Retrasos generalizados en varios puntos de la República Mexicana, inasistencia o renuncia de última hora de los funcionarios de casilla, dilación en la entrega de la papelería electoral, entre otros contratiempos se presentaron ayer en la jornada electoral.
El Instituto Nacional Electoral informó, tras la conclusión de la jornada, que solamente 11 casillas de las 156 mil 807 que el INE tenía contempladas no se instalaron en el país. La mayoría (6) en el estado de Michoacán, tres en Chiapas, una en Puebla y otra en Oaxaca.
La autoridad electoral también recibió ayer denuncias de actos ilegales como presunta compra del voto, acarreo e incluso actos de intimidación sin que con ello se afectara el desarrollo de la votación en términos globales
Otros contratiempos que se registraron fueron cambios en lugares de algunas casillas con causa justificada, suspensión temporal de la votación así como algunos votos de ciudadanos sin credencial o que no aparecían en el listado nominal.
Molestia por retrasos
Las primeras horas de la jornada electoral de ayer estuvieron marcadas por el retraso en la instalación de las casillas electorales, un contratiempo que se replicó en gran parte del territorio nacional.
La respuesta de la ciudadanía desde la hora de apertura de casillas ocasionó que las demoras fueran aún más visibles y en algunas casillas hubo evidente molestia por parte de los votantes. Aún así, y a pesar de los retrasos y las largas filas, los electores fueron pacientes y en su gran mayoría esperaron para emitir su sufragio.
Nadie se salvó de la espera. Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial, tuvo que esperar hasta las 8:50 de la mañana para poder votar. Fue el primero de los electores en llegar a la casilla ubicada en la sede de la Comisión Nacional del Agua, en avenida Insurgentes
Otros candidatos como José Antonio Meade, aspirante de la coalición ‘Todos por México’ a la Presidencia, o los candidatos a la Jefatura de Gobierno de la Capital del País, como Claudia Sheinbaum y Mikel Arriola también sufrieron la espera por el retraso de la instalación de las casillas.
Sin embargo, en contraste con otros electores, se puede decir que tuvieron suerte.
En muchas casillas en el interior de la República, como en Quintana Roo, Jalisco, Estado de México, Chiapas y Tabasco los votantes reportaron retrasos de más de dos horas en la instalación de casillas, tanto las ordinarias como las especiales, por lo que tuvieron que esperar hasta cuatro horas, o incluso más, para emitir su sufragio.
A pesar de los retrasos, el INE confirmó que todo aquel que llegara a la casilla antes de su cierre (18 horas) podría emitir su voto con total seguridad, por lo que todas las personas que quisieron pudieron votar a pesar de los retrasos.
Uno de los mayores contratiempos fueron las protestas derivadas ante la demanda que tuvieron las casillas especiales, sobre todo en la Ciudad de México, aunque como el Instituto recalcó en más de una ocasión, por ley solo puede haber 750 boletas en cada una de ellas
Una de las principales causas de los retrasos fue la inasistencia de algunos funcionarios de casilla y la dificultad de encontrar voluntarios entre la ciudadanía para que tomaran el lugar de los faltantes. Sin embargo, la mayoría de las casillas pudo operar con normalidad.
Improvisación ante falta de material
Otro de los retrasos, aunque aislados, que se presentaron durante las horas en que se desarrolló la votación fue la suspensión temporal de algunas casillas por diversos motivos que comprometían el correcto desarrollo y también se reportó la falta de material electoral en algunas casillas, o el robo de algunas boletas y papelería.
11
En la casilla 0436, ubicada en Jiutepec, Morelos, se reportó que no llegaron las urnas para depositar el voto a gobernador, por lo que los responsables de la casilla tuvieron que improvisar una caja para recibir los sufragios, aunque no contaba con las medidas necesarias de la seguridad, como se observó en distintas fotografías lo que compromete la legitimidad de estos votos.
Situaciones similares en las casillas electorales especiales en Cancún, Quintana Roo, y también en el estado de Nuevo León, donde tras terminarse las boletas para presidente, las personas estarían anotando en un cuaderno sus preferencias o simplemente dejaban un registro con sus nombres para hacerle conocer a la autoridad electoral que no pudieron emitir su sufragio.
En el estado de Coahuila hubo reportes de que en las casillas 740 y 741, ubicadas en Saltillo, las boletas para la diputación federal del distrito 04 llegaron a estos centros de votación cambiadas por las que correspondían a la ciudad de Torreón.
750
También hubo denuncias por robo de material electoral. En Izúcar de Matamoros, Puebla, se reportó el hurto del material para la casilla 741, y en la Ciudad de México un presidente de casilla fue despojado de boletas electorales en la colonia Santiago Acahualtepec, Iztapalapa. En ambos casos, las autoridades electorales tomaron las medidas necesarias para que los ciudadanos emitieran su voto en otras casillas cercanas a su domicilio.
