Captación de agua ¿única solución para enfrentar la crisis hídrica?
Humberto Armenta, expresidente del Comité de Infraestructura del Consejo Consultivo del Agua, habló sobre las distintas posibilidades para resolver la crisis hídrica en México
Karina VargasUna de las propuestas más populares por parte de los tomadores de decisiones en México para atender la crisis hídrica del país es impulsar la captación del agua de lluvia; no obstante, existen otras posibilidades para enfrentar este problema, de acuerdo con Humberto Armenta, expresidente del Comité de Infraestructura del Consejo Consultivo del Agua (2019) y fundador de la compañía constructora RECSA.
Entre las soluciones que las autoridades mexicanas pueden considerar para garantizar el abasto y distribución de agua en el territorio nacional tanto en el presente como en el futuro, se encuentran la desalación del agua de mar, repotabilizar el agua de reúso y hacer trasvases entre cuencas hidrológicas, por mencionar algunas.
En este sentido, el también autor del libro Financiamiento de la Infraestructura Hidráulica y la Gestión Hídrica en el Valle de México, donde analiza la manera en que se han desarrollado y abordado los problemas de la gestión del agua en dicha zona, señala a Reporte Índigo la importancia de que se priorice la inversión en todos los niveles de gobierno para el desarrollo de infraestructura hidráulica en respuesta a las exigencias de la sociedad.
“Lo bueno es que ahora hay una sensibilidad social respecto del agua, de que hay una probabilidad inminente de que nos quedemos sin agua, y eso hace que los tomadores de decisiones en el gobierno obedezcan a esos señalamientos. Hoy por hoy, estamos en un momento en el que se reconoce que el tema del agua se debe atacar, entonces para el político es más fácil poner manos a la obra porque es lo que reclaman los votantes”, advierte.
Posibilidades y costos de la gestión hídrica para Conagua
En este sentido, Armenta explica que son al menos cinco las posibles soluciones a considerar por los gobernantes para asegurar el abastecimiento hídrico en los siguientes años, además de la captación pluvial.
Éstas son trabajar las eficiencias de la red de distribución de agua de uso doméstico en las ciudades; trabajar las eficiencias de la red de distribución de agua para el campo y los cultivos (tecnificación del riego); tratar el agua que desecha la actividad doméstica e industrial antes de regresarla al ciclo hidrológico; repotabilizar el agua de reúso; hacer trasvases de agua entre cuencas; y desalar el agua del mar.
“No es una sola, pero ¿cuánto dinero cuesta implementar un programa permanente y repetitivo cada año para que se atiendan todos esos frentes? Nosotros, en 2018, antes de que empezara el Gobierno de la 4T (Cuarta Transformación), propusimos en un libro que se llama Apuntes sobre la Gestión Hídrica y la Infraestructura Hidráulica, un presupuesto para Conagua (Comisión Nacional de Agua) de 80 mil millones de pesos anuales.
“En el Gobierno anterior a la 4T, el presupuesto de Conagua llegó a la mitad a medio sexenio, como de 50 y tantos mil millones de pesos, y hacia el final del sexenio acabó en veintitantos mil millones de pesos. Al inicio de la 4T, el presupuesto empezó en 23 mil millones de pesos y ahorita está cerrando con casi 70 mil millones de pesos. Durante el sexenio la autoridad federal se dio cuenta que era necesario invertir en infraestructura”, declara el especialista.
Como ejemplo de los proyectos de gestión hídrica que se ejecutaron en la administración que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador, menciona el de Agua Saludable para La Laguna, en la Comarca Lagunera; los acueductos de El Zapotillo, en Jalisco, y El Cuchillo II, en Nuevo León; así como la infraestructura de riego construida en Sinaloa.
Se requieren 125 mil millones de pesos al año para atender la escasez de agua
Sobre el presupuesto que el siguiente sexenio debería destinar a Conagua para atender la gravedad de la escasez de agua que se registra en la actualidad, Humberto Armenta indica que la suma asciende a 125 mil millones de pesos anuales.
“Un poquito para desalación, un poquito para eficiencias, un poquito para trasvases. Si año con año le estás metiendo a eso, se va a robustecer la infraestructura y va a alcanzar al crecimiento poblacional y más o menos lo vamos a ir corrigiendo. Si no empezamos ya, cada vez nos vamos a ir rezagando más. Todos los actores del agua tienen derecho a decir ‘se los dije’”, subraya.
La publicación “Escasez de agua y sequía en México: crisis actual” del Centro de Investigación en Política Pública del Instituto Mexicano para la Competitividad, señala que la escasez del agua es una realidad que requiere de atención urgente y México ya enfrenta desafíos por la falta del recurso.
“Según la ONU (Organización de las Naciones Unidas), las sequías se duplicarán para 2050. Esto amenaza la disponibilidad y calidad del agua. Los gobiernos deben mejorar los sistemas tarifarios de tal forma que permitan recaudar más recursos financieros -que se destinen a mejorar la infraestructura hídrica– sin afectar el bienestar de la población más desfavorecida”, se lee en el documento.