos gastos del Gobierno Estatal”.

No detalla en qué rubros, ni explica el porqué de la falta de liquidez y si ya se pagó algo.
La dependencia estatal asegura que pese a la contratación de estos créditos la calificación crediticia de las finanzas de Jalisco es buena.

El documento de finanzas tampoco refiere con qué partidas se subsanará el préstamo y si este dinero proviene de recursos recaudados por el propio gobierno o con las participaciones federales de este año.

Al respecto Harold Dutton Treviño, profesor investigador de la Universidad de Guadalajara (UdeG) señala que el gobierno de González Márquez se ha empeñado en no informar a los ciudadanos sobre la situación financiera del Estado.

Para el especialista en economía solicitar créditos de corto plazo no es un asunto ajeno a ningún gobierno, “el problema es que no se le informe a la gente”.

Dutton Treviño refiere que el Estado al pedir deudas de corto plazo refleja un problema de liquidez y eso sólo se explica por la baja recaudación de impuestos que tiene o por las insuficientes participaciones federales.

Al no dejar en claro cómo es que se pagará esta deuda se corre el riesgo que sean liquidadas con fondos federales y eso genera otros faltantes, argumenta el académico.

Lo ideal según señala Dutton Treviño es que todo el dinero que provenga de la Federación esté etiquetado y así sea más fácil auditarlo.

O en tal caso que exista alguna instancia ciudadana que vele por la buena administración de los recursos.

La idea del especialista se acerca a la propuesta que lanzó el presidente electo, Enrique Peña Nieto con la que se busca una nueva ley de contabilidad fiscal a fin de que todos las deudas de los gobiernos –incluida la de proveedores- esté al acceso de los ciudadanos.

Deuda imparable

Según registros de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) el Estado de Jalisco – sin contar los municipios- tenía una deuda a junio de 2012 de 15 mil millones 786 mil pesos.

Los especialistas Juan Francisco Durán y Martín Romero Morett exponen que la deuda del Ejecutivo ha crecido a ritmos acelerados.

En promedio cada día se suman 6 millones de pesos  de deuda,  considerando la deuda directa e indirecta que tiene Jalisco.

En estos últimos cinco años la deuda total pasó de 6 mil 287 millones de pesos en 2007 a 17 mil 317 millones de pesos en 2011, explica el especialista.

La deuda directa –sólo la del gobierno del estado- creció de 4 mil 412.6 millones de pesos en 2006 a 14 mil 362.6 millones de pesos en 2011, lo cual representa un crecimiento de 325 por ciento en los seis años considerados.

Para los académicos la deuda pública del Gobierno del Estado de Jalisco es un problema de corto, mediano y largo plazo.

“Ha sido recontratada a plazos de hasta 280 meses, casi 24 años, pero mantendrá endeudadas a las generaciones de hoy y de mañana”.

Los académicos del departamento de economía de la UdeG señalan que la Ley de Deuda Pública de Jalisco no pone topes.

“Solo menciona que se puede endeudar el gobierno en caso de proyectos productivos de tipo económico que tengan retorno, y proyectos ejecutivos,  lo cual tampoco se cumple”.

Pero el Ejecutivo no cumple con la premisa de no endeudar al estado más allá del 30 por ciento de su capacidad de pago.

El gobierno de Emilio no ha respetado este criterio de endeudamiento.

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