Hidrógeno verde: la producción en la que México puede convertirse en líder

México cuenta con el potencial de insertarse como productor sobresaliente en la cadena global del hidrógeno verde, un combustible cuya demanda en el mundo muestra un crecimiento acelerado como producto estratégico para lograr la “descarbonización” de las economías que comparten el objetivo de contener el cambio climático.

El diagnóstico anterior está plasmado en un informe elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y fue publicado el 28 de septiembre de 2023, unos meses antes de que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, diera a conocer que el país está por recibir una megainversión del extranjero para producir hidrógeno verde.

En dicho informe titulado “El Potencial Industrial de México en las Cadenas de Valor del Hidrógeno Verde“, el PNUD señala: “En el caso del hidrógeno verde, México posee características que lo colocan como un jugador competitivo en la producción de dicho elemento, gracias a los recursos prospectivos renovables (solar y eólico) con los que cuenta el territorio nacional. Adicionalmente, la fortaleza del sector industrial del país lo coloca en una posición privilegiada para incorporarse en la manufactura de diversas tecnologías para la producción, el almacenamiento y el aprovechamiento del hidrógeno verde”.

El fortalecimiento de la industria del hidrógeno verde en México no solo abonaría a la “descarbonización” de la economía y, de esta forma, al cumplimiento de sus compromisos de reducción de Gases de Efecto Invernadero (GEI).

En ese estudio prospectivo, el PNUD también proyecta otras consecuencias positivas para el país, incluyendo la generación de nuevos empleos. “En ese orden de ideas, existen factores que constituyen una oportunidad para consolidar la posición de México como plataforma industrial de las tecnologías del hidrógeno verde. Sumar a México a la cadena global de valor del hidrógeno verde contribuirá a la generación de empleos decentes, bien remunerados y de calidad; promoverá dinamismo en las entidades federativas; diversificará las actividades económicas del país; abrirá nuevos mercados, y permitirá seguir consolidando al país en actividades económicas de manufactura“, se lee en el documento.

Fue este 24 de noviembre de 2023 cuando el presidente, López Obrador, al referirse a los avances que presenta el proyecto denominado Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, habló sobre la inversión para la producción de hidrógeno verde en el país.

“Ya se están licitando los polos de desarrollo en todo el istmo, creo que cinco. Hay uno de ellos más cerca de Ixtepec, Oaxaca, uno de ellos que va a quedar a cargo de una empresa danesa, es un fondo económico financiero de Dinamarca. Van a invertir en ese polo de desarrollo —esa es la noticia que estabas buscando— 10 mil millones de dólares, porque van a producir energía, hidrógeno verde para sustituir combustibles fósiles, que las embarcaciones nuevas van a moverse con hidrógeno verde, y todo esto se va a producir en el Istmo”, expuso el primer mandatario.

El presidente precisó también que, durante lo que le resta a su gobierno, se trabajará en la base contractual que requerirá ese proyecto. “Estamos hablando de la era de la no contaminación, de todo lo que se está haciendo para evitar el cambio climático. Entonces, ya está por firmarse este acuerdo. Ya no me va a tocar a mí ver terminada la obra, pero yo sí voy a dejar todo formalizado con los convenios y todo. Esto va a ayudar mucho, mucho, mucho al Istmo”, dijo.

La revolución, en los sectores eléctrico y del autotransporte

La sustitución de combustibles fósiles que posibilita la utilización del hidrógeno verde, sería positiva para México en los sectores eléctrico y del autotransporte que son responsables de una proporción importante de las emisiones de GEI que produce el país, indica el PNUD en su estudio.

“En ese sentido, la incorporación del hidrógeno verde en usos tradicionales y en nuevas aplicaciones coadyuvaría a la descarbonización de algunos de los sectores que generan más emisiones. Las actividades de producción de electricidad y el autotransporte, por sí mismas, fueron responsables del 23.27 % y del 18.52 % de las emisiones totales de CO2e en 2019, respectivamente”, expone el Programa.

Es por ello que el PNUD insiste en que “la producción y el uso del hidrógeno verde aparece como una alternativa relevante para cumplir el Acuerdo de París, en el que la Contribución Determinada a Nivel Nacional de México establece como objetivos la reducción de los GEI y de las emisiones de carbono negro en 22 % y 51 %, respectivamente, para 2030”.

Sin embargo, además de estos efectos ambientales positivos, la transformación posible de México en un actor relevante en la producción de hidrógeno verde lo insertaría en un mercado con un crecimiento potencial.

El PNUD abunda que “a pesar de que entre 2019 (antes de la irrupción de la pandemia por la COVID-19) y 2021, la demanda global de hidrógeno creció apenas 3.3 %, se espera que en 2030 el crecimiento sea de entre 22 y 38 % respecto de las cifras de 2021 (…). En 2050, la expectativa es más ambiciosa y anticipa una demanda global de entre 500 y 680 millones de toneladas de hidrógeno”.

El PNUD ve el potencial en las exportaciones

Entre esas condiciones que tiene el país y que, según el PNUD, le permitirían integrarse en la cadena de producción del hidrógeno verde, destaca el hecho de que “México es la principal potencia en materia de exportaciones en la región de América Latina (37.9 %)”, y que es responsable de más de la mitad de las exportaciones de la región relacionadas con manufacturas de media y alta tecnología.

Incluso, más del 80 por ciento de las exportaciones del sector de manufacturas en México corresponde a bienes de media y alta tecnología, lo cual ha derivado en una fuerza laboral capacitada y especializada en los sectores metalmecánico, automotor, aeroespacial, eléctrico y electrónico.