Heaven: Expediente incómodo

El sonido de la torreta de una patrulla sería la señal para iniciar el secuestro de los jóvenes de Tepito. 

Los empleados del Heaven le dijeron a sus clientes que era un operativo y tenían que salir. Una vez afuera, los integrantes de La Unión se los llevaron en camionetas y los asesinaron.

“El Chino”, hermano de Horacio Vite Ángel, asesinado días antes en el Bar Black de la Condesa, fue un personaje clave en el secuestro y crimen de los 13 jóvenes del barrio bravo.

“¿Qué pedo?”, dijo exaltado  “El Chino” aquella madrugada que entraron al Heaven.

Icela Lagunas Icela Lagunas Publicado el
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"La declarante dejó de prestar sus servicio en este lugar, había varias personas que llegaban a intimidar al personal para entrar a vender drogas, lo cual le causó temor"
Empleada del Heavenen su declaración
Horacio Vite Ángel, alias ‘El Chaparro’, asesinado en el Bar Black, era uno de los distribuidores de La Unión en el Bar Heaven
‘El Chino’, hermano de Horacio Vite Ángel, fue un personaje clave en el secuestro y crimen de los 13 jóvenes de Tepito
https://www.youtube.com/watch?v=kEd6tCc98qA

El sonido de la torreta de una patrulla sería la señal para iniciar el secuestro de los jóvenes de Tepito. 

Los empleados del Heaven le dijeron a sus clientes que era un operativo y tenían que salir. Una vez afuera, los integrantes de La Unión se los llevaron en camionetas y los asesinaron.

“El Chino”, hermano de Horacio Vite Ángel, asesinado días antes en el Bar Black de la Condesa, fue un personaje clave en el secuestro y crimen de los 13 jóvenes del barrio bravo.

“¿Qué pedo?”, dijo exaltado  “El Chino” aquella madrugada que entraron al Heaven.

Carlos, uno de los encargados de seguridad del bar, le hizo una señal con el pulgar hacia arriba. El “Chino” subió a toda prisa al primer piso, minutos después bajó con dos de los jóvenes.

“¿Quién mató a mi carnal?”, le preguntó “El Chino” a Eulogio Fonseca Arreola, uno de los 13 secuestrados aquel 26 de mayo del 2013. El joven de Tepito le contestó que él no sabía nada.

Fue entonces que lo tomó por los cabellos y le dio un brutal golpe en el rostro.

“No te hagas pendejo y mírame bien que esta va a ser la última vez que me veas”, arremetió “El Chino”.

Todo ocurrió muy aprisa. Afuera y adentro del after Heaven de la Zona Rosa había hombres armados del grupo La Unión de Insurgentes, que custodiaban el lugar mientras los jóvenes del barrio fueron sacados para meterlos en autos y camionetas.

Antes de ser sacados a la calle, los jóvenes de Tepito fueron concentrados en la zona donde estaba el guardarropa de los clientes del Heaven. 

Ahí, Jennifer Robles González, otra de las víctimas, entregó a escondidas su celular a la empleada del bar que atendía esa área, y quien con miedo atestiguó el secuestro masivo.

“Aclarando que esta le dio el teléfono en el momento en que se encontraba en el área de guardarropa, en los momentos en que los reunieron a todos para posteriormente llevárselos, que se lo entregó de una manera muy discreta; agregando a su vez que recuerda que el sujeto apodado “El Chino”, que fue uno de los que entró al Bar Heaven, fue quien les quitó los teléfonos celulares a varios de los clientes y de la gente que sacaron del bar”, declaró la empleada.

Fallas en todos los niveles

A un año del secuestro y crimen de los 13 jóvenes sacados del Heaven, el caso es incómodo para las autoridades de los diferentes niveles del Distrito Federal: las delegaciones por permitir la operación de estos bares y antros donde operan las bandas que venden drogas.

También es incómodo para la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF), que descubrió el hilo que conduce a una red de policías al servicio de estos grupos.

Al igual para la PGR, pues aunque un juez ordenó que se investigaran los hechos por delincuencia organizada, la dependencia de Jesús Murillo Karam jamás informó de avances.

El testimonio de ‘La Chivis’

Aunque no acudió de inmediato al Ministerio Público, sino meses después de los hechos, la encargada del guardarropa narró a detalle lo que ocurrió y quiénes participaron.

La testigo, a quien se le ubica como “La Chivis”, y de la que ya dimos cuenta en la edición “Acusan a policías de cobrar cuota”, es quien denunció la existencia de una red de policías preventivos de la SSPDF del sector Zona Rosa, que cobraban una cuota a cambio de brindar protección al Heaven y permitir la venta de droga a los “dealers” de La Unión de Insurgentes.

En este grupo de vendedores de droga autorizados por los socios del Heaven y por la policía del Sector Zona Rosa, la testigo ubicó como “dealers” de La Unión a Víctor Manuel Aguilera García, alias “El Jorge o el Chompi”; Fernando Fernández Sánchez, alias “El Paez”; Jonathan Omar Robles González, “El John”; Érick Raymundo Fernández Sánchez, “El Padre”; Víctor Manuel Torres García, “El Chubi”; César Ivan Romero Reyes, “El Taco”, Bryan Jovany Guerrero Ruiz y David Sánchez Arroyo. 

Declaró que los distribuidores autorizados por La Unión dentro del Heaven eran los dos hombres a quienes conoce como “El Pollo” y Horacio Vite Ángel, alias “El Chaparro”.

La mujer, quien desde hace años trabaja en el mundo nocturno de los establecimientos como acomodadora de autos y encargada del guardarropa, detalló que la distribución de enervantes a cargo de La Unión no sólo ocurría en el Heaven, también en el “Tahiti” y “El Cabaretito” de Plaza Ángel, todo en el perímetro de la Zona Rosa, en la delegación Cuauhtémoc.

La testigo refiere un modus de vida en el que se mezclan dueños de antros, distribuidores de droga y las autoridades de la ciudad, en este caso los policías preventivos que pasaban por su cuota puntualmente cada ocho días, o acudían al bar a emborracharse gratis.

Desde el 2008, cuando ella acomodaba coches en la vía pública a cambio de dinero, conoció a José de Jesús Carmona Aiza, “Chucho Carmona”, quien le dio la oportunidad de trabajar como encargada del guardarropa en un antro conocido como el “Diem”, en la calle de Nuevo León, en la colonia Condesa.

A partir de ese año es cuando profundiza en el ambiente de los antros, percatándose que los dueños, socios o encargados de estos eran amedrentados por grupos que venden la droga en los centros nocturnos.

“Siendo el caso que la declarante dejó de prestar sus servicios en este lugar, había varias personas que llegaban a intimidar al personal para entrar a vender drogas, lo cual le causó temor a la dicente y mejor se fue de este lugar”, se establece en su declaración que forma parte de la causa penal 214/2013.

En el 2012, Carmona la invitó a trabajar en el Heaven de la Zona Rosa. La asignaron en la puerta para revisar y evitar que las mujeres que entraban al lugar introdujeran armas o drogas en sus bolsas.

Al cabo de unos meses pudo identificar a quienes se ostentaban como socios dueños del lugar: los hermanos Mario y Dax Rodríguez, Ernesto Lobo y “Chucho Carmona”, de quienes recuerda que casi siempre portaban pistola.

“En ese tiempo también se dio cuenta que diversa gente, que luego se entera pertenecían a un grupo que se conocía como “La U” o “Unión”, se acercaron al Bar Heaven y tuvieron un trato con los dueños del lugar para la venta de droga”.

Ese pacto entre los dueños del Heaven y La Unión fue detectado por los empleados del lugar, pues recibieron la orden de no revisar a ninguna de estas personas que comercializaban la droga al interior del lugar.

“El tiempo que estuvo en este lugar trabajando pudo identificar a varios de los vendedores de droga que entraban al Bar Heaven con el consentimiento de Dax y Mario, además de ‘Chucho Carmona’ y Ernesto Lobo”.

Estos socios están en la cárcel relacionados con el secuestro y crimen de los 13 jóvenes, en su mayoría de Tepito; con excepción de Dax Rodríguez, cuyo cuerpo fue encontrado calcinado en el municipio de Huitzilac, en el estado de Morelos.

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