"Las tarifas son un desastre. Kafka se metió en las tarifas de CFE. Es un galimatías, es un desastre. Muchas de ellas están subsidiadas, pero también tienen un impuesto muy alto”
"Está en crisis (la CFE) y va haber que salvarla en el sexenio entrante. Por todo lo doloroso que sean las medidas que se tengan que tomar"
De acuerdo con datos de la propia Comisión Federal de Electricidad, su situación financiera llegará a la bancarrota en el 2018, asegura el ex aspirante presidencial priista
“La energía es lo que libera al hombre de la esclavitud. Así de sencillo”.
Ante un desolador panorama del sector energético en México, esa frase de Francisco Labastida puede ser tomada como una premonición.
Es un especialista en temas de energía. Fue secretario del ramo durante la administración de Miguel de la Madrid y presidente de la comisión para estos temas en la pasada legislatura del Senado.
Su sentencia vaticina lo que le puede pasar a México en el sexenio de Enrique Peña Nieto, luego de una administración que deja en la ruina a la Comisión Federal de Electricidad.
La CFE es la única facultada para la distribución de energía eléctrica en México. La única y está por quebrar.
El excandidato presidencial viste un traje gris a cuadros con una corbata azul con vivos blancos. En su camisa, a la altura del abdomen, están bordadas sus iniciales.
Su oficina es una vieja casona decorada con pinturas de artistas amigos y con recuerdos de su abuelo Francisco Labastida Izquierdo, senador en 1918.
Una caja fuerte es parte del decorado de su despacho. Para la entrevista, el ex senador no utiliza la silla principal de su amplio escritorio.
Se sienta en las que son para los visitantes. Su cara de piel rojiza a cada rato tiene una sonrisa.
Una de las pinturas es muy especial para él. La hizo Rodolfo Montes, el pintor oaxaqueño, de quien presume fueron amigos. Es un gallo junto a una bandera de México. Recuerdo de la elección del 2000, la primera que perdió el PRI.
Labastida señala que de acuerdo a los números de la propia Comisión Federal de Electricidad su situación financiera llegará a la bancarrota en el 2018.
En un informe interno, que fue presentado en el Senado de la República, se establece que para finales de este año tendrá un pasivo de 854 mil 167 millones de pesos.
Esto contra un patrimonio valuado en 132 mil 942 millones de pesos.
“En seis años la Comisión Federal de Electricidad estará en quiebra. Prácticamente en quiebra. En contra de este lenguaje idílico de que la CFE es una empresa de clase mundial, sus finanzas están pésimamente mal.
“Debe ocho pesos por cada peso de capital que tiene. Perdió el año pasado, se redujo su capital un monto del orden de 50 mil millones de pesos”.
Sus respuestas son pausadas. Directas. Tiene la vieja escuela del priismo. Esa donde para evitar los nombres se dan todos los detalles, menos la identidad. Esa sale por añadidura. Así es como Francisco Labastida apunta como responsable de los problemas que tiene CFE a la actual administración de Felipe Calderón.
¿En qué periodo se llegó a esta crisis financiera?
“Yo creo que fue fundamentalmente en los últimos años. Se origina por un grupo de causas como todo fenómeno económico complejo y como toda empresa grande. Se origina principalmente por un alto robo de electricidad, una alta pérdida de electricidad.
“El doble del promedio mundial. CFE está perdiendo entre el 12 y el 14 por ciento de la energía que genera en el País. La mitad por falla técnica y la mitad por robo.
> ¿Es un nivel muy alto de robo?
“Sí por supuesto. Es muy alto. La segunda es que tiene una deuda de 80 mil millones de pesos que no ha cobrado. Gobiernos de los estados le deben unos mil 600 millones, Municipios, unos 2 mil 500 millones, y el resto son consumidores de muy diverso tipo.
“Hay un tercer factor. Es la alta incidencia que están teniendo los costos del combustóleo, cómo ha subido el petróleo, y también la baja generación de electricidad con gas que en este momento tiene. Además, por los factores de falta de gas en el país y las alertas que ha emitido Pemex, le han restringido el abastecimiento de gas a CFE y esto está provocando que sus pérdidas se eleven”.
> ¿Esto no debió haber sido previsible?
“Debería de ser previsible por CFE, por la Secretaría de Energía y por Pemex.
“La demanda de gas en México crece y la producción se derrumba. Por eso es que el abastecimiento está siendo restringido a la CFE, dándole prioridad a las empresas que utilizan este combustible. La generación de energía actualmente se hace en su mayoría con combustóleo, que tiene un precio mayor al gas.
“Tiene que consumir combustóleo, y el combustóleo en la misma unidad calórica vale cerca de cinco veces más que el gas. Y eso contribuye a las pérdidas de la CFE”.
La mano de la SHCP
La Secretaría de Hacienda también es copartícipe de la declive energética en México. Por ahí pasan todas las decisiones de inversión y es por ahí donde se detienen.
La Comisión Internacional de Energía considera a México como el cuarto país con mayores yacimientos de gas shale. Ese gas está considerado como el nuevo oro en el mundo. Sin embargo, en México es muy escasa la exploración para el gas shale.
“Eso se debe a una mala definición. Se debe a una definición que toma la Secretaría de Hacienda. Porque a final de cuentas todas las inversiones las autoriza la Secretaría de Hacienda, y solo le autoriza las inversiones para producir petróleo, que es la que le deja impuestos. La política está fijada por la necesidad de captar impuestos.
“El gas va a sustituir al petróleo, el consumo de gas va a ir creciendo porque sus precios son notablemente más bajos que los precios del petróleo. Esa tendencia se está dando, porque, además de que es más limpio, es más barato que el petróleo y que el carbón. Está desplazando a los otros combustibles primarios. A Pemex no le autorizan inversiones que se recuperan en menos de un año, si no son para producir petróleo”.
> ¿Cuál es el argumento?
“El que usted se quiera imaginar. Si yo digo que más que un argumento es un pretexto”.
El principal problema para el ex legislador es la política hacendaria del gobierno panista. Para él la Secretaría de Hacienda tiene que sacar las manos de las empresas del gobierno. Estas deben tener cierta independencia y capacidad de inversión. De lo contrario seguirán en un círculo vicioso que termina por quebrarlas.
“Las empresas productivas no necesitan que su presupuesto de gasto tenga que ser autorizado por la Secretaría de Hacienda. Son autónomos y es su consejo de administración, como en una empresa privada, quien toma las decisiones para que la empresa marche bien. Eso no sucede con CFE ni con Pemex”.
La herencia
El derrumbe financiero al que se acerca CFE caerá justo en el regreso del PRI a la Presidencia de la República. Se tendrán que tomar las decisiones para revertir esta tendencia. Hasta el momento en el equipo de Enrique Peña Nieto nadie ha tocado el tema.
Para Labastida es un problema grave, del cual la mayor parte de las personas y políticos no tienen idea de sus repercusiones.
“Se convierte en un tema crítico que el siguiente gobierno tiene que atender.
“Le heredan una papa caliente . Le heredan un problema que va a hacer crisis en el siguiente gobierno. Le heredan una situación de desastre y le heredan toma de decisión para los ajustes, todo al siguiente gobierno.
“Este gobierno queda muy bien. Baja las tarifas. Dice ya no consumas gas porque se lo voy a dar a los empresarios. Y le deja la papa caliente al siguiente gobierno”.
No se podrán dar soluciones mágicas, apunta, serán medidas enérgicas y serias.
“Está en crisis esta empresa y va a haber que salvarla en el sexenio entrante. Por todo lo doloroso que sean las medidas que se tengan que tomar.
> ¿Están conscientes de esta situación?
“No lo sé. Lo desconozco. Me imagino que lo deben haber ya conocido”.
En octubre de 2009, Felipe Calderón, por decreto, extinguió la empresa Luz y Fuerza del Centro.
Los argumentos que utilizó es que era un desastre financiero. Las pérdidas cada día eran mayores y eran insostenibles las relaciones con el Sindicato Mexicano de Electricistas. Todo apunta a que la mala estrategia jurídica con la que hicieron esta extinción terminará costándole más al gobierno en pago de salarios caídos y jubilaciones, que si la hubiera mantenido presupuestalmente activa los últimos tres años.
Francisco Labastida está de acuerdo en que Luz y Fuerza del Centro era una empresa poco rentable por su capacidad técnica y económica. Las deudas que tenía la hubieran consumido tarde o temprano.
“Comisión Federal de Electricidad va para allá”.
La tarifa kafkiana
El excandidato presidencial se mantiene con sentido del humor todo el tiempo. Hay ocasiones en que las malas noticias terminan provocando risa en vez de preocupación. Y ésta parece ser una de ellas.
De pronto una alarma suena. El sonido viene de una calculadora color plata. Es la melodía clásica de Rossini, esa que acompañaba en su cabalgata al Llanero Solitario. Forajido enmascarado en busca del bien común.
Labastida bromea con las tarifas de CFE. Las considera otra de las causas por las que la empresa se encuentra en un caída libre.
“Las tarifas son un desastre. Kafka se metió en las tarifas de CFE. Es un galimatías, es un desastre. Muchas de ellas están subsidiadas, pero también tienen un impuesto muy alto
“Los bienes y patrimonio de CFE tienen un impuesto, que le llaman aprovechamiento de 9 por ciento de la inversión realizada. Tiene que pagar impuesto por 60 mil millones o una cosa así. Que todo lo utilizan para subsidiar”.
> ¿En qué situación política pone a México estas condiciones del sector eléctrico que deja Felipe Calderón?
“No me la quiero imaginar”.
