Investigadores varados por becas del Conacyt
El CONACyT negó becas a posdoctorantes que desarrollan estudios de ciencia y tecnología en México y en el extranjero, los beneficiarios temen que sus investigaciones queden truncas y denuncian que los criterios de evaluación con los que les retiraron el apoyo carecen de rigor académico
Laura IslasPor ser evaluados como “buenos” y no como “excepcionales”, el CONACyT les negó la beca a investigadores para continuar su segundo año de posdoctorado a nivel nacional e internacional; lo que pone en riesgo colaboraciones científicas con países como España.
“Le informo que para esta convocatoria se consideraron para asignación las solicitudes en las que el/ la aspirante tuvo un desempeño ‘Excepcional’, de acuerdo a la opinión de el/la Investigador/a Anfitrión/a; por tal motivo y habiendo sido valorado su desempeño como ‘Bueno’ su solicitud no fue asignada”.
Esa es la respuesta enviada vía electrónica por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACyT) a los investigadores rechazados, firmada por Mario Andrés de Leo Winckler, director de Vocaciones Científicas.
La contestación dejó desconcertados a quienes tenían contemplado continuar con sus proyectos tanto en México como en el extranjero, debido a que cumplieron con todos los requisitos que se pedían en la convocatoria como documentación en regla, periodos de tiempo congruentes y un proyecto con rigor científico-metodológico continuación del primer año.
“Esto refleja que no hubo evaluación, que parece que no revisaron las cosas que deberían de ser importantes, porque nos hacen llenar proyectos, nuevos compromisos, nuevas metas, nuevos objetivos”, dice Hugo García, doctor en Física por la UNAM y posdoctorante en la Universidad Nacional de la Plata, en Argentina.
Él es uno de los integrantes de la Asociación de Jóvenes Investigadores Posdoctorales en Estancias Nacionales e Internacionales, formada para pedir al Consejo una mesa de diálogo para exponer sus casos y evaluar los proyectos presentados, las cuales se basan en términos científicos, metodológicos y de factibilidad.
Para la Asociación, la respuesta del CONACyT muestra que se dejaron a un lado los criterios científicos de evaluación y únicamente se consideró la opinión subjetiva de los encargados de otorgar las becas.
La misma idea la comparten sus investigadores anfitriones, quienes señalan que el término “excepcional” hace referencia a algo que se aparta de lo ordinario u ocurre rara vez, por lo que no parece adecuado para evaluar las cualidades de un becario y piden reconsiderar la respuesta del Consejo que encabeza María Elena Álvarez-Buylla.
“Lo que nosotros más que nada queremos es una respuesta sensata, yo no me imagino a nadie que lo evalúen o le digan que lo evaluaron a través de una opinión subjetiva”, dice Jacobo Martínez Reyes, doctor en Física y posdoctorante en el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) del IPN, en México.
En su evaluación, su anfitrión escribió que es importante dar continuidad a su proyecto para avanzar, concretar los objetivos planteados y publicar los resultados parciales, y después finales, en revistas científicas internacionales, ya que se interrumpieron por la pandemia del COVID-19.
Franco Guerrero Orozco, doctor en ciencias atmosféricas, quien realizaba la estancia posdoctoral en el Instituto Mexicano del Petróleo, menciona que el formato con el que se evaluó debería de tomar en cuenta las ocho preguntas y no solo una, ya que ellos cumplieron con los requisitos para validar un segundo año de estancia.
Colaboraciones internacionales en riesgo
La negativa del CONACyT de dar continuidad a becas de investigadores para realizar su segundo año de continuidad de estancia posdoctoral en el extranjero pone en riesgo las colaboraciones internacionales entre México y otros países, entre ellos España.
Un ejemplo es la respuesta enviada del Instituto de Catálisis y Petroquímica (ICP), del Ministerio de Ciencia e Innovación del Gobierno de España, al CONACyT por este motivo.
En ella menciona que el ICP es una institución que tiene fuertes vinculaciones con diversas instituciones mexicanas basadas en la confianza y la confiabilidad que se ha labrado a lo largo de los años, por lo que pide reconsiderar su respuesta y que se le otorgue la continuidad al proyecto posdoctoral del investigador Pedro Rangel Rivera, doctor en Química.
“En caso de no obtener una respuesta satisfactoria, tanto la actual como las futuras colaboraciones de los miembros de este grupo y de grupos afines al ICP y las diversas instituciones mexicanas que sean auspiciadas por proyectos del CONACyT podría verse comprometida.
“Ya que no se garantiza que la continuidad de los proyectos esté basada en aspectos netamente científicos sino más bien de corte burocrático o ajenos a motivos razonables”, señala el oficio de respuesta con fecha del 10 de agosto.
Respuesta de Conacyt confusa
Ante las cartas enviadas por la Asociación de Jóvenes Investigadores Posdoctorales en Estancias Nacionales e Internacionales para pedir una evaluación con criterios científicos, el CONACyT respondió el lunes 24 de agosto.
“En conclusión, la evaluación y la publicación de resultados cumple la normativa vigente y atiende a los procesos de evaluación que se han aplicado, sin cambios, desde hace varios años, salvo el de haber permitido la consideración especial en la reducción de porcentaje de avance ante la situación de la pandemia”, se lee.
Sin embargo, con esta respuesta, el CONACyT se deslinda de su manera de evaluar y trata de desviar la atención con datos de porcentajes de aceptación y de solicitudes que solo ellos tienen, menciona el doctor Pedro Rangel Rivera.
Reporte Índigo solicitó una postura del CONACyT sobre el tema pero al cierre de esta edición no hubo respuesta.