Insisten impactar zona citrícola con ganado bovino

La empresa ganadera Sukarne reactivó el polémico proyecto de construir un megarancho de engorda de ganado bovino en el municipio de Montemorelos, buscando que sea la nueva administración federal priista la que resuelva su solicitud.

El pasado 1 de noviembre la empresa ganadera solicitó a la Semarnat – por cuarta ocasión en el último año – los permisos de cambio de uso de suelo que requiere este proyecto que está bajo la lupa por el impacto ambiental que provocará en la zona citrícola de Nuevo León.

En las tres ocasiones anteriores la empresa Ganadería Integral SK, S.A. de C.V., fracasó en su intento por conseguir en Nuevo León las autorizaciones  federales para su proyecto agropecuario.

Es por eso que ahora Sukarne presentó los estudios de Manifestación de Impacto Ambiental del ahora llamado proyecto “Proteviva I”, directamente en las oficinas  generales de la Semarnat en la Ciudad de México y no en la delegación de Nuevo León.

A diferencia de las anteriores ocasiones, la petición no fue hecha a nombre de Ganadería Integral SK, S.A. de C.V., razón social de Sukarne, sino que el trámite se está realizando a nombre del abogado Jorge Eduardo Sánchez Camacho.

La ubicación del proyecto se localiza en un predio de 300 hectáreas localizado en el ejido Estación Huertas y ejido La Unión, cerca del Río Pilón, en el municipio de Montemorelos.

“El proyecto consiste en el cambio de uso de suelo por la remoción de vegetación de matorral submontano en una superficie de 102.556 hectáreas que forma parte de un predio con superficie total de 300 hectáreas”, establece el estudio presentado por Sukarne.

“Con el fin de construir y operar infraestructura para una ganadería integral que incluye corrales de recepción, corte y engorda de ganado bovino, planta para la producción de alimento de ganado y oficinas administrativas”.

La Semarnat tiene hasta 45 días hábiles para resolver esta solicitud que presentó el pasado 1 de noviembre la empresa Sukarne, que quedó registrada bajo el expediente 19NL20120021.

En Nuevo León se sabe que la empresa contrató los servicios del poderoso despacho legal Santos-Elizondo, del cual es socio Luis Francisco González Parás, hermano del ex gobernador Natividad González Parás.

Uno de los abogados que lleva el caso de Sukarne es Luis Mendoza Garza, hermano del ex senador del PRI, Jorge Mendoza, actualmente diputado federal priista.

Mendoza Garza se desempeña también como secretario técnico del consejo de administración de la paraestatal Agua y Drenaje de Monterrey.

La empresa Sukarne es propiedad de Jesús Vizcarra Calderón, empresario sinaloense que en el 2010 buscó la gubernatura de Sinaloa postulado por el PRI.

En la elección Vizcarra Calderón perdió con Mario López Valdez, Malova, quien fue postulado por el PAN, PRD y Convergencia.

Según la Manifestación de Impacto Ambiental, Sukarne pretende construir su planta de engorda cambiando el uso del suelo y removiendo cubierta vegetal en 100 de las 300 hectáreas del predio.

La inversión que se contempla realizar en este proyecto es cercana a los 800 millones de pesos, entre la construcción de la infraestructura, la aplicación de medidas de mitigación y el capital de trabajo.

Los promotores presentaron un estudio -sin decir el autor del informe- con el que pretenden acreditar que el predio donde se planea construir esta planta está totalmente recuperado de un incendio que lo afectó hace dos años.

Sukarne también presentó entre la documentación entregada a la Semarnat un oficio firmado por Heriberto Treviño, secretario de Desarrollo Urbano y Ecología de Montemorelos, en el que asegura que el predio comprado en esta zona por Sukarne es compatible con el uso de suelo agropecuario incluido en el plan de desarrollo urbano municipal.

Desde que se anunció este proyecto agropecuario en el municipio de Montemorelos por parte de Sukarne, ha generado polémica y desatado una batalla legal en Nuevo León.

Fue a mediados del 2011 cuando Sukarne dio a conocer este proyecto ganadero, que provocó cuestionamientos principalmente por los propietarios de tierras en esta región ubicada en los límites de los municipios de Linares y Montemorelos.

Inicialmente el proyecto contemplaba la operación de un rastro Tipo Inspección Federal (TIF) para el sacrificio de animales, sin embargo esta actividad ha sido eliminada por Sukarne en su proyecto que presenta ahora ante las autoridades federales.

El plan original planteado por Sukarne era para albergar más de 100 mil cabezas de ganado.

Uno de los empresarios que se ha manifestado en contra de este proyecto es Eduardo Barragán, accionista de la empresa Embotelladora Arca, S.A. de C.V., quien es propietario de un rancho ubicado en esta zona.

La primera vez que Sukarne presentó una solicitud de autorizaciones federales fue en el mes de junio del 2011, un proceso que estuvo suspendido por resoluciones judiciales.

El abogado Federico Fernández, a nombre de propietarios y ejidatarios, ha conseguido suspensiones por parte de jueces federales en contra de este proyecto.

Finalmente en noviembre del año pasado la Semarnat desechó la primera solicitud que presentó Sukarne, argumentando que el promovente ocultó en los estudios que el predio a evaluación fue afectado por un incendio hace dos años.

Luego, este año Sukarne buscó reanudar el proceso para conseguir los permisos ambientales en los meses de febrero y mayo, sin embargo la Semarnat rechazó entregar las autorizaciones.

Hoy la empresa Sukarne reanudó este proceso y su apuesta es que sea el nuevo gobierno federal encabezado por el priista Enrique Peña Nieto, el que por fin entregue los permisos ambientales para operar esta planta de engorda en Montemorelos.