En lo oscurito, el Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) efectuaron una maniobra que culminó con la aprobación de las listas de los 16 aspirantes a jefes delegacionales y 40 diputados locales del Sol Azteca a pesar de que incumplen la cuota de género.
Con la polémica a cuestas y su autonomía en entredicho, el IEDF dio el banderazo de salida este lunes a la contienda electoral.
Paradójicamente, el IEDF llamó a todos los partidos a respetar la ley, la misma que él mismo no cumplió al pie de la letra al no obligar al PRD y al PRI a modificar sus listas y cumplir con la cuota de género que estipula el artículo 296 del Código de Instituciones y Procedimientos Electorales.
El incumplimiento del PRD es claro. En su listado de aspirantes a jefes delegacionales aparecen los nombres de 10 hombres y seis mujeres, cuando el artículo 296 indica que los candidatos de un mismo género no pueden exceder el 60 por ciento, lo que obliga a los partidos a presentar una relación mínima de equidad de 9 hombres y 7 mujeres.
Para el PRD, el requerimiento del IEDF no es un acto menor, significa destapar la cloaca de las tribus y enfrentar de nueva cuenta una guerra interna de la que apenas van saliendo y que los dejó muy aporreados y divididos.
¿A quién bajar de las listas? Fue el principal cuestionamiento. Y lo que ello implica; qué tribu del PRD resultaría afectada y cómo se le compensaría. Necesariamente había que bajar a un candidato hombre para subir a una mujer a efecto de cumplir con la cuota de género.
Para superar este conflicto que lo puso en jaque, el PRD ideó una estrategia distinta que al menos le permitiría ganar tiempo: enfermar a Yolanda Columba León Manríquez, la consejera del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF) para inclinar la votación a su favor.
Para evadir la crítica y los cuestionamientos de los medios de comunicación, el IEDF sesionó las últimas horas del viernes 11 de mayo hasta la madrugada del sábado.
Ese día de la importante votación que obligaría al PRD y PRI a modificar sus listas, la consejera Yolanda León simplemente se ausentó argumentando motivos de salud, lo que obligó a una reconfiguración de votos que benefició a los partidos.
Fue la madrugada cuando el presidente del IEDF, Gustavo Anzaldo Hernández, asumió un rol estelar en esta decisión al aplicar el voto de calidad, lo que dio luz verde a la lista del Sol Azteca y puso en jaque la imparcialidad del IEDF en este proceso que arrancó este lunes.
No es la primera vez que Anzaldo Hernández está en la mira de los reflectores. Al ahora presidente del IEDF se le asocia con el PRD derivado de una maniobra política ocurrida en el año 2010, fecha en la que ganó el principal cargo al frente de este organismo.
A finales de ese año, durante el proceso de renovación de la dirigencia del IEDF, se orquestó un plan para no dejar llegar a la presidencia a la consejera Carla Humphrey, evidentemente panista y esposa de Roberto Gil, hoy coordinador de campaña de Josefina Vásquez Mota.
Por aquellas fechas, ocurrió una reunión privada entre los siete consejeros del IEDF en donde se llevó a cabo una peculiar votación interna que benefició Carla Humphrey como nueva presidente del Instituto en remplazo de Claudia Zavala. Anzaldo no salió favorecido.
Ante el eventual nombramiento de Humphrey, el PRD y el propio gobierno capitalino pusieron en marcha una estrategia para evitar que la consejera, ligada al PAN, se encumbrara como presidenta y que desde ese puesto cargara los dados a favor del albiazul en el desahogo de conflictos.
La operación consistió en presionar a la todavía presidenta Claudia Zavala a fin de que cambiara su voto a favor de Anzaldo y así sacar de la jugada a Humphrey, quien además padeció la embestida mediática de haber asistido con su marido, Roberto Gil al registro como candidato a presidir el PAN, lo cual a los ojos de otros consejeros, pero sobre todo de los partidos políticos rompía con su neutralidad política.
La votación que en un principio había ocurrido a favor de Humphrey con el respaldo de los consejeros Ángel Díaz Ortiz, Fernando Díaz Naranjo, Claudia Zavala Pérez y el suyo, cambió cuando Zavala votó por Anzaldo y se sumó a los votos de Néstor Vargas Solano, Yolanda León Manríquez, inclinando la balanza.
Por eso es que en la sesión ocurrida en lo oscurito el pasado viernes y madrugada del sábado, el presidente Anzaldo parece haber pagado aquel viejo favor al PRD.
En total descrédito
Pero el presidente Anzaldo supo operar muy bien la jugada. El pasado 7 de enero el IEDF en su oficio IEDF/DDEAP/554/12 indicó a los partidos PRD y PRI que la lista de candidatos a jefes delegacionales no se ajustó y violentaba el código 296 del Código Electoral referente a la cuota de género.
“Explica que las 16 candidaturas propuestas por los partidos políticos exceden el límite porcentual de 60 por ciento de candidatos de un mismo género establecido en la normativa electoral, toda vez que, indica las 10 propuestas de candidaturas del género masculino presentadas por el (PRD), corresponde al 62.5 por ciento del total de candidaturas a jefes delegacionales, por lo tanto los partidos no se ajustan a la norma, por lo que requiere a los partidos de la Revolución Democrática, del Trabajo y Movimiento Ciudadano que, dentro de las 72 horas se ajusten”.
Este fue el razonamiento del IEDF en el que exige la modificación de las listas a efecto de tener nueve hombres y seis mujeres.
En la contestación del pasado 9 de mayo, el PRD argumenta: “su solicitud es inoperante en virtud de que excedió el plazo previsto por el propio código y pretendió fundarlo, situación que deriva en una notoria serie de irregularidades en el procedimiento relativo a la revisión de las solicitudes”.
Miguel Ángel Vásquez Reyes, representante del PRD ante el IEDF, reclamó a la Dirección Ejecutiva de Asociaciones Políticas el haber incumplido su obligación de notificar a los partidos en tiempo y forma, a los tres días posteriores a partir de la recepción de la solicitud (plazo que venció el 21 de abril de 2012).
“Al emitir a los 16 días de fenecido el término legal para ejecutar dicha atribución, violentó no solo lo dispuesto por el artículo 300 del Código de Instituciones y Procedimientos Electorales, sino que también actúa en forma absolutamente contraria a los principios de certeza y definitividad”, contestó el PRD al IEDF.
“El (principio) de certeza implica la obligación de dar seguridad y certidumbre a los actos y resoluciones electorales”, acusó el Sol Azteca.
En algo tiene razón el PRD. El IEDF perdió la capacidad de dar seguridad en la elección del próximo julio. Más aun cuando las sesiones transcurren en lo oscurito y bajo supuestas presiones a los consejeros.
Al final de esta jugada maestra, el PRD obtuvo su registro, también el PRI que prácticamente dejó la maniobra en manos de los amarillos. La operación resultó exitosa.
El albiazul ya adelantó que recurrirá ante el Tribunal Federal Electoral (TRIFE) a presentar su inconformidad para obligar al PRD y PRI a cumplir con la ley como ocurrió en el ámbito federal.
Y es que a pesar de que el PAN no tenía a ninguna mujer en su lista de candidatos a delegados, antes de vencer el plazo, se ajustó al requerimiento del IEDF a fin de cumplir con los nueve hombres y siete mujeres a los que obliga la llamada cuota de género.
Por eso es que ahora buscará impugnar la decisión que le dio luz verde al PRD y de paso al PRI para permanecer con su lista original de candidatos pese a no dar el 40 por ciento de los espacios a la mujeres, según obliga la ley.
Ante el temor de que el Tribunal Electoral del Distrito Federal no haga nada para obligar al poderoso PRD a modificar su listado, el PAN presentará su inconformidad en los tribunales federales, quienes recientemente obligaron a los partidos a cumplir con la cuota de género en el ámbito nacional.
¿Les temblará la mano a los consejeros federales para hacer cumplir la ley? El desafío de las tribus parece haber llegado muy lejos.
Empieza la guerra sucia
Durante 40 días próximos la ciudad será protagonista de mítines, confrontaciones, brigadistas que en la calle o casa por casa llevan una consigna y campañas negras.
Pocas horas después de la polémica sesión ocurrida en el recinto ubicado en Huizaches 25, colonia Rancho Los Colorines de la delegación Tlálpan, vino el llamado del IEDF a cumplir la ley. Irónico.
Los primeros minutos del lunes miles de pendones, gallardetes y mantas fueron colocados en las de por sí abarrotadas calles del Distrito Federal, la vorágine de las campañas inunda todos los espacios urbanos con los rostros de los aspirantes.
En la contienda que arrancó este lunes participan las alianzas PRD-PT y Movimiento Ciudadano; PRI y Partido Verde Ecologista de México (PVEM), así como el PAN y Nueva Alianza.
Durante 40 días próximos la ciudad será protagonista de mítines, confrontaciones, brigadistas que en la calle o casa por casa llevan una consigna y campañas negras.
En las filas del PRD, los aspirantes a delegados y también a diputados locales pelean las fechas para que el jefe de gobierno Marcelo Ebrard Casaubón los acompañe en el arranque de sus respectivas campañas. También quieren la foto de la mano de Miguel Ángel Mancera, quien se mantiene arriba de las encuestas para jefe de gobierno.
No ocurre el mismo fenómeno en las filas del PAN-DF donde la aspirante Isabel Miranda de Wallace mantiene la imagen de candidata solitaria. Los cuadros azules no terminan por perdonar la imposición del presidente del partido Gustavo Madero.
Mientras que los candidatos priistas, más que a Beatriz Paredes, es al candidato presidencial Enrique Peña Nieto a quien sueñan con traer como amuleto.
Desde el lunes por la noche, fue común ver en la ciudad cuadrillas nocturnas que se volcaron a las calles para hacer campañas a favor de su candidato.
Una muestra de la parafernalia que viene es lo que le ocurrió al aspirante a delegado en la Miguel Hidalgo, Víctor Hugo Romo Guerra, cuyos adversarios se dieron a la tarea de armar un panfleto en cuya portada aparecía la imagen del candidato supuestamente descubierto haciendo uso de pornografía infantil.
Sin ninguna prueba, el supuesto periódico se repartió en colonias de la delegación Miguel Hidalgo. El equipo de campaña de Víctor Hugo Romo ya tiene una lectura y voltean a ver con recelo a los seguidores de René Bejarano, de la corriente Izquierda Democrática Nacional (IDN).
Bejarano y sus militantes intentaron todo para bajar a Víctor Hugo Romo de la candidatura a Miguel Hidalgo; en una primera etapa el profesor postuló a Agustín Barrios Gómez para jefe delegacional.
Al final se impuso el jefe de gobierno, quien mantuvo a Romo. Ayer en el arranque de campaña, el candidato propuso a sus oponentes en la demarcación , firmar un pacto de no agresión para evitar se repitan actos de guerra sucia. Sabe bien que las balas parecen surgir desde la misma trinchera del PRD.
Para enfrentar a propios y extraños, Romo se prepara de la mano del publicista Carlos Alasraki, quien junto con Luis Pérez de las Heras y la consultoría Bola de Cristal. Habría que tener cuidado, cabe recordar que repetir estrategias de campañas no garantiza siempre el mismo resultado.
Por la tarde-noche, Jesús Valencia, el delfín del jefe de gobierno, Marcelo Ebrard, convertido en el flamante candidato a delegado en Iztapalapa, arrancó campaña con un evento masivo al más puro estilo priista.
En el primer día de campañas, los motores apenas calientan. Ahí está el llamado del IEDF a los candidatos a cumplir la ley. ¿Y quién vigilará al árbitro?