FGR va por Lozoya
Emilio Lozoya es el primer funcionario de alto nivel del sexenio anterior en ser perseguido por la FGR. La Policía Federal Ministerial cateó anoche la casa del exdirector de Pemex para ejecutar una orden de aprehensión en su contra
Salvador VegaLa Fiscalía General de la República (FGR) giró órdenes de aprehensión contra Emilio Lozoya Austin, otrora director de Petróleos Mexicanos y Alonso Ancira Elizondo, dueño de la empresa Altos Hornos de México, SAB de CV (AHMSA) quienes han sido señalados como presuntos responsables de actos de corrupción y desvío de recursos públicos en el caso Odebrecht.
A menos de 24 horas de que la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público decidiera congelar las cuentas tanto del exdirector de Pemex como de la empresa AHMSA, la FGR cerró la maniobra, emitiendo una solicitud de captura contra Lozoya Austin.
Con esto, el exfuncionario es el primer integrante de la administración de Enrique Peña Nieto en ser buscado por la justicia mexicana por los diversos escándalos de corrupción que pesan en su contra.
A la par de estos hechos, Alonso Ancira Elizondo, dueño de la empresa Altos Hornos de México, fue detenido la tarde de este martes por elementos de la Interpol en la ciudad de Mallorca, España. Esto en atención a una denuncia presentada por la apoderada legal de Pemex, como lo confirmó la propia Fiscalía a través de su cuenta de Twitter, en un breve mensaje emitido cerca de las 21:40 horas de este martes.
Cabe destacar que Emilio Lozoya, quien al cierre de esta edición se mantiene en paradero desconocido –por lo que se considera un prófugo de la justicia mexicana– ha sido el protagonista de al menos media decena de escándalos desde el año 2012, durante su etapa como coordinador de vinculación internacional en la campaña electoral de Enrique Peña Nieto, periodo en el cual Lozoya Austin habría entablado acuerdos financieros con la constructora brasileña Odebrecht.
Desde el pasado 22 de mayo, la Secretaría de la Función Pública (SFP) emitió una sanción para inhabilitar como servidores públicos a dos funcionarios de Pemex en funciones durante el sexenio 2012-2018, siendo Lozoya Austin uno de los implicados.
“Una de las inhabilitaciones, por 10 años, es resultado de un cuidadoso procedimiento de responsabilidades administrativas en donde se detectó que se proporcionó información falsa en la declaración de situación patrimonial”, expuso la secretaría en un pronunciamiento en el que omitió los nombres de los funcionarios.
La noche de este martes, la Policía Federal Ministerial (PFM) procedió al cateo y eventual aseguramiento de uno de los domicilios de Lozoya Austin, ubicado en Lomas de Bezares en la Ciudad de México. Esto en apego al procedimiento girado en contra del exfuncionario desde el domingo por los delitos de lavado de dinero, cohecho y defraudación fiscal.
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Parálisis financiera
Luego del bloqueo de las cuentas tanto de Lozoya como AHMSA, la Secretaría de Hacienda justificó la acción, argumentando que se identificó en el sistema financiero nacional e internacional que se llevaron a cabo “múltiples operaciones con recursos que presuntamente no proceden de actividades lícitas”, presumiblemente derivados de actos de corrupción.
“En relación a lo anterior, se destaca que tanto el sujeto de referencia como la empresa señalada, tienen expedito su derecho de garantía de audiencia y defensa, particularmente para hacer valer, en términos de la legislación aplicable, los derechos laborales de sus trabajadores, accionistas y/o proveedores ante la propia UIF. Con lo anterior se prevén los medios de prueba que consideren conducentes, así como para formular los alegatos que a su interés convengan para tales efectos”, expuso la dependencia, destacando que la acción se emitía conforme a derecho.
No obstante, a través de un comunicado, Altos Hornos de México calificó el hecho como un “acto sin precedente, arbitrario y violatorio de todo derecho”, acusando que la misión de la UIF no es otra que la prevención y combate de delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
AHMSA recriminó a la UIF el obstaculizar su continuidad operativa y dañar más de 20 mil trabajadores, “miles de proveedores”, así como clientes, accionistas y terceros que integran su cadena industrial.
Historia de corrupción
El beneficio económico obtenido entre el consorcio brasileño, Lozoya Austin y Ancira Elizondo, se remonta a la compra en el año 2014 de la empresa Agro Nitrogenados, propiedad de AHMSA por parte de Pemex; una acción que representó una inversión de 475 millones de dólares en una planta que tenía 14 años sin operar y cuyos equipos y tecnología tenían 30 años de antigüedad.
Un mes después de realizada la compra, Altos Hornos de México realizó una transferencia de 3 millones 700 mil dólares a las cuentas de Grangemouth Trading Company, firma offshore de Odebrecht, evidenciada en una investigación de Quinto Elemento como un “puente” que sirvió para la distribución de decenas de millones de dólares para sobornar a la élite política de los países en los que la compañía brasileña mantenía operaciones.
Sin embargo, este no es el único negocio turbio que quedó evidenciado entre el exdirector de Petróleos Mexicanos y el dueño de AHMSA.
En una investigación de 2017, Reporte Índigo reveló que Emilio Lozoya Austin realizó 54 vuelos a la torre GAN (Grupo Acerero del Norte), sede de Altos Hornos de México, en el Eurocopter EC-145 propiedad de la petrolera.
El exfuncionario usaba el helipuerto para trasladarse a lugares como el Aeropuerto Internacional de la CDMX; Toluca y una serie de sitios turísticos como Teotihuacán, Huamantla, San Francisco del Rincón, Valle de Bravo y San Martin Texmelucan. Todo esto con un costo de 64 millones de pesos (174 mil pesos diarios en promedio) provenientes del erario público.
Las aeronaves utilizadas par Lozoya Austin fueron un Cessna Citation Sovereign 2009, comprado en 203 millones de pesos, y un helicóptero Eurocopter EC145, Agusta 2014 AW 109 Grand New, adquirido en 118 millones de pesos por la empresa paraestatal.
Asimismo, la Auditoría Superior de la Federación evidenció que Lozoya utilizó las aeronaves oficiales para decenas de viajes personales a destinos turísticos, tanto en México como en los Estados Unidos.