Las autoridades estatales y municipales de Ciudad Juárez habilitaron un espacio para que los migrantes venezolanos que han sido expulsados de Estados Unidos a México, específicamente a la frontera de Juárez, puedan pernoctar luego de que los albergues de la localidad se saturaron.
El nuevo espacio -que no reúne las características para ser considerado un albergue- está ubicado en la avenida Valle de Juárez que corresponde a un área comercia y es un edificio que le fue prestado al Gobierno Municipal por un empresario.
Ahí fueron trasladados unos 300 venezolanos, quienes habían permanecido al exterior del Centro de Atención Integral al Migrante (CAIM) que está a cargo del Consejo Estatal de Población (COESPO) y se encuentra a unos cuantos metros del cruce internacional por donde ellos fueron expulsados.
Los venezolanos estuvieron pernoctando afuera del CAIM aguantando las bajas temperaturas que se registran en la noche y la lluvia que se dejó sentir en las últimas horas, así como hambre.
Los migrantes estuvieron solicitando a la comunidad juarense ropa y cobijas para protegerse de las inclemencias y debido a que los retornaron a la frontera de Juárez sin su ropa, sin documentos, sin el dinero que llevaban y sin sus zapatos, todo les fue quitado en los centros de detención de Estados Unidos, denunciaron.
El representante de la gobernadora de Chihuahua en Ciudad Juárez, Oscar Ibáñez, dijo que a partir del 12 de octubre Estados Unidos estará retornando mil venezolanos por día a México a través de cinco puntos fronterizos, uno de estos es Ciudad Juárez.
Se estima que unos mil 400 venezolanos han sido retornados a Ciudad Juárez desde el pasado 12 de octubre, un tope máximo por día de 200, aseguró Ibáñez.
Ante las inclemencias del clima, dijo, se buscó la forma de proporcionarle un techo a los venezolanos por lo menos para que no duerman en la calle.
Héctor Rafael Ortiz Orpinel, secretario del Ayuntamiento de Juárez que el espacio es prestado y será temporal mientras las personas venezolanas permanezcan en Ciudad Juárez.
Ortiz explico que ya no hay espacio en el albergue municipal Kiki Romero ni en el federal Leona Vicario, porque hay migrantes de otras nacionalidades que en fechas anteriores también fueron expulsados por Estados Unidos bajo el Título 42.
“Ya ahorita no caben más personas en este espacio designado para ellos, ni en el Kiki Romero que es el que nosotros estamos apoyando” declaró Ortiz Orpinel quien dijo que en el domingo entraron 30 personas al centro humanitario municipal y otros 30 el lunes.