Green Patcher: alternativa al mal crónico del bacheo
Año con año se hacen gastos millonarios en el bacheo de avenidas y calles; como una manera de atender el problema, una empresa ofrece una alternativa ecológica y de alta duración
David MartínezEl bacheo de las calles y avenidas de la Ciudad de México es una tarea colosal en la que los gobiernos gastan millones de pesos al año.
Tan solo en el año 2020, la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) de la capital invirtió 50 millones de pesos en el mantenimiento de la carpeta asfáltica en vialidades primarias de la metrópoli, que mide un total de mil 485 kilómetros cuadrados.
Sin embargo, hay empresas que con nuevos sistemas de bacheo se han convertido en las líderes en la ejecución de estos trabajos y han ofrecido alternativas más viables.
Una de ellas, es Green Patcher, compañía mexicana que desde hace 10 años se dedica al bacheo de vialidades y utiliza la tecnología Velocity Patcher, que es de larga duración y ecológica.
La compañía es la única que tiene la licencia para usar el adelanto e implementarlo tanto en el país como en la ciudad.
Tecnología ecológica para el bacheo
En toda su trayectoria, Green Patcher ha bacheado 9 millones de metros cuadrados en ciudades como Tijuana, Mérida y la Ciudad de México, dice Antonio Fernández Palazuelos, gerente general de la empresa.
El representante de la contratista dice que a nivel nacional, son los únicos que pueden hacer uso de la máquina Velocity Patcher.
“Somos los únicos con la licencia para el Velocity Patcher y lo que se logra es un estándar de calidad más alto de lo que la norma mexicana exige, estamos en el estándar europeo”, declara.
Fernández Palazuelos detalla que el método de bacheo de la tecnología aplicada genera un método en frío que hace más efectivas las reparaciones a las avenidas.
“Nosotros hacemos una aplicación de mezcla asfáltica en frío y aplicada con presión neumática con el aparato Velocity Patcher”, indica.
En la capital del país, la empresa trabajó con la Agencia de Gestión Urbana (AGU) en 2018, así como con las alcaldías Álvaro Obregón y Miguel Hidalgo durante el periodo de 2018 a 2021.
“Nos siguen llamando porque nuestro trabajo es de alta calidad”, refiere Fernández Palazuelos quien también es socio de Green Patcher.
Además, el Velocity Patcher es una herramienta que no produce emisiones contaminantes, a diferencia de los instrumentos que aplican las emulsiones asfálticas calientes que sí generan gases, asegura.
Por último, dice Fernández Palazuelos, la aplicación de la mezcla con la máquina es de tan solo dos minutos y tienen una duración de años en la carpeta vehicular.
Niegan irregularidades
El pasado 24 de agosto, Reporte Índigo publicó en el texto titulado “Premian Irregularidades en Álvaro Obregón” en donde se informa que Green Patcher fue auditada por la Secretaría de la Contraloría General de la Ciudad de México en 2019 por un contrato que firmó en 2018 con la entonces AGU.
La auditoría menciona que no se encontraron en el expediente de la adjudicación, los estudios necesarios para hacer la contratación ni evidencia de que la compañía llevara a cabo labores de bacheo por un monto de 312 mil pesos.
Sin embargo, Antonio Fernández Palazuelos niega que la auditoría practicada signifique que Green Patcher sea una empresa irregular. “Solo nos dedicamos al bacheo y lo hacemos bien, no somos una empresa que no es especializada y no somos irregulares”, declara.
En primer lugar, dice, la auditoría practicada no es una investigación judicial. Sino una verificación de que el contrato se llevó a cabo con legalidad.
“Es el documento de tipo formal que suscribe el auditor debidamente fundado y motivado, donde se refleje la evaluación de los resultados obtenidos de la verificación de los controles internos implementados, las observaciones y acciones preventivas y correctivas, no atendidas y/o solventadas en tiempo y forma por parte de los entes públicos valorando la suficiencia o el grado de confianza que representan”, así define a la auditoría la Ley de Auditoría y Control Interno de la Administración Pública de la Ciudad de México.
Respecto a la segunda observación hecha por la Contraloría, sobre que no se pudo comprobar la realización de trabajos de bacheo por un monto de 312 mil pesos, el gerente de la empresa menciona que eso sucede por los programas de repavimentación de las autoridades.
Además, señala que los 312 mil pesos no son ni el 10 por ciento de los 40 millones de pesos que la AGU le adjudicó a su empresa.
“Al no ser ni el 10 por ciento del contrato lo que no se pudo comprobar, ni siquiera se puede aplicar la garantía de vicios ocultos”, indica.
También, dice, su empresa ha participado tanto en concursos de licitación pública como de invitación restringida y le han adjudicado directamente.
Sin embargo, comenta, si las alcaldías o el mismo gobierno le adjudican directamente, está totalmente justificado porque son la única empresa con la licencia del Velocity Patcher.
“La Ley de Adquisiciones de la Ciudad de México dice que cuando una empresa tenga la patente o la licencia exclusiva de algún producto o servicio, se puede hacer la excepción a la licitación pública y, aún así, hemos participado en concursos de licitación y también de invitación restringida en los que hemos ganado”, indica.