Para la gran mayoría de los automovilistas, las personas dedicadas a “cuidar coches” en la calle, conocidos como franeleros han resultado ser un verdadero dolor de cabeza. Ahora, se dio a conocer un caso donde varios de ellos agredieron a una mujer, por no querer pagarles por estacionarse, presuntamente en calles de la colonia Morelos en la alcaldía Venustiano Carranza.
A través de las redes sociales circula un video donde se puede ver a la fémina ser sometida por otra, mientras un hombre que participaba en la trifulca le arranca algo de las manos que parecer ser su celular. También se puede observar a una joven que se mete para agredir a la víctima.
A pesar de que habían oficiales en la escena, apenas pudieron calmar los ánimos y lograr que soltaran a la mujer; en ningún momento se observa la detención de los involucrados. Cabe destacar que los agresores aseguraron pertenecer a la célula delictiva La Unión, de acuerdo con el periodista Carlos Jiménez.
LA LLAMAN YOSIMONO
Es Yoselin Vázquez
La mujer franelera q golpeó así a otra por no darle $ por estacionarse en la calle.
Vive ahí mismo en La Morelos.
Tenía problemas con La Unión, pero ahora dice q la protegen para exigir $.
Si la ubica, avise a @SSC_CDMXEl caso #C4EnAlerta pic.twitter.com/PhTjHWOBh7
— Carlos Jiménez (@c4jimenez) December 20, 2024
¿Quienes son los franeleros agresores de la mujer?
Según el comunicador los agresores ya fueron identificados: la franelera que golpeó hasta con las rodillas a la automovilista es Yoselín Vázquez, alias “Yosimono“. El hombre que también aparecer y escapa luego de arrebatarle sus casas es Luis. Aunque la primera tenía problemas con el grupo delictivo, “ahora dice que la protegen para exigir dinero“.
Parquímetros V.S Franeleros: la lucha por los lugares de la CDMX
Algunos habitantes de la Ciudad de México, donde se presenta el problema de los franeleros (entre otras entidades), dieron su testimonio a Reporte Índigo sobre las ventajas y desventajas de los “viene viene” y los parquímetros.
Varios aseguraron que es “complicado” el uso de las máquinas porque están alejadas y luego no aceptan las monedas, sin contar con las puntuales “arañas” en caso de pasarse de tiempo. Sin embargo, lo prefieren a tener que lidiar con los supuestos cuidadores, quienes además incumplen con su palabra de cuidar los automóviles.