Un juez federal negó el martes la solicitud del narcotraficante mexicano Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán de poder reunirse con su abogado frente a frente, sin paredes o vidrios de protección que separen a ambos en las salas de una cárcel neoyorquina.
El juez Brian Cogan dijo en su decisión que la fiscalía ha propuesto ciertas facilidades para que haya mejor comunicación entre El “Chapo” y su abogado, Eduardo Balarezo, cuando se reúnen en la cárcel de alta seguridad Metropolitan Correctional Center, en Manhattan, y que por lo tanto niega la solicitud de Guzmán de pedir que las visitas sean cara a cara.
“El Chapo” había argumentado que no podía escuchar ni ver bien a su abogado cuando se reunían.
Balarezo no respondió de forma inmediata a mensajes de The Associated Press solicitando una reacción a la decisión del juez, que se encuentra disponible en el sistema electrónico de la corte.
“El Chapo” fue enviado de México a Nueva York en enero para enfrentar cargos por encabezar una organización narcotraficante internacional que lavaba miles de millones de dólares y que dirigía una campaña implacable de homicidios y secuestros.
Esas medidas incluían colocar una pantalla en la zona donde se sienta el abogado para que así éste pudiera ver de forma simultánea los mismos documentos que Guzmán observa en su pantalla en otra zona de la sala. También propusieron perforar un hueco a través del cual acusado y defensor podrían intercambiar documentos sin que eso supusiera un riesgo a la seguridad.
La fiscalía ni el juez han informado si los cambios ya se hicieron.
La defensa de “El Chapo” argumenta que es mantenido bajo condiciones inhumanas y excesivamente restrictivas. El gobierno estadounidense ha respondido que esas condiciones tan estrictas son apropiadas para alguien que se fugó dos veces de la cárcel en México, incluida una a través de un túnel que fue excavado hasta la ducha de su celda.
Está previsto que el juicio en Nueva York comience en abril.