El viernes pasado, en dos hechos distintos ocurridos en el Área Metropolitana de Guadalajara, 21 personas que habían sido privadas de su libertad por grupos delictivos escaparon de las casas de seguridad donde se les mantenía retenidas, según lo confirmó la Fiscalía del Estado de Jalisco.
Una de las casas de seguridad se encontraba en la colonia Olímpica, en el municipio de Guadalajara, de ahí escaparon nueve personas que estaban cautivas y en su interior se han encontrado, hasta ahora una cabeza humana y restos óseos; la otra estaba ubicada en San Sebastián El Grande, en Tlajomulco, de esta escaparon 12 personas más y en ella fueron hallados cuatro cadáveres.
De acuerdo con las declaraciones vertidas por el fiscal del Estado, Gerardo Octavio Solís Gómez, ambos casos están relacionados con pugnas entre grupos criminales por el mercado que representa la ciudad en términos de narcomenudeo.
Con respecto a la otra casa de seguridad, la ubicada en Guadalajara, dijo que una gran mayoría (de las personas que escaparon) tenían antecedentes penales, “refieren ser adictos, refieren que en algunos casos la consumen, en otros casos la venden”.
El fiscal reconoció que en la ciudad se está desarrollando actualmente una disputa entre células del crimen organizado por el narcomenudeo y que se ha registrado un aumento en los últimos días de este tipo hechos conocidos como “levantones” de personas para mantenerlas privadas de su libertad.
“Lo que estamos advirtiendo es una lucha por el territorio en la venta de droga al menudeo por diferentes grupos delincuenciales. Han crecido estos hechos, definitivamente como en cualquier fenómeno delictivo hay temporadas en las que se recrudecen este tipo de hechos; eso fue lo que nos sucedió en los días anteriores, luego posteriormente baja esta ola delictiva pero definitivamente consideramos que una buena parte de estos hechos pudieran estar relacionados con la búsqueda del control del territorio”, sostuvo.
Sobre las causas que explican que en un mismo día se registraran dos eventos similares, de personas privadas de su libertad que lograron salir de los sitios donde se les mantenía cautivas, explicó que se debió a que los encargados de las casas de seguridad se habrían retirado ante la presencia de unidades policiales.
“De las declaraciones a las que hemos tenido acceso por parte de las personas liberadas no se advierte una liberación espontánea por parte de sus captores, sino que más bien derivado del patrullaje y la penetración que se tiene por las diversas corporaciones estatales, federales y municipales, al parecer en al menos dos de los casos hubo un avistamiento cercano de miembros de alguna corporación policiaca, y los captores decidieron espontáneamente abandonar el lugar, circunstancia que aprovecharon de inmediato los retenidos para intentar liberarse”.
Destaca el caso de una de las personas que escaparon de la casa de seguridad de Tlajomulco, se trata de un hombre que había sido privado de su libertad ese mismo viernes, en un hecho que le costó la vida a su hija de solo tres años de edad por arma de fuego, lo cual también había sido difundido mediáticamente.
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