Por considerar que aprovecha su cargo para fines partidistas, diputados de Movimiento Ciudadano presentaron hoy una solicitud a la Oficialía de Partes para despojar al panista Mauro Guerra de la presidencia de la Mesa Directiva del Congreso, misma que ocupa desde el año pasado.
En representación del resto de la bancada ‘naranja’, Eduardo Gaona y Sandra Pámanes entregaron documentos en donde supuestamente se acreditan seis situaciones en las que Guerra faltó a su labor como líder legislativo incurriendo en posturas parciales encaminadas a reforzar una ‘narrativa’ a favor de la oposición.
“Estamos solicitando formalmente la remoción del presidente de este Congreso del Estado por una serie de acciones que han sido recurrentes, en las que ha faltado a la investidura que le corresponde, pues tiene que actuar con total imparcialidad y no lo ha hecho”, aseguró Pámanes.
Guerra se ‘lanzó’ contra Samuel García
El día de ayer, durante sesión de la Diputación Permanente, Guerra criticó fuertemente al gobernador Samuel García por ‘incumplir acuerdos ya pactados‘ entre el Congreso y el Ejecutivo en el rubro de la repartición de recursos para los municipios, así como por el manejo de la crisis hídrica en Nuevo León y el ‘bloqueo’ en la designación del nuevo titular de la Fiscalía General de Justicia.
“Los tres Poderes que conformamos el Gobierno de Nuevo León debemos de colaborar por el bienestar del estado; es urgente que lo hagamos, pero para que funcione, esta colaboración debe ser recíproca, no solo del Legislativo para el Ejecutivo, sino también del Gobernador para con el Congreso”, demandó el panista.
Guerra cerró su intervención llamando a los legisladores a trabajar juntos sin importar el color del partido al que representan, además de pedir al gobernador que respete la autonomía de los Poderes.
#ÍndigoMTY | El presidente de la Mesa Directiva del Congreso criticó a Samuel García por "violar acuerdos" ya pactados entre el Ejecutivo y Legislativo.https://t.co/emGFJ7mL0W
— Reporte Índigo (@Reporte_Indigo) February 2, 2023
Los emecistas aseguraron que, de acuerdo a la legislación vigente, quien ocupe la presidencia del Congreso debe abstenerse de realizar cualquier tipo de comentario con tintes partidistas u opiniones personales, toda vez que el puesto demanda completa imparcialidad.
“Lamentablemente, él sólo respeta y actúa con base en las órdenes y la dirección que le da su partido político, que es el PRIAN, porque en ambas corrientes encuentra la manera de imponer su línea de acción en un cuerpo legislativo que tendría que ser plural; él no lo está haciendo y lo que procede es su remoción”, demandó Pámanes.
En caso de que la remoción proceda, el PAN podrá designar en el mismo cargo a otro miembro de su bancada en el Congreso.
