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Héctor García, diputado local de Movimiento Ciudadano, alertó a la población para que no se meta a bañar en aguas del Río La Silla. Foto: Especial

Gran Parque Río La Silla, en el abandono por el municipio de Guadalupe

El Gran Parque Río La Silla ha tenido un gran deterioro apenas una década después de que abriera sus puertas al público

Hace algunos años, el municipio de Guadalupe presumía el tramo del Río La Silla que pasa por su territorio como el único cauce de agua viva en la Zona Metropolitana de Monterrey (ZMM).

Hoy en día, sin embargo, el sitio luce sucio, lleno de escombros, árboles secos y pintas,

además de convertirse en tiradero de animales muertos y refugio para personas en situación de calle, panorama que evidencia el abandono por parte de la administración encabezada Cristina Díaz, quien ha procurado poca o nula vigilancia en el lugar.

El río fue rescatado durante la construcción del Estadio BBVA del Club de Futbol Monterrey, pues la empresa propietaria invirtió cientos de millones de pesos para limpiar el área y construir el Gran Parque Río La Silla en 2013.

Sin embargo, apenas una década más tarde, tanto el río como el parque se encuentran en malas condiciones, situación que pudo constatar Reporte Índigo mediante un recorrido por la zona.

Luis Armando Torres, ecologista y exdiputado local, participó en parte del recorrido y observó de primera mano los daños que ponen en riesgo a la flora y fauna del lugar; lo más grave, asegura, es que el ayuntamiento no cuenta con un plan de manejo para tener en condiciones aceptables el área.

“Buscaremos que tenga un plan de manejo que contemple y que atienda la problemática diversa del Río La Silla. Aquí puedes ver los residuos sólidos, la basura, puedes ver también algunos asentamientos, hay gente que está viviendo por acá y eso también causa inseguridad; hay ciudadanos que se han quejado de esa situación, de robos y de algunos encuentros violentos, también hay problemas de saqueo, se ve que han sacado algunas cosas de aquí, leña, algunos árboles”, afirmó Torres.

“Está también el problema de las especies, de la vida que hay aquí, de la flora, de la fauna, de las garzas, de los pájaros, de las aves, de todos ellos, de los ahuehuetes, de los sabinos, que son tan bellos; el Río La Silla tiene toda esta diversidad de ecosistemas, y creo que al plan de manejo tienen que convocarlo”, declaró.

El activista aseguró que, aunque la recién emitida declaratoria de Área Municipal Protegida se trata de una buena medida, la ausencia de un plan estratégico desembocará en escasos resultados en la protección del lugar.

“Sí se puede hacer, creo que sí se debe hacer, porque una vez que se hizo la declaratoria estamos muy interesados en que se haga la siguiente fase; son dos años, creo que cualquier limitación puede superarse y tendría que buscarse esa forma… Sí tiene que ver con recursos, sí tiene que ver con la operatividad, y habría que hacerlo, habría que decidirse ya por ello”, apuntó.

“El cabildo es el que autoriza este plan, se propone desde la autoridad municipal, desde la alcaldesa, y enseguida se buscan las formas de realizar; es una cuestión que no se puede dejar, cada cinco años los planes de manejo tienen que renovarse, entonces no quisiéramos llegar a esa fecha en la que nos falte un plan para el Río La Silla”, comentó el exlegislador.

Chapuzón peligroso

Por su parte, Héctor García, diputado local de Movimiento Ciudadano, alertó a la población para que no se meta a bañar en aguas del Río La Silla, remarcando que, aunque se han realizado trabajos de desazolve, estos datan de hace algunos años, por lo que cualquier “chapuzón” podría ser potencialmente peligroso para los bañistas.

García García, quien también es líder del Sindicato de Trabajadores del Municipio de Guadalupe, pidió a la alcaldesa de Guadalupe, Cristina Díaz, destinar más recursos para poner orden en la zona; incluso, sugirió buscar que otras autoridades se involucren en la conservación del lugar.

“No veo que el municipio tenga un plan de manejo ni el presupuesto adecuado para atenderlo; nunca se pensó que (el río) se iba a estar deteriorando precisamente por el propio uso, la sequía, la falta de agua, la falta de mantenimiento y todo lo que tiene que ver con un plan para conservar el área”, lamentó García.

El diputado emecista señaló la importancia de que espacios de este tipo no se pierdan a causa de la escasa planeación y los magros recursos destinados por las autoridades al medio ambiente, cuestión que, al menos para Guadalupe, parece no representar una prioridad.

“Sería lamentable en una ciudad como ésta, que crece día a día con más ciudadanos, con más casas, más carreteras, con más contaminación, que esos lugares se estén deteriorando por falta de planeación (…) Ya no es un área para bañarse, es un agua que no está como en aquellos años, es un agua que atraviesa por la ciudad, que hay derrama de desechos no necesariamente tóxicos, pero sí la propia humanidad, va un desecho normal, cada que llueve y llega ahí, entonces no es ni bueno para la salud”, advirtió.

Un espacio natural público 

El Gran Parque Río La Silla tuvo un costo cercano a los 130 millones de pesos, iniciando su construcción en 2012 y concluyendo un año después, en 2013.

Cuenta con una longitud de entre 16 y 18 kilómetros, y abarca desde la colonia El Realito, al sur, hasta el parque Ciudad Despierta, al noroeste, pasando por los parques La Pastora, Tolteca, Ecológico La Silla, y el Guadalupeke.

El proyecto se gestó junto a la construcción del Estadio BBVA, siendo respaldado económicamente por el Grupo Femsa, así como por autoridades estatales y municipales, quienes emprendieron el rescate del referido espacio que comprende el Río La Silla y sus márgenes.

Hoy el Gran Parque Río la Silla cuenta con seis plazas y dos zonas de prados.

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