¡Ya basta de que las madres no cuenten con un espacio digno para amamantar a sus bebés! En los lactarios las mujeres en periodo de lactancia pueden extraer su leche, asegurando su conservación.
Por eso, ciudadanas de Nuevo León propusieron una iniciativa en el Congreso de Nuevo León para que existan lactarios en las escuelas de la entidad. Hillary Gisselle Ayala Garza, de Compañeros en Salud Embajadores; Xahaira Elizabeth González Rodríguez, del Tecnológico de Monterrey; Sandra Pioquinto García, de la comunidad Mujeres Científicas Mexicanas; Citlali Abigail Rodríguez García, del colectivo Frente Universitario Feminista; y Paola González, de Ya Basta Nuevo León, presentaron la reforma.
Se trata de cambiar la Ley para la protección, apoyo y promoción de la lactancia materna del estado de Nuevo León, la cual fue publicada el 20 de enero de 2016. Aunque este marco legal ya busca garantizar la lactancia materna, así como prácticas adecuadas de alimentación para los lactantes, el objetivo de la reforma es reforzar la obligación de las instituciones públicas y privadas de establecer lactarios o salas de lactancia.
En ese sentido, en caso de aprobarse la iniciativa en estudio, el artículo 15 establecerá que los requisitos mínimos necesarios para el establecimiento de lactarios o salas de lactancia son contar con refrigerador de uso exclusivo para lactancia, mesa, sillón, lavabos, bombas extractoras de leche y ofrecer privacidad.
La iniciativa se alinea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) 2 y 3: “acabar con el hambre” y “la buena salud y bienestar”
“La sala debe estar disponible en todo momento para su uso. Las salas pueden ser de uso individual o múltiple; en caso de ser múltiple se pueden instalar cortinas o biombos para crear espacios individuales y asegurar la privacidad individual”, dicen las modificaciones al artículo 15.
La ley menciona que es un derecho ejercer la lactancia en cualquier lugar, en las mejores condiciones. Sin embargo, de acuerdo con la iniciativa, en la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) sólo hay un lactario.
“La cantidad de lactarios debe ser proporcional a las mujeres o personas capaces de gestar en edad fértil (15-49) que frecuenten los espacios. En contexto de educativo la proporción debe ser al menos de: un lactario por escuela en educación media superior; y un lactario por facultad (o división académica entre las diferentes carreras)”, menciona la propuesta.
Por el respaldo a los lactarios en universidades de Nuevo León
Ya Basta Nuevo León es una colectiva que se está constituyendo como una asociación feminista. Fue fundada en noviembre de 2019 para promover la conciencia sobre la violencia de género y ahora ya concentra 20 integrantes.
La lactancia es un derecho de las madres y de bebés lactantes. Por lo que el hecho de que no existan lactarios o salas de lactancia en instituciones públicas y privadas podría considerarse como violencia.
“No hay lactarios, las universidades no cumplen con este requisito. Entonces las estudiantes o las profesoras no pueden acceder a uno y si existen están muy poco equipados. Si ni siquiera en los espacios universitarios existen estos lactarios, mucho menos te digo que en las empresas”, expresa Paola González, encargada de relaciones públicas y gubernamentales de Ya Basta Nuevo León, en entrevista con Reporte Índigo.
González estuvo presente cuando Hillary Ayala, estudiante de medicina, presentó la iniciativa en el Congreso local. También asistieron las diputadas Sandra Pámanes e Iraís Reyes, de Movimiento Ciudadano (MC), para darle promoción a la iniciativa.
“Tenemos un grupo que se llama Nuevo León contra la violencia en donde están distintas colectivas, diputadas, organizaciones de la sociedad civil y parte del gabinete actual. Nos apoyamos con la difusión de las iniciativas porque es difícil que te pongan atención en temas incómodos como lo son estos feministas”, explica la egresada del Tec de Monterrey.
En la Semana Mundial de la Lactancia Materna durante el mes de agosto, ocurrió la reapertura, luego de la pandemia de COVID-19, del lactario en el Congreso local, cuya instalación fue promovida por el Partido Acción Nacional (PAN). Con su inauguración, el 18 de abril de 2016, el Poder Legislativo se convirtió en la primera institución pública en contar con un lactario en Nuevo León, según un comunicado de este grupo parlamentario.
Sin embargo, la propuesta no ha sido apoyada por más legisladoras o legisladores. Por eso, Paola González invita a mostrar apoyo a la reforma para que existan lactarios en universidades.
“Estas iniciativas no son nada más para que pasen y se reformen los artículos, también para crear conciencia. Los cambios verdaderos en las universidades se dan a través de las y los estudiantes, entonces es un llamado para que apoyen”, pide a nombre de Ya Basta Nuevo León.
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