El Fideicomiso Maestro del Metro (FIMETRO), donde se recaudan los fondos derivados del aumento a la tarifa en 2013 de tres a cinco pesos, se auditó en cuatro ocasiones por irregularidades sin que existan sanciones contra algún funcionario, pese a las denuncias que se presentaron y el llamado a deslindar responsabilidades.
El 14 de abril de 2016, el grupo parlamentario del PRD en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) presentó un punto de acuerdo para que la Auditoría Superior de la Ciudad de México (ASCM) investigara el funcionamiento del FIMETRO debido a presuntas malas gestiones por parte del exdirector del Metro, Joel Ortega.
El exhorto indica que a pesar de que se aumentó la tarifa de acceso al medio de transporte, no se veían los resultados de la promesa de mejorar y fortalecer el servicio.
El partido también solicitó deslindar responsabilidades del manejo irregular del Fideicomiso y hacer válido el Artículo 109 de la Constitución Política mediante el cual se sancionan los actos de corrupción y cohecho de los funcionarios.
Sin embargo, el órgano fiscalizador no atendió el llamado de la ALDF y solo entregó el 4 de mayo de ese mismo año al exdiputado y presidente de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior, Iván Texta, un informe de la Cuenta Pública correspondiente al año 2015.
Dicho documento contiene la investigación con número de folio ASCM/99/16 donde se revisan los estados de cuenta del FIMETRO de 2015 pero solo se realiza una recomendación por no emitir en tiempo real los estados financieros de los ingresos por la venta de tarjetas y boletos.
Datos del Tercer Informe Trimestral de 2018 del Fideicomiso, revelan que desde su creación formal en octubre de 2014 hasta septiembre de 2018, recaudó un total de 12 mil 888 millones de pesos, de los cuales, 10 mil 262 millones fueron usados en siete de nueve proyectos durante las administraciones de Joel Ortega, Jorge Gaviño y Javier Jiménez Alcaraz, pero ninguno está terminado.
El más avanzado es el Proyecto 3, “Mejora de Tiempos de Recorrido de L4, L5, L6 y LB” con 81 por ciento de realización y una inversión de tres millones 35 mil pesos.
Fuentes del Metro consultadas por Reporte Índigo, quienes prefirieron que no se revelara su verdadera identidad, confirmaron que al interior no hay funcionarios a los que se les hayan promovido responsabilidades administrativas por los manejos irregulares del FIMETRO, a pesar de las observaciones de la Auditoría y la Contraloría.
Continúa impunidad en el Fimetro
En 2017 y 2018 se realizaron las tres últimas fiscalizaciones al FIMETRO durante las revisiones del ejercicio de la Cuenta Pública del Fideicomiso 2016 y 2017, en ellas, se auditaron los recursos erogados para la compra de 10 trenes para la Línea 1 y la prestación del servicio de sustitución del sistema de tracción de frenado de 85 trenes modelo JH.
Dichas indagatorias de la ASCM y la Contraloría General de la capital fueron concluidas en 2018 y publicadas en los portales de transparencia de los órganos fiscalizadores en este año. A pesar de que se detectaron irregularidades, no hay funcionarios sancionados.
En la primera, la Contraloría registró anomalías en la cifra de trenes recuperados con recursos del Fideicomiso de 2014 a 2017.
La investigación, con número de folio A-J11, elaborada en el tercer trimestre del 2017 por la Contraloría, estipula que 72 trenes tuvieron que ser rehabilitados entre octubre de 2014 y junio de 2017, no obstante, solo se recuperaron 28, aún cuando se efectuó una inversión de 572 millones de pesos
En la segunda, la ASCM/105/17 de cumplimiento, la Auditoría detectó que el contrato STC-CNCS-173/2014 para la sustitución del sistema de tracción de frenado de 85 trenes modelo JH, adjudicado a la empresa Alstom el 14 de noviembre de 2014 con un costo de dos millones 972 mil 578 pesos, recursos del FIMETRO, no fue respetado en su cláusula quinta pues nunca se determinó un porcentaje del anticipo de los pagos.
Además, no cumplió con el Programa Anual de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios (PAAAS) del Metro de 2017; el contrato no se reportó como vigente en el ejercicio de ese año.
“Se determinó que el presupuesto aplicado por la entidad se sujetó a la normatividad aplicable, excepto porque en el contrato administrativo del servicio de sustitución del sistema de tracción frenado de 85 trenes JH, consistente en el servicio de modernización y su mantenimiento, así como a los sistemas de puertas y de generación de aire, el sujeto fiscalizado no cumplió los requisitos mínimos que establece el Reglamento de la Ley de Adquisiciones para el Distrito Federal, y porque no se proporcionó evidencia de que el contrato revisado se incluyera en el PAAAPS 2017 o se hubiese reportado en sus modificaciones”, menciona la Auditoría.
Por último, en la ASCM/106/17 se cuestiona la compra de los 10 trenes NM/16 a la empresa CAF en el año 2015 con una inversión de mil 306 millones de pesos; el Proyecto 1 del FIMETRO dice que debieron ser un total de 45.
En su respuesta a la Auditoría, el Metro señala que tomando en cuenta que FIMETRO recauda aproximadamente dos mil 500 millones de pesos al año y la compra de los 45 trenes se estimaba en un precio total de 14 mil millones de pesos, la transacción hubiera comprometido los recursos del Metro de los cinco años siguientes.
La ASCM no realizó ninguna observación, debido a que no estaba fiscalizando el año en que se firmó el contrato; revisaba la Cuenta Pública del 2017 y las cláusulas vigentes.
No obstante, en ninguna investigación realizada al FIMETRO se emiten recomendaciones para sancionar administrativa o judicialmente a los funcionarios.
En 2017 la ASCM cuestionó la compra de 10 trenes de la empresa CAF con una inversión de mil 306 millones de pesos, aunque el Proyecto 1 del FIMETRO muestra que debieron ser un total de 45
