Hacia la ‘ciudad mercancía’ con desarrollo económico y comercial

La capital del país está en proceso de convertirse en una “ciudad mercancía”, donde se prioriza el desarrollo económico y comercial, afirman especialistas.

Esto, en el contexto de los programas y acciones que las autoridades locales han llevado a cabo para atraer turismo, principalmente de otros países, en recientes fechas; así como de la promoción que se le ha dado a la empresa de hospedaje por aplicación Airbnb a fin de impulsar el denominado “turismo creativo” en la capital.

El concepto de “ciudad mercancía” fue acuñado por David Harvey para referirse al desarrollo del capital inmobiliario de las urbes y de la concepción del territorio como un objeto comercial.

Tras la pandemia de COVID-19, que empezó en marzo de 2020 y en abril de 2022 entró en su etapa final, la Ciudad de México retomó los eventos masivos y, para noviembre del año en curso, proyectó diversos atractivos.

El 27 de octubre pasado, la secretaria de Turismo de la capital, Nathalie Desplas Puel, declaró que durante las celebraciones, conciertos, ofrendas y eventos culturales por el Día de Muertos la capital recibiría a 410 mil turistas, lo que implicaría una derrama económica de cuatro mil millones de pesos y una ocupación del 95 por ciento de los cuartos en hoteles.

El principal evento fue el desfile internacional por motivo de dicha festividad, que se llevó a cabo el 29 de octubre y terminó con un concierto de la cantante Ángela Aguilar en el Zócalo capitalino.

Dicho evento se realizó por primera vez en 2016, un año después de que se estrenó la película 007: Espectre, con locación en México y donde se muestra que la celebración incluye un desfile, algo atípico hasta entonces en el país.

Además, el domingo 30 de octubre se llevó a cabo el Gran Premio de la Fórmula 1 en el Autódromo Hermanos Rodríguez, que es el máximo evento de automovilismo a nivel internacional.

Respecto a este evento, la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) calculó una derrama económica por la venta de boletos de cuatro mil 731 millones 264 mil pesos; siete mil 236 millones de pesos por concepto de cobertura, transmisión y medios; y mil 369 millones 341 mil pesos por servicios turísticos.

En el contexto de estos eventos, el pasado 26 de octubre la Ciudad de México recibió el nombramiento de Capital del turismo creativo por parte de la compañía Airbnb y de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

Con ello, también se creó una alianza entre el Gobierno local, la aplicación y el organismo internacional para promover las actividades turísticas en la entidad.

Al respecto, la Secretaría de Turismo capitalina advirtió que con el nombramiento se busca atraer a “los nómadas digitales”: visitantes extranjeros que hacen teletrabajo y pueden elegir el lugar dónde llevarlo a cabo.

“Si lográramos un cinco por ciento de ese mercado norteamericano de manera repetitiva podemos decir que esos nómadas digitales tienen un gasto promedio de mil 510 dólares al mes y, en ese caso, con esa cantidad generaríamos mil 400 millones de dólares al año”, declaró la dependencia.

Por otra parte, el director de Airbnb en México, Ángel Terra, declaró que la pandemia transformó el mercado laboral y favoreció al teletrabajo, que se ha vuelto un mecanismo para promover el turismo y la competitividad dentro de los diferentes destinos.

El concepto de “ciudad mercancía” es una realidad

Actualmente en la Ciudad de México está en marcha un proceso donde lo importante es el desarrollo material y comercial, así como la idea del progreso tecnológico, considera Javier Lazarín Guillén, especialista en sociología y académico de la Facultad de Estudios Superiores Aragón de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Añade que eventos como la promoción internacional del Día de Muertos y el impulso a Airbnb, son una muestra de que en la capital el fin primario es el desarrollo material y comercial.

“La ciudad ya es una mercancía con un uso político, social y de negocio”, indica.

Menciona que en este proceso se busca que la ciudad figure de manera positiva hacia el mundo para atraer nuevos habitantes y capitales, aunque esto signifique un desplazamiento de las comunidades originarias.

“En la lógica del tránsito de las poblaciones de las ciudades, la ciudad está en constante movimiento y quien tiene la capacidad para estar en ella es quien se queda con capital habitando dentro de la urbe, según su economía y su clase social”, explica.

Añade que este problema de desplazamiento es cada vez más evidente en la capital.

Carencia de planeación, la raíz

No obstante, el especialista precisa que el principal problema que origina la “ciudad mercancía” es la carencia de una planeación urbana.

“El caos no se improvisa y el crecimiento de la Ciudad de México es tan desmedido que no hay política pública que pueda organizarlo, es algo sociológicamente complicado. Puede haber medidas de prevención o cambios, pero no se puede detener el proceso”, concluye.

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