Diputados locales y políticos afiliados a Morena y sus aliados en la Ciudad de México aprovechan su posición para colocar gente en la Auditoría Superior de la Ciudad de México (ASCM).
Una revisión a la base de datos de las contrataciones por honorarios de la auditoría revela que en 2020 ingresaron al menos ocho familiares cercanos de políticos locales de Morena y del Partido del Trabajo (PT).
Fuentes afirman que dichos partidos aprovechan que tienen la mayoría en el poder legislativo local para tener plazas dentro del máximo órgano auditor de la capital.
Los políticos capitalinos que han incurrido en esta práctica de nepotismo son los diputados Miguel Ángel Macedo Escartín, Guadalupe Morales Rubio, Yuriri Ayala Zúñiga y José Martín Padilla, de Morena; también Augusto Calcaneo Monts, exdiputado federal del Partido del Trabajo (PT) y actual funcionario de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCDMX); y Leticia Quezada, exfuncionaria del gobierno de la ciudad y simpatizante morenista.
Este hecho, según las fuentes consultadas que trabajaron en la ASCM y que prefieren el anonimato por temor a represalias, también afecta el trabajo imparcial en la revisión del ejercicio de los recursos, que debe desarrollar el máximo órgano fiscalizador sin tintes partidistas.
Los familiares en la Auditoría Superior
Reporte Índigo revisó la información disponible en el apartado de Transparencia del portal electrónico de la ASCM sobre las contrataciones por honorarios y la remuneración de sus servidores públicos del año 2020 y halló ocho perfiles que tienen una relación directa con diputados locales de Morena, simpatizantes del partido, exfuncionarios y exlegisladores federales de partidos aliados.
El primer caso es Eugenia Morales Rubio quien es hermana de la diputada local de Morena, Guadalupe Morales Rubio.
El puesto que desempeña la hermana de la congresista es subdirectora del área de Seguimiento de Recomendaciones de la ASCM con un salario neto al mes de 52 mil pesos.
Después está Gerardo Martín Macedo Escartín, hermano del diputado de Morena y presidente de la Comisión de Movilidad del Congreso de la capital, Miguel Ángel Macedo Escartín.
El hermano del morenista fue contratado el año pasado por el régimen de honorarios y con sueldo mensual de 25 mil 53 pesos.
A Macedo Escartín les siguen Lizbeth y Jesús Agustín Ayala Zúñiga, hermanos de la diputada local del partido guinda, Yuriri Ayala Zúñiga.
El sueldo de Lizbeth Ayala Zúñiga asciende a 14 mil 829 pesos mientras que el de su hermano, Jesús Agustín Ayala Zúñiga, a 25 mil 53 pesos. La contratación de ambos también fue por honorarios.
En la lista de los familiares de políticos locales en la auditoría están las hermanas del diputado capitalino y presidente de la Comisión de Participación Ciudadana del Congreso, Jesús Martín Padilla Sánchez.
Las dos familiares del legislador morenista que trabajan en la ASCM son Karla Daniela Padilla Sánchez y María Fernanda Padilla Sánchez.
El sueldo mensual neto de Karla Daniela y María Fernanda Padilla Sánchez, quienes también están contratadas por honorarios, es de 20 mil 710 pesos.
También se encuentra Sandro Mariano Calcaneo Monts, hermano de Mauricio Augusto Calcaneo Monts, exdiputado federal por el Partido del Trabajo (PT) y actual titular de la Dirección Ejecutiva de Delegaciones y Enlace Legislativo de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCDMX).
Sandro Calcaneo Monts recibe un sueldo mensual neto de 14 mil 829 pesos.
Por último, está Abel Jesús Mandujano Miranda, exservidor público de la otrora delegación Magdalena Contreras y cuñado de Leticia Quezada, exfuncionaria de la ciudad que fue despedida en 2017 durante el Gobierno de la Ciudad de México que encabezaba Miguel Ángel Mancera, por su simpatía y nexo con Morena.
El salario de Mandujano Miranda corresponde a 25 mil 53 pesos mensuales netos.
Cabe señalar que todos los casos mencionados ingresaron a la ASCM en 2020 y no existen documentos que certifiquen si hubo un proceso o concurso de contratación. Tampoco están disponibles sus curriculums.
Respecto a los siete perfiles que fueron contratados por honorarios, según la base de datos consultada, desempeñan labores de asesoría especializada en materia administrativa y de fiscalización.
Extrabajadores de la ASCM, que prefieren el anonimato por seguridad, señalan que los ocho trabajadores referidos fueron colocados por sus familiares aprovechando que Morena es mayoría en el Congreso y que gobierna más alcaldías.
El secuestro de la ASCM
Desde 2019, comenzó el secuestro de la Auditoría Superior de la Ciudad de México por parte de las fuerzas políticas mayoritarias de la capital.
El 30 de agosto de 2019, Reporte Índigo publicó el texto titulado “Auditoría Secuestrada” en el que se relata que tres perfiles con nexos políticos llegaron en ese año a la ASCM a puestos directivos sin tener la experiencia necesaria. En dicha nota, Reporte Índigo documentó el caso de la directora de transparencia de la ASCM, Rocío Aguilar Solache, hermana de la diputada local Morena, Guadalupe Aguilar Solache.
También se evidencia el del exdelegado de Xochimilco afín a Morena, Faustino Soto Ramos, quien es jefe de la unidad departamental de la Dirección General de la Auditoría Especializada “A”.
Francisco Medina Padilla tiene el cargo de coordinador 3 de la Dirección General de Auditoría de Cumplimiento Financiero “B” y es hermano de Félix Medina Padilla, quien a la fecha de la publicación era subsecretario de Gobierno de la Ciudad de México y actualmente es funcionario de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) del Gobierno de México.
