El segundo piso de la estrategia de seguridad de Sheinbaum ¿dará resultados?

No es mentira que Claudia Sheinbaum heredó un país convulso, con una crisis de inseguridad y con múltiples fuegos. Un problema que viene de años atrás y que ahora buscará solucionarlo, aunque parezca una misión imposible.

Su estrategia, que presentó en días recientes, además de darle continuidad a la del sexenio pasado, es decir, atender las causas de la violencia y presencia de la Guardia Nacional por todo el país, también presenta un cambio de paradigma.

Su estrategia, como novedad, presenta dos pilares, comenzar a pacificar desde lo local y utilizar la inteligencia y la investigación en vez de la fuerza.

Para que sea exitosa, el Gobierno federal deberá de centrarse en la coordinación con entidades y municipios y también crear una nueva estructura institucional para concentrar la inteligencia de otras instituciones.

Tarea muy complicada debido a la diversidad de partidos gobernantes e intereses y a que tanto la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena) como la Marina e incluso el mismo Centro Nacional de Inteligencia (CNI) son muy recelosos con la información que consiguen y difícilmente la compartirían con un mando civil.

En el centro de esta complicada estrategia estará la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana de Omar García Harfuch, quien es uno de los hombres de confianza de Sheinbaum y que ya presentó buenos resultados durante su gestión en la Ciudad de México, disminuyendo los índices de criminalidad, aunque no es lo mismo pacificar una ciudad que un país.

Además, los recursos que se tienen en la capital del país no son los mismos con los que cuentan otras entidades.

Los cuatro pilares de la estrategia de la presidenta Sheinbaum

A pesar de la continuidad prometida por la presidenta para construir el “Segundo piso de la transformación”, el plan “Abrazos, no balazos”, ejecutado por el expresidente Andrés Manuel López Obrador en materia de seguridad, no se replicará al pie de la letra ya que habrá algunas variaciones.

“Lo primero, que es muy importante, es: no va a regresar la guerra contra el narco, de (Felipe) Calderón. No buscamos ejecuciones extrajudiciales, que era lo que ocurría. Nosotros, ¿qué vamos a usar? Prevención, atención a las causas, inteligencia y presencia en esta estrategia de cuatro ejes”, expresó la mandataria el pasado 8 de octubre cuando presentó su estrategia de seguridad.

Los cuatro ejes rectores de la estrategia de Sheinbaum son prevención de las causas; consolidación de la Guardia Nacional; fortalecimiento de la Inteligencia y la Investigación; y la coordinación entre el gabinete de seguridad con las entidades federativas.

Sobre la prevención y atención a las causas, la mandataria señaló que, adicional a lo que hizo López Obrador, su gobierno tiene la intención de replicar a nivel nacional el programa Barrio Adentro de la Ciudad de México, que consistió en que todas las secretarías del gobierno de la ciudad se sumaron para ir a tocar casa por casa en los polígonos de mayor índice delictivo.

“¿Qué objetivo tenía esto? Atender de manera integral a las familias. Si los niños y las niñas no iban a la escuela por alguna razón, resolvíamos ese problema; si el joven, la joven, no estaba yendo a la preparatoria, lo llevábamos a la preparatoria con la beca.

“Si no tiene universidad o no tenía trabajo, le encontrábamos trabajo. Es decir, una estrategia integral focalizada que nos permita atender de manera integral a las familias y evitar que las y los jóvenes se incorporen a un grupo delictivo”, declaró.

Sheinbaum Pardo anunció que se mantendrán las estrategias Jóvenes Construyendo el Futuro y Jóvenes Escribiendo el Futuro, así como los trabajos de cultura y de semilleros.

“Las secretarías del Gobierno de México van a apoyar, completas. Por ejemplo, la Secretaría de Gobernación nos va a ayudar en Guanajuato para que, en las zonas de mayor índice delictivo, junto con Prevención, con Trabajo, con Secretaría del Trabajo y otras secretarías, vayan completas a apoyar a la población y poder ampliar las capacidades para rescatar a las y a los jóvenes de grupos delincuenciales o de la violencia o de las adicciones”, añadió.

Inteligencia, presencia y coordinación, los retos de la estrategia

La estrategia de seguridad de la presidenta Sheinbaum Pardo señala que la base de su éxito es la coordinación y la inteligencia.

“Este plan de seguridad, basado en la cooperación interinstitucional y en el uso intensivo de tecnología e inteligencia, representa una respuesta integral para enfrentar la creciente violencia en el país y recuperar la paz en las regiones más afectadas por el crimen organizado”, señala el plan.

Debido a esto, cobra vital importancia la figura del secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, quien explicó  durante la presentación que para incrementar las acciones de inteligencia, se creará la Subsecretaría de Inteligencia e Investigación Policial, dentro de la SSPC, la Subsecretaría de Prevención, que estará a cargo de Esthela Damián Peralta, y el Sistema Nacional de Inteligencia.

Además, se fortalecerá el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública y se implementará el Modelo de Atención Integral a los Delitos de Alto Impacto.

“Cabe resaltar que, en las entidades de mayor incidencia delictiva, como son Guanajuato, Baja California, Chihuahua, Guerrero, Jalisco y Sinaloa hemos generado una estrategia de intervención para los delitos de alto impacto, basada en la estrategia antes referida”, expuso.

García Harfuch, resaltó que la Estrategia Nacional de Seguridad ha establecido, además, tres objetivos principales para la construcción de la paz, que son la disminución de la incidencia delictiva, principalmente de los homicidios dolosos y de la extorsión; neutralización de los generadores de violencia y redes criminales y fortalecer las capacidades de prevención y proximidad social de las policías locales.

Sobre esta estrategia, el especialista en seguridad y actual investigador postdoctoral del Centro de Investigaciones sobre América del Norte (CISAN), Juan Manuel Aguilar Antonio, aplaude que la seguridad en el país tome el rumbo de un mando civil.

“La Ciudad de México demostró que hay otros rumbos posibles más allá que la militarización, lo cual respondería a las preocupaciones de muchos sectores sociales. El problema es que replicar estas condiciones es complicado porque en muchos contextos no existen ni esas fuerzas, ni ese presupuesto y ese va a ser uno de los principales desafíos”, explica.

Sobre el tema de la militarización, el mismo García Harfuch señaló que es falso que vaya a militarizarse el país, ya que sólo se aprovecharan las capacidades de la Sedena para fortalecer y consolidar a la Guardia Nacional como una institución de seguridad.

Aguilar Antonio además considera que otro de los retos para García Harfuch y Sheibaum Pardo será poder materializar su centro de fusión de inteligencia, propuesta que no se ha concretado en el pasado.

“Es una idea que ya se ha planteado con anterioridad. Muchos de estos productos y análisis solo se quedan en la agencia que los crea. Compartir de manera abierta no ha sido del todo exitoso, siempre ha habido recelo, siempre ha habido desconfianza, se comparte información parcial. Ese va a ser su principal desafío, porque es algo que no ha pasado, no comparten completamente sus análisis ni la Sedena, ni la Semar ni el CNI”.

Sobre el CNI, Omar García Harfuch informó que lo fortalecería incrementando sus capacidades humanas y tecnológicas para que sea parte medular del Sistema Nacional de Inteligencia.

Al respecto, Manuel Balcázar, especialista en seguridad y exdirector general de seguridad nacional de la Presidencia de la República, opina que urge rescatar al Centro Nacional de Inteligencia el cual a raíz de la detención del “Mayo” Zambada se evidenció que estaba en crisis.

“Una tarea muy importante para Omar García Harfuch es recomponer el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) porque hoy es catastrófico y hasta un poco trágico”.

Sobre la coordinación con las entidades, el especialista detalla que será tarea de García Harfuch realizar una evaluación del funcionamiento de los centros regionales de inteligencia y echar andar el Consejo Nacional de Seguridad Pública.

“Prácticamente también ha estado abandonado y es el órgano que define de manera colegiada con los 32 gobernadores la política de seguridad pública. El Consejo de Seguridad Nacional es una herramienta muy poderosa ya que además de tener a la Defensa y Marina, la Fiscalía General de la República, la Secretaría de Gobernación y el propio CNI, debe de tener también el alcance de la Cancillería, la Secretaría de Comunicaciones y Transporte, la Secretaría de la Función Pública y la Secretaría de Hacienda”.

Confianza plena en la presidenta Sheinbaum y su estrategia

Senadores de la República confían totalmente en la Estrategia Nacional de Seguridad que presentó la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, toda vez que busca disminuir los índices de inseguridad en determinadas zonas del país, primordialmente, con la atención a las causas.

Andrea Chávez, senadora de Morena, dice que ve con buenos ojos que se dé una continuidad para poder atender las causas que originan la desigualdad que originan la violencia.

“Me queda claro que Omar García Harfuch, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, cuenta con todas las credenciales para fortalecer, sobre todo, el ámbito de la investigación tanto en la Guardia Nacional como en otro tipo de corporaciones”.

La también exdiputada federal considera que lo más importante de la Estrategia Nacional de Seguridad del Gobierno de México, es la coordinación con gobiernos estatales y municipales.

Refiere que con el senador con licencia, Omar García Harfuch y la doctora Claudia Sheinbaum, esta estrategia de seguridad nacional inicia fuerte.

“Estamos en el camino correcto para arreglar algo que tienes descompuesto por más de tres décadas, pero llevará algo de tiempo. Queremos seguir en esa línea hasta que se puedan eliminar del todo (los delitos del fuero federal)”.

El guerrerense Félix Salgado Macedonio comenta que la estrategia además de ser certera, no es mesurada, ni envalentonada, sino que fue realizada tras tener un diagnóstico de la situación del país y ello servirá para entender, por ejemplo, en dónde hay más violencia.

Recuerda que Omar García Harfuch, inmediatamente después de tomar las riendas de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana acudió a Sinaloa y Guerrero para dar seguimiento a la estrategia de seguridad.

“Primero amor y paz, sin declarar la guerra que comenzó Calderón, ya lo dijo ella (Claudia Sheinbaum). Abrazar causas, abrazar la educación, abrazar la salud, abrazar el campo, esos abrazos que podría esperar la ciudadanía. Hoy hay que tener fe y confianza. Se construyó el primer piso de la transformación y no está acabado esto, pero con Claudia habrá un segundo y después un tercero y el cuarto. Creo que la Cuarta Transformación va a continuar por muchos años”, concluye.