Impulsos autoritarios de Enrique Alfaro
El uso de la fuerza pública que anunció el gobernador Enrique Alfaro para obligar a los ciudadanos a aislarse durante la actual pandemia puede generar la violación de los derechos humanos y actos de discriminación, advierten la CEDHJ y diputados de Morena
Luis HerreraLa aplicación de la fuerza pública que anunció el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, contra los ciudadanos que desobedezcan el aislamiento social por la pandemia del coronavirus, puede provocar violaciones de derechos humanos.
El endurecimiento del discurso del mandatario se dio este 19 de abril cuando aseguró que Jalisco podría alcanzar los 60 mil contagios y 4 mil muertes a mediados de mayo, si el aislamiento persistía por abajo del 40 por ciento durante tres semanas, por lo que había que eliminar la posibilidad de ese escenario.
“El Gabinete de Salud y el de Seguridad, en conjunto con las autoridades municipales, hemos tomado la decisión de que a partir de este lunes las medidas de aislamiento social tendrán carácter obligatorio, que quien no las cumpla será sancionado y que la fuerza pública tendrá la encomienda de hacerlas cumplir”, dijo.
Ante ello, los legisladores de Morena alertaron que el gobernador está recurriendo a medidas que rayan en lo inconstitucional.
“Exigimos que toda decisión o medida que se tome debe garantizar el respeto irrestricto de los derechos humanos, de las y los jaliscienses a la salud y la seguridad, pero nunca con represión o uso intolerante de la fuerza pública.
“Las y los jaliscienses somos responsables y solidarios, como autoridad no se debe ir en contra de las garantías individuales consagradas en la Constitución, sus decisiones están en la delgada línea de la inconstitucionalidad”, señalaron.
También la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ) se pronunció sobre el aislamiento social obligatorio decretado por el mandatario de MC.
Para evitar que las medidas establecidas por el gobernador terminen en violaciones a los derechos de los jaliscienses, la CEDHJ llamó a seguir varios lineamientos.
Como la instrucción y capacitación de las y los servidores públicos encargados de la aplicación de las medidas respetando los derechos humanos y dejando en claro que las medidas no implican la suspensión de garantías.
También que la aplicación de las sanciones administrativas se haga de forma gradual y proporcional.
La CEDHJ también llamó a no pasar por alto que “la libertad personal es uno de los derechos fundamentales del ser humano”, por lo que “se solicita que el arresto o detención de las personas sea el último recurso que se utilice (…). En su caso, que la restricción de la libertad se realice en condiciones de seguridad”.
Pueblo responsable
Ante la incertidumbre que ha suscitado la decisión de usar la fuerza pública contra los que no acaten el aislamiento social, Enrique Alfaro Ramírez respondió el pasado 20 de abril.
“El gobierno no tiene ningún ánimo ni de detener ni de sancionar ni de multar a nadie, lo que queremos es que las disposiciones que estamos estableciendo y que los instrumentos que estamos poniendo al servicio de la gente se usen correctamente”.
Y dijo que “¿por qué mejor no pensamos que no va a haber sanciones y que no va a haber nadie detenido?, si lo único que pedimos es que se cumpla con una responsabilidad ciudadana de quedarse en casa (…). Yo quiero pensar que este es un pueblo maduro, consciente, responsable que no necesita que el gobierno esté atrás de ellos”.
Narrativas contrastantes de Enrique Alfaro
La narrativa con la que el gobernador Enrique Alfaro Ramírez se refiere a la pandemia del coronavirus es cada vez más contrastante con la del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Mientras el jalisciense pintó un escenario desolador y atemorizante de lo que vendrá, justo antes de anunciar que se usará la fuerza pública para obligar al confinamiento social, que habrá tolerancia cero y que “Jalisco no se raja”; el presidente López Obrador llamó a los mexicanos a no perder los ánimos y a tener confianza.
“México ha entrado ya en la etapa más dura de la pandemia, aquella cuando la muerte y no solo los contagios marcan la profundidad de la crisis. (…) Nadie es ajeno a esta realidad, en el norte, en el centro, en el sur, todos estamos enfrentando la fuerza y la letalidad del virus.
“De seguir así pronto los hospitales colapsarán, los médicos no se darán abasto, miles de personas tendrán que enfrentar la enfermedad y probablemente la muerte en sus casas sin que nadie los pueda auxiliar. Muchos no podrán siquiera despedirse de sus seres queridos para no poner en riesgo su propia vida”, mencionó.
El presidente, en cambio, dijo este 18 de abril que “vamos a inyectar muchos recursos para reactivar pronto la economía, tengamos confianza, vamos a salir adelante, ya falta poco, no nos desanimemos y sigamos cumpliendo con las recomendaciones que nos hacen los especialistas.
“Es por el bien de cada uno de nosotros, es por el bien de nuestro pueblo, es por el bien de nuestra nación. Les mando así un abrazo cariñoso, son tiempos de fraternidad, es tiempo de demostrar que queremos una república amorosa, fraterna, digna, humana, solidaria, justa, honesta“.