Por no alcanzar un mínimo de aciertos en el examen de admisión para ingresar a la educación de nivel superior, poco más de 100 estudiantes rechazados marcharon hasta las inmediaciones de la Secretaría de Educación Pública (SEP), en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Entre pancartas y consignas, el contingente exigió que la matrícula de las universidades públicas de la CDMX y del Estado de México aumente, esto para que las mismas puedan recibir a una mayor cantidad de aspirantes, ya que acusan una “política de exclusión” de parte de las instituciones.
De manera expresa, los integrantes del Movimiento de Aspirantes Excluidos de la Educación Superior (MAES) solicitaron la apertura de la matrícula en todos los planteles de la UNAM, IPN, UAM, UPN y UACM.
Otras de las principales demandas de los manifestantes fueron que se garanticen el acceso a las escuelas de bachillerato y universidad; la cancelación del examen único de admisión; la construcción de nuevas instituciones públicas, así como un mayor presupuesto destinado a la educación.
En las instalaciones de la SEP fue recibido un documento que entregó una Comisión formada por un grupo de los manifestantes, esto para entablar una mesa de diálogo y tomar conocimiento de sus peticiones; el evento contó con la participación de diversos colectivos que apoyan la causa de la educación pública y gratuita.
