El Botón de Emergencia que implementó el Gobierno de Jalisco para cortar las cadenas de contagio del coronavirus tuvo buenos resultados, pero ahora el estado enfrenta el riesgo de un nuevo retroceso por la apertura del Estadio de las Chivas y la concentración masiva de personas a la que dio lugar.
En 11 días, los jaliscienses pasaron de la suspensión parcial de actividades económicas y del transporte público, a enterarse de que las autoridades permitieron la celebración con asistentes del más reciente partido de Las Chivas.
La evaluación técnica del Botón de Emergencia que elaboró la Universidad de Guadalajara (UdeG) dice que la medida sí funcionó y que sus efectos se hicieron palpables desde el momento en que fue anunciada.
“Su mayor valor fue el de recordarle a los ciudadanos que seguíamos en una pandemia. Es evidente que antes del Botón de Emergencia había una relajación total ya de muchos hábitos del día a día”, dijo el rector general, Ricardo Villanueva Lomelí.
El 24 octubre, día que se tomó como referente del anuncio del Botón de Emergencia, había en Jalisco 9 mil 143 casos activos de COVID-19; para el 2 de noviembre, ya con la medida en operación, hubo 7 mil 985 casos activos; mientras que el 11 de noviembre, la cifra de casos activos bajó a 6 mil 588.
“Tenemos 2 mil 500 casos menos (…) el reto es mantenerse ahí para tener una pandemia controlada”, dijo Humberto Gutiérrez Pulido, investigador del Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías (CUCEI).
Futbol en Jalisco, pese a repunte
La apertura del estadio que autorizó el gobernador Enrique Alfaro Ramírez se dio en un momento en que el estado enfrenta un posible repunte de casos activos de COVID-19, según los especialistas de la UdeG a cargo de evaluar la estrategia local contra la pandemia del coronavirus.
Aunque el Botón logró una reducción de los casos activos, la medición más actualizada de la casa de estudios arroja indicios de un repunte en el estado, expuso Gutiérrez Pulido.
“Hay un pequeño repunte que habría que ver la posibilidad de, o se estabiliza la caída, o habrá un repunte, eso hay que esperarlo”, dijo.
La determinación del gobernador por autorizar el ingreso de cerca de 6 mil asistentes al partido de las Chivas del 25 de noviembre, como prueba piloto, contravino abiertamente el Semáforo Epidemiológico (Jalisco está en color naranja, por lo que no debe realizar eventos masivos ni abrir estadios) y pasó por alto el posible repunte detectado por la UdeG.
El rector reveló que inicialmente se pretendió que el Estadio de las Chivas abriera con el 50 por ciento de aforo, aunque al final se aprobó el 15 por ciento; el partido de las Chivas como el Buen Fin serán medidos en su impacto en aproximadamente dos semanas.