‘Hemos acotado a los cárteles’

La baja en cifras de los decomisos de armas en el país es un resultado de las políticas públicas implementadas por los gobiernos y es una muestra de que el poder de los cárteles de la droga se acota, afirmó en entrevista el general brigadier Inocente Fermín Hernández Montealegre, titular del Centro Nacional de Planeación, Análisis e Información (Cenapi).

“De 2011 a la fecha la estadística indica que efectivamente hay una disminución en el aseguramiento de armamento, pero eso es a raíz de que se han acotado a los grupos delincuenciales. Ellos mismos se han visto disminuidos en su capacidad operativa, como en la actualidad Los Zetas. No se comparan Los Zetas de 2011 con Los Zetas de 2016”, indicó el titular del organismo desconcentrado que depende de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR.

“A partir del año 2007 comienza a repuntarse el aseguramiento de armamento. Su máximo histórico es el 2011 y entendemos por qué: la dinámica de las organizaciones de narcotraficantes tuvieron su máximo repunte en el 2011. Tan es así que los lugares donde más se aseguró armamento fue en la frontera con Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, lugares donde era bastión de Los Zetas en 2011 y 2012”, continuó.

El general brigadier afirma que el Cenapi tiene entre sus funciones la concentración de datos de todas las dependencias del gobierno federal que están inmersas en el combate al narcotráfico y el crimen organizado.

“Dentro de estos rubros tenemos la estadística de decomiso de armamento. La PGR como tal consolida el esfuerzo nacional que realizan todas las dependencias y es aquí donde llevamos la estadística oficial del aseguramiento de todo tipo de armamento, por eso tenemos una visión muy puntual de las estadísticas que hay por sexenios, por tipo de armas, independientemente de que incide la problemática de la delincuencia organizada.”

Reporte Indigo publicó la semana pasada que en este sexenio cayó el aseguramiento de armas, de acuerdo con estadísticas entregadas por la PGR a través de una solicitud de información.

Al respecto, el titular del Cenapi afirma que en los datos del Cenapi está reflejado todo el esfuerzo nacional contra los cárteles de la droga.

“La PGR, como institución, no es la única que realiza operaciones para el aseguramiento de armamento. La PGR concentra todos los datos del esfuerzo nacional, de Sedena, Semar, Policía Federal y lógicamente de la misma PGR. Sin embargo, ese dato se concentra y eso da la estadística general. Hablar de que la PGR ha disminuido su aseguramiento de armamento tal vez sea un error, es todo el Estado mexicano a través de sus dependencias federales que combaten el narcotráfico”, apuntó.

Luego del repunte histórico de decomiso de armamento en el sexenio de Felipe Calderón, el comportamiento va a la baja, confirmó el funcionario.

“De Calderón son 162 mil armas (decomisadas en su sexenio), en lo que va de la presente administración estamos hablando de aproximadamente 40 mil 226 armas aseguradas en estos tres años. La tendencia de una política pública es, precisamente eso, disminuir la tendencia, no aumentarla. Eso incide también en que las organizaciones de narcotraficantes están siendo disminuidas, están siendo acotadas a través de la política pública”, señaló.

“En la política pública de la actual administración y en el último año de la anterior se dio una disminución en el aseguramiento de armamento. Ahora se nota claramente. Estamos a tres años y tenemos 40 mil armas aseguradas, cuando en los seis años anteriores se aseguraron más de 160 mil armas”, añadió Hernández Montealegre.

Agregó que las organizaciones criminales se han visto afectadas por la operación del Estado y las políticas públicas implementadas para tal fin han dado resultados.

En materia de poder de fuego, indicó que también se ha visto reducido el calibre de armamento decomisado, sin que ello signifique que las organizaciones de la delincuencia organizada carezcan de armamento fuerte.

“El calibre de fuego podemos mencionar que ha disminuido, incluso las organizaciones nunca van a prescindir del armamento que es automático, como los rifles de asalto, por ejemplo. Sin embargo, el número de armas largas que tenemos registrado va a la baja. Lógicamente, es un calibre que se decomisa seguido porque es el poder de ellos. Tanto el poder de fuego como el número de armas aseguradas tiende a la baja en las organizaciones”, aseguró.

El Cenapi lleva un registro del armamento especial que decomisa a los cárteles de la droga.

“Tal vez, usted dirá, cómo es posible que tienda a la baja cuando acaban de derribar en mayo pasado un helicóptero de las Fuerzas Armadas y murió gente. Siempre las organizaciones, y tenemos una estadística de las armas especiales que utilizan, que son los lanzacohetes, de diferentes calibres”, agregó.

“Las siguen teniendo (esas armas), anteriormente no se usaban contra las Fuerzas Armadas, era para defenderse entre ellos. Sin embargo, en esa ocasión la usaron y desafortunadamente tuvieron el tino de pegarle a un helicóptero. Siguen teniendo ese tipo de armamento”.

La fuerza del Estado y sus políticas públicas, señaló, han favorecido el repliegue de las organizaciones criminales.

“Las políticas públicas que ha tenido cada sexenio, cada administración, han impactado a la delincuencia organizada y así podemos decir que en el sexenio de Vicente Fox, que fue en esos años, las organizaciones no tenían un lugar específico dónde operar, operaban en todo el territorio y querían operar todas en el espacio de la otra.

“Cuando inicia el periodo del presidente Calderón no había un espacio definido para las organizaciones de narcotraficantes. Todas querían el mismo territorio. La política que emplea el presidente Calderón es atender las prioridades en ese rubro y por eso lanza sus estrategias, primero la Operación Michoacán y así se va hasta llegar a Chihuahua y después acota a Los Zetas”, apuntó el titular del Cenapi.