Paralelo al conflicto que se vive en el estado a causa de las autodefensas, en Michoacán la violencia llega por varios frentes.
Durante la madrugada del pasado viernes se registraron ataques a agencias del Ministerio Público en Tres Puentes, al C2 de Morelia y la Estación de Bomberos.
Además, hubo una amenaza de bomba que provocó fuerte movilización en el Centro Histórico.
Un día antes, el jueves, el edificio del Poder Judicial de la Federación ubicado en la Avenida Camelinas fue desalojado cerca de las 11:00 horas por una amenaza similar, un hecho que se había dado en este mismo lugar el pasado 3 de marzo.
Morelos
Apenas hace tres días, Integrantes de la Coordinadora Morelense de Movimiento Ciudadano acudieron a la sede de la CNDH, en la ciudad de México a denunciar las omisiones policiales para detener la ola de secuestros, extorsiones, homicidios y robos a casa habitación que suceden en el estado.
Tan solo el pasado fin de semana, al menos seis personas fueron ejecutadas, y en la mayoría de los casos fueron perpetrados en plena vía pública, pese al operativo que mantienen desplegado las autoridades estatales en la entidad.
En febrero, Morelos se ubicó como la entidad con mayor índice de secuestros, de acuerdo al Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).
Reporte Indigo ha documentado la violencia en Morelos.
Hidalgo
A finales de enero, el estado de Hidalgo sufrió de una serie de atentados a tiendas de conveniencia Oxxo, los cuales inicialmente fueron atribuidos al efecto cucaracha de la crisis en Michoacán.
Además, el Inegi reveló que Hidalgo ocupa el cuarto lugar nacional en violencia física hacia las mujeres, además que 12 mil consideraron suicidarse ante escenarios de violencia familiar.
El pasado martes 25 de marzo, el gobernador del estado, Francisco Olvera, señaló que instalarán el Consejo Estatal para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres. Esto luego del hallazgo de tres cadáveres femeninos en menos de 72 horas –dos con huellas de violencia–.
Estado de México
El lugar de nacimiento del presidente Enrique Peña Nieto, es la entidad que ha acaparado los reflectores en las últimas semanas, debido a los altos índices de violencia que se viven.
El Estado de México es la “costilla” o “herradura” que separa la capital de México de la zona roja de Michoacán.
Municipios como Ecatepec, Los Reyes la Paz, Cuautitlán, Chicoloapan y Tlanepantla han registrado una ola de ejecuciones atribuidas al crimen organizado.
Para febrero de este año, el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) reveló que en el estado hubo un 37 por ciento más de asesinatos ligados al crimen organizado, que en 2013.
Tan solo el pasado 24 de marzo, un saldo de siete muertos en Chicoloapan alertaron a las autoridades estatales.
El gobernador Eruviel Ávila Villegas calificó estos sucesos como hechos de violencia “atípica y temporal”.
Dijo que se debía a los embates que el gobierno estatal ha logrado en contra de las células delictivas.
Tlaxcala
El pequeño estado de Tlaxcala no se ha escapado de la violencia.
El pasado viernes, La Jornada publicó las estadísticas que indican que Tlaxcala fue el cuarto estado del país donde, en 2013, se encontraron la mayor cantidad de restos de personas en fosas clandestinas, con 42.
Y ayer, Policías federales y estatales clausuraron un motel en el municipio de Papalotla, en el sur del estado, al detectar que en ese lugar se practicaba la trata de personas con fines de prostitución.