A raíz del asesinato de la enfermera Norma Patricia Ayala, ocurrido en el Barrio San Ignacio en la alcaldía Iztapalapa, el martes pasado, familiares de la víctima aseguran que otras ‘pacientes’ del médico al que demandó, por negligencia médica en una lipoescultura, se unirán para luchar por justicia.
Una publicación de la periodista Claudia Solera dio a conocer la existencia de otros testimonios de secuelas por malos procesos médicos, realizados por parte del equipo médico del doctor Cuéllar.
Norma demandó al doctor en 2022
La trágica muerte de Norma desató una ola de revelaciones sobre el controversial médico, quien al parecer durante varios años realizó prácticas en su consultorio ubicado en la colonia Anzures de la CDMX.
Desde julio de 2022, Norma Patricia mantenía un proceso legal contra el doctor. Esto, debido a que en mayo de ese año, se sometió a una lipotransferencia que resultó en una emergencia médica pocas horas después, siendo internada de urgencia en el ISSSTE debido a una hemorragia severa.
Según el hilo de la publicación, el señalado no es miembro del Consejo Mexicano de Cirugía Plástica, pese a que desde hace varios años, se dedica a realizar procesos como: blefaroplastia, mommy makeover, lipoescultura, implantación mamaria y rinoplastia.
Doctor operaba a pacientes en centro comercial
Vale resaltar que dichas prácticas deben ser realizadas solamente por médicos certificados, y en instalaciones adecuadas. Sin embargo, el galeno operaba a sus clientes en una clínica ubicada en el centro comercial Mundo E y ofrecía facilidades de pago a sus pacientes.
A raíz del asesinato de Norma Patricia, pacientes se han acercado a sus familiares, a través de redes sociales, para denunciar que también sufrieron malas praxis por parte del equipo médico del doctor José Humberto Cuéllar. 🧵 pic.twitter.com/jcezbYRDDC
— Claudia Solera (@SoleraClaudia) June 14, 2024
Según testimonios de otras víctimas, las cirugías estéticas realizadas tenían un costo entre 80 mil y 300 mil pesos. Además, para ‘enganchar’ a los pacientes, les permitía a los pacientes realizar pagos durante 12 meses.
Tras su cirugía y con graves daños en su salud Norma Patricia denunció al médico, lo que originó la molestia del galeno, por lo que en repetidas ocasiones, la enfermera tuvo que solicitar al Ministerio Público protección.
Norma pidió protección: nunca se la dieron
En una publicación en Facebook en enero de 2023, escribió: “ME SIENTO EN PELIGRO INMINENTE”, responsabilizando al doctor de cualquier daño que pudiera sufrir. Estas amenazas, mismas que fueron reportadas; sin embargo, Norma no recibió protección.
De acuerdo con documentos mostrados en la publicación, laboraba como anestesiólogo en la clínica BD Sculpt Surgery. Aunque, tras la noticia del asesinato de Norma Ayala, parte de la información sobre esta clínica fue eliminada, y se desconoce el paradero del médico.
Autoridades detuvieron a sicario
Vale destacar que el pasado miércoles se reportó la detención de Marco Antonio ‘N’, presunto asesino material de Norma. El sujeto afirmó trabajar como sicario y que fue contratado por un hombre para ultimar a la enfermera.
Adicionalmente, se encontraron conversaciones de WhatsApp donde se demuestra que Norma era vigilada, con fotografías y videos de ella realizando sus actividades diarias, incluyendo su uso del transporte público y la ruta que seguía para trasladarse a su trabajo.
Hasta el momento, las autoridades no han confirmado si es el autor intelectual del crimen, pero las denuncias y pruebas en su contra apuntan a él como el posible responsable.
