Fibrosis pulmonar: el costoso padecimiento que ‘asfixia’ a adultos mayores

La afección representa el 10 por ciento de la demanda de atención en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, lo que ha encendido las alarmas en el sector Salud
Daniel Flores Daniel Flores Publicado el
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En México, una enfermedad que afecta a los adultos mayores avanza rápidamente. Se trata de un padecimiento que genera graves dificultades para respirar y, en consecuencia, un debilitamiento generalizado del cuerpo ante la falta de oxígeno.

Es la Fibrosis Pulmonar Idiopática (FPI), una patología que impacta la calidad de vida de las personas diagnosticadas, ya que los pulmones comienzan a cicatrizar de forma progresiva.

En los últimos años, se han abierto diversas líneas de investigación para descubrir qué genera esta enfermedad, ya que hasta el momento se desconoce la causa que la desencadena.

En el sistema de salud del Gobierno federal, aún no se ha logrado tener un censo exacto de las personas diagnosticadas con esta afección, que presenta una alta tasa de mortalidad en los centros hospitalarios especializados.

En el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), la FPI representa el 10 por ciento de la demanda de atención médica, lo que ha encendido las alarmas de las autoridades para generar mayor conciencia sobre su prevención y tratamiento.

Para quienes enfrentan esta enfermedad, la esperanza de vida no supera los dos años en promedio. Además, el proceso para mitigar los estragos es doloroso y conlleva diversas dificultades.

Según comunicados oficiales de las instituciones del sector Salud, la mayoría de las personas que asisten al INER arriba con severos daños en los pulmones. En los casos más graves, las personas ya perdieron la mayor parte de su capacidad respiratoria.

Así se enfrenta la fibrosis pulmonar: dolor y gasto

Una persona diagnosticada con FPI enfrenta síntomas dolorosos y comienza un proceso de rehabilitación que se extiende por meses e incluso años, además de un tratamiento costoso y prolongado.

Y es que los pacientes que enfrentan esta enfermedad presentan diferentes problemas, que van desde un dolor torácico agudo y el engrosamiento de las yemas, hasta el blanqueamiento de las uñas de los dedos, fatiga prolongada y una pérdida progresiva de peso.

Estos problemas se agudizan con el tiempo debido a que la enfermedad afecta los pulmones y, a la larga, desencadena otro tipo de dificultades en todo el sistema respiratorio y cardiovascular.

El tabaquismo, el principal factor de la Fibrosis Pulmonar Idiopática

Las razones por las que se genera esta enfermedad aún se encuentran en investigación, por lo que se han abierto varias líneas de estudio. En el plano internacional, también prevalece la incertidumbre sobre los datos de las causas, pero se tiene la certeza de que la FPI presenta una alta tasa de mortalidad, que es de 61.2 por cada millón de personas diagnosticadas.

De acuerdo con especialistas del INER, el principal factor de riesgo para desarrollar fibrosis pulmonar es el tabaquismo.

También han mostrado cómo la presencia constante en áreas donde se realiza construcción, agricultura o minería pueden mermar la salud de los pulmones.

De acuerdo con cifras oficiales del INER, el 50 por ciento de los casos diagnosticados con esta patología fallece dos o tres años después del diagnóstico.

Esto se debe, según el centro médico especializado, a una detección tardía y, sobre todo, a la falta de un tratamiento específico, ya que las terapias actuales solo sirven para aliviar los síntomas o prevenir complicaciones asociadas con la enfermedad.

Los reportes indican que la mayoría de las personas que asisten al INER llegan con severos daños en los pulmones. En los casos más graves, estos pacientes han perdido la mayor parte de su capacidad respiratoria.

Y es justamente en este hospital, ubicado al sur de la Ciudad de México, donde se encuentra el único centro médico de alta especialidad que atiende este tipo de enfermedades respiratorias y donde se ha detectado la adversidad de la FPI.

¿Por qué las mujeres enfrentan enfermedades respiratorias?

Nunca en su vida fumaron y aun así sus pulmones se encuentran ennegrecidos y a punto del colapso. Son miles de mujeres que enfrentan diversas enfermedades respiratorias a causa de respirar humo por años o incluso décadas.

Dedicarse toda su vida —o gran parte de ella— a cocinar con leña les generó un daño irreversible en sus vías respiratorias, como la fibrosis pulmonar o la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC).

Expuestas durante años al humo de los fogones, las mujeres de comunidades rurales y de estratos sociales bajos en varios estados del país se enfrentan, en la última etapa de su vida, a procesos de recuperación sumamente dolorosos para padecimientos que no tienen cura.

Datos oficiales del Gobierno federal revelan que al año más de 9 mil mujeres fallecen en México a causa de la EPOC y otras enfermedades respiratorias que son generadas por el humo de leña y otros agentes contaminantes.

Cocinar con leña y estar expuestas al humo ha condenado a mujeres de la tercera edad en México a vivir con tanques y concentradores de oxígeno debido a problemas respiratorios agudos. Foto: Especial

Atención oportuna, clave para evitar falla en el diagnóstico

A pesar de la alta letalidad de la FPI, hay un amplio desconocimiento acerca de esta enfermedad en la comunidad médica de la República Mexicana, lo que resulta en errores frecuentes en el diagnóstico inicial.

Ivette Buendía Roldán, especialista del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), aseguró en una entrevista con Reporte Índigo que no hay cifras oficiales sobre la fibrosis pulmonar, lo que dificulta ofrecer un panorama general de esta afección a nivel nacional.

La especialista agregó que, debido a la falta de información y conocimiento sobre esta patología, a menudo se diagnostica erróneamente como EPOC o asma a personas que presentan problemas respiratorios, lo que retrasa un tratamiento adecuado.

La Fibrosis Pulmonar Idiopática es una enfermedad mortal poco conocida entre la comunidad médica en México, lo que lleva a diagnósticos erróneos, como Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica o asma. Foto: Especial

“Estudios han revelado que pueden pasar hasta dos años para que los pacientes reciban un diagnóstico correcto y sean referidos al INER, lo que agrava su estado de salud. Además la falta de conocimiento sobre la fibrosis pulmonar entre algunos médicos contribuye a estos retrasos”, dijo Buendía Roldán.

A medida que la enfermedad avanza, los gastos médicos también se disparan. La doctora advirtió: “Entre más se tarde en detectar la fibrosis pulmonar, más se condena al paciente, ya que su capacidad pulmonar irá disminuyendo y los gastos aumentarán”.

Ivette Buendía Roldán afirmó que el INER desempeña un papel crucial en la atención de estos pacientes y recomendó a la ciudadanía que, ante síntomas como tos seca persistente durante más de tres meses o dificultad para respirar en actividades diarias, acudan con un neumólogo para obtener un diagnóstico certero.

El caso de María del Carmen: problemas pulmonares sin haber fumado

María del Carmen nunca consumió un cigarro de tabaco en su vida, y a pesar de ello, enfrentó graves problemas pulmonares. En los últimos años de su vida, la habitante del Estado de México tuvo serias dificultades para respirar y secuelas en todo el cuerpo a causa de este padecimiento.

En 2022 fue diagnosticada con FPI. El reporte médico indicó que los pulmones de la mujer de la tercera edad estaban dañados por la inhalación de humo y otros factores que pudieron generar esta afección.

Tras dos años de idas y vueltas a hospitales, finalmente falleció en 2024 María del Carmen en el municipio de Ecatepec, luego de ser internada por un cuadro respiratorio que se agravó horas después de su ingreso al hospital.

De acuerdo con el testimonio de sus familiares, la originaria del Estado de México cocinó durante varios años con leña y otros combustibles debido a la falta de una cocina y cilindros de gas.

A la larga, esto le generó una enfermedad que le costaría la vida a la mujer de 69 años, quien en sus últimos dos se vio forzada a usar concentradores y tanques de oxígeno las 24 horas del día, los siete días de la semana, ya que su capacidad respiratoria se fue deteriorando con el paso de los meses.

Sus familiares afirmaron que, inicialmente, María del Carmen había sido diagnosticada con EPOC tras presentar problemas para respirar en años anteriores, lo que provocó que la fibrosis pulmonar avanzara de forma acelerada y con tratamiento erróneo de parte de los médicos que la atendieron en ese entonces.

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