La Fiscalía General de la República (FGR) solicitaría a un juez federal del Reclusorio Norte la detención y encarcelamiento preventivo del excandidato presidencial del Partido Acción Nacional (PAN), Ricardo Anaya Cortés.
Lo anterior fue reportado por Animal Político, que indicó que la detención se habría solicitado por un riesgo fundado de que escape para no enfrentar el proceso en su contra por el caso de los presuntos sobornos de Odebrecht.
De hecho, el medio reportó que autoridades federales le confirmaron que la FGR tiene dos vías listas para buscar la aprehensión de Anaya si se presenta voluntariamente a la audiencia inicial programada para el 14 de febrero se pedirá al juez que le imponga la medida cautelar de prisión preventiva justificada, al menos, mientras se define si se le abre un proceso por este caso.
De no presentarse, los fiscales buscarían una audiencia privada para solicitarle al juez que gire una orden de aprehensión en su contra por los delitos de cohecho, lavado de dinero y asociación delictuosa.
Además, el juez federal Marco Antonio Fuerte Tapia le advirtió a Ricardo Anaya que tendría que presentarse personalmente a comparecer ante el juzgado cuando se realice la audiencia inicial (programada para el lunes 14 de febrero) o de lo contrario, autorizará a la FGR para que proceda a buscarlo.
En esta audiencia el excandidato a la presidencia por el Partido Acción Nacional (PAN) será cuestionado por los supuestos nexos con la empresa brasileña Odebrecht, así como una supuesta captación por $6.8 millones de pesos.
Al político mexicano se le señala por su probable participación en la comisión de los delitos de asociación delictuosa, cohecho y operaciones con recursos de procedencia ilícita; el dinero supuestamente provenía de la constructora brasileña.
La defensa legal de Ricardo Anaya ha asegurado que necesita más tiempo para revisar todo el expediente del caso.
De acuerdo con el Código Penal Federal, la suma de las penas de los delitos que se le imputan al panista va desde un mínimo de 12 años de prisión hasta un máximo de 39 años de cárcel. En caso de ser declarado culpable, no alcanzaría el beneficio de la libertad bajo caución.
Por último, Ricardo Anaya apareció por primera vez en el radar de la Fiscalía General de la República (FGR) cuando Emilio Lozoya Austin, ex director de Petróleos Mexicanos (Pemex), lo señaló por la supuesta recepción de 6.8 millones de pesos.