La tecnología inmersiva va a tener un impacto tremendo en la vida de las personas, asegura Rubén Darío Vázquez, investigador en comunicación digital.
“Imagínate que vas a poder caminar por tiendas digitales y recorrer los pasillos mientras ves los productos como si estuvieras ahí. Incluso lo podrás hacer con una persona que se encuentre en otro país y compartir esa experiencia.
“Lo mismo sucederá con el trabajo. Podrás realizarlo de manera virtual pero estando totalmente presente. Y así con la educación y todos los demás sectores como el entretenimiento o los negocios. Navegaremos en un mundo donde prácticamente desaparecerán las barreras geográficas”.
Moneda de cambio
Conforme la manera de hacer negocios evolucione gracias a estas nuevas tecnologías, también lo hará la forma en la que intercambiamos bienes, una de las razones por las cuales se cree que con la introducción de distintos metaversos el uso de las criptomonedas aumentará.
“Se augura la aparición de una nueva economía digital que no tiene reglas y de nuevos fenómenos económicos que sí tienen un valor de mercado pero que no están regulados. A la par estamos viendo cómo se desarrollan las criptomonedas”, dice Darío Vázquez.
El especialista advierte que hoy en día también existe otra moneda de cambio poco regulada: los datos, información que actualmente tiene un valor altísimo en el mercado digital.
“Podríamos decir que los datos personales son el oro negro digital, pues se comercializan de muchísimas formas. Pareciera que muchas de las aplicaciones que utilizamos diariamente son gratuitas, como Instagram, Facebook, Twitter o TikTok, pero en realidad eso no es cierto porque pagamos con nuestra información.
“Por eso solemos ver contratos larguísimos que te hacen aceptar las aplicaciones antes de poder utilizarlas. Hay otras que simplemente los roban. Aquí el problema ante la falta de protección de los usuarios es que no sabemos en dónde termina esa información, la cual muchas veces puede ser delicada”.
El futuro ya está aquí
Uno de los grandes cambios que se avecinan es el uso cada vez más común de los NFT (Non Fundable Tokens), los cuales son objetos digitales irrepetibles que están cifrados con tecnología blockchain, lo que los hace únicos.
“Ya vemos como una “skin” en un video juego tiene un valor. O una obra de arte digital se puede vender en millones, incluso una construcción en Minecraft. Todo esto adquiere un valor por su autenticidad, lo que los convierte en un nuevo instrumento para los negocios y la comercialización”, dice el académico de la UNAM especializado en comunicación.
Tecnología necesaria
De acuerdo con el profesor Pierre Bourdin, de Estudios de Informática, Multimedia y Telecomunicación de la Universitat Oberta de Catalunya, la tecnología habilitadora de este mundo virtual no será 5G, sino hasta que se implemente el 6G.
“Esta nos permitirá ponernos unas gafas de realidad aumentada y ver información sobreimpresa en nuestro campo visual, o unas gafas de realidad virtual que nos den acceso a una infinidad de experiencias insospechadas.