Es ‘zona de exclusión’ la Independencia

La precepción general de inseguridad en Monterrey tiene una relativa mejoría en los dos últimos meses, pero todavía hay puntos intransitables como la colonia Independencia.

La sociedad regia los margina, hay habitantes de este sector que batallan para llevar a sus familiares a las citas médicas, a urgencias, o sufren para regresar a su casa.

Está muy cerca del centro, pero también muy lejos, porque muchos colonos no tienen oportunidad de llegar en transporte público.

También batallan con proveedores de servicios y distribución de productos.

Mayra González Mayra González Publicado el
Comparte esta nota

Actualmente se calcula que son unos 50 taxis piratas los que circulan por el corredor de la colonia Independencia. Al día ganan por dos turnos de labor entre 500 y 400 pesos.

La precepción general de inseguridad en Monterrey tiene una relativa mejoría en los dos últimos meses, pero todavía hay puntos intransitables como la colonia Independencia.

La sociedad regia los margina, hay habitantes de este sector que batallan para llevar a sus familiares a las citas médicas, a urgencias, o sufren para regresar a su casa.

Está muy cerca del centro, pero también muy lejos, porque muchos colonos no tienen oportunidad de llegar en transporte público.

También batallan con proveedores de servicios y distribución de productos.

Los que hace años fueron pandilleros se aliaron con grupos de la delincuencia organizada y conformaron una zona de exclusión.

Entre más arriba, más peligroso.

Ahí los asesinatos, las casas de seguridad y el narcotráfico, tienen su coto de poder.

“El límite es Lago de Pátzcuaro y ya de ahí para arriba están lo que le llaman los taxis piratas que en realidad son los que te ayudan a subir. No necesariamente es que sean malos, sino que al contrario te ayudan”, dice el vecino Sergio Martínez.

El padre del Santuario Guadalupano, Agustín Martínez, se refiere a Lago de Pátzcuaro como el “corredor”, que divide a la Indepe.

De ahí para arriba la realidad es otra. Se trata de una frontera interna entre “los de arriba y los de abajo”.

En esta línea divisoria, ubicada dos cuadras arriba de la Basílica de Guadalupe, justo en la esquina de Pátzcuaro con la calle Jalisco, se encuentra una de las cuatro bases de taxis-piratas que prestan el servicio de transporte a los colonos marginados.

Son vehículos despintados, con puertas caídas y motores que muy apenas funcionan, pero son los únicos que llevan y traen por un costo de entre 10 y 20 pesos a los estudiantes y a las señoras que viven en lo alto de la zona prohibida.

Para los taxistas irregulares de Ecotanque no ha sido fácil ganarse la confianza de los vecinos, quienes poco a poco y debido a la falta de transporte los han ido ubicando.

“Me hice pirata, bueno pirata no, irregular o informal, pero pirata no. Pirata es el que trae carro verde y sin placas”, menciona uno de los taxistas, quien desde su punto de vista ha visto mejorías en materia de inseguridad de Febrero para acá.

Actualmente se calcula que son unos 50 taxis piratas los que circulan por el corredor de la colonia Independencia. Al día ganan por dos turnos de labor entre 500 y 400 pesos.

Michelle, de la primaria Celedonio Junco de la Vega, todos los días se regresa a su casa en los taxis piratas de la esquina del centro educativo.

Afirma que es su única opción: “me regreso en los ecos que bajan para poder subir, porque son los únicos que suben.

“Después de los balazos ya no quieren subir”, dice la niña de 6o año de primaria, mientras aguarda un taxi a las 14:00 horas después de clases.

Y es que a pesar de que el sector está acostumbrado a los taxis piratas para la circulación interna, vecinos como Rubén Montellano, se quejan de batallar en encontrar taxis que los acerquen al área.

“Si vienes del centro con un taxi, a veces te dice: ‘no espérate, arriba no subo’, porque es conocido que es conflictivo allá arriba. Te dicen: ‘porque si subo por 30, 40 pesos me van a quitar hasta el carro’”, agrega Rubén.

“Yo llevo a mi abuelita y no quieren venir de la clínica para acá, que porque es en la Independencia y para allá no voy.  Y no te queda de otra, más que buscar otro taxi”, comenta Sergio Martínez que reside en Lago de Pátzcuaro esquina con Jalisco.

Y es que la red de taxis piratas que deambula, desde las 7:00 hasta las 23:00 horas se ha vuelto parte de una necesidad social por el aislamiento que la misma sociedad aplica a estas colonias con alto índice de homicidios y asaltos.

El más reciente asesinato en la Independencia fue de dos meseras: Érika del Carmen Espinosa de 24 años y Sandra Guadalupe Coronado de 31.

Ambas fueron privadas de su libertad el lunes 5 de diciembre al medio día y después ejecutadas con un fusil AK-47 en el cruce de José R. Peña y 2 de Abril.

El otro evento que marcó a los colones fue en el que murió una familia de cuatro integrantes.

Un grupo de sujetos que se hicieron pasar como parte de un operativo policiaco dispararon ráfagas de fusil contra los cuatro integrantes de una familia. Esto sucedió el 16 de noviembre.

También fue muy sonado el de los tres taxistas piratas que fueron perseguidos y asesinados en pleno mediodía.

Crimen en el que una vecina, Vicky Gaytán, fue víctima de una bala perdida que, durante la persecución, traspasó la casa de madera en la que ella realizaba sus labores domésticos.

La Independencia

Antes se le conocía como el Barrio de San Luisito, por la cantidad de migrantes originarios de San Luis Potosí, y fue en 1910 cuando el General Bernardo Reyes le cambió el nombre en honor al centenario de la Independencia.

El 25 de septiembre del año pasado, se construyó el Centro Comunitario, inaugurado por el gobernador Rodrigo Medina y construido por la Secretaría de Desarrollo Social con el fin de regenerar el tejido social de la colonia.

Con espacios de áreas verdes, bibliotecas y salones, pero todavía una regeneración lleva años.

Fuerza Civil

Algunos colonos se sienten más seguros desde que Fuerza Civil llegó a la colonia a patrullar, pero otros se muestran inconformes con la forma de operar de la corporación.

Dicen estar en inspección constante dentro de sus casas. Sobre todo para los vecinos que viven en la zona alta del otro lado del “corredor” Lago de Pátzcuaro. 

“Aquí a cualquier muchacho que miran: ‘a ver, ven para acá’ y lo esculcan. Y no le tengo confianza porque a veces dice uno: ‘¿por qué no agarran a los que realmente son?’”, dice Marisela Hernández, mientras aguarda sentada en el piso a que su hijo salga de clases.

“Yo te digo porque se han metido a mi casa ahí a checar… La vez pasada me tocó que mi esposo estaba aquí en la colonia y acababa de subir porque venía de trabajar.

“Llegaron los de Fuerza Civil y le dijeron: ‘Te sales para afuera’ y yo les dije: ‘¿Pero por qué? ¿Qué está haciendo?’.

“Respondieron: ‘no, es que acaba de subir, sí, acaba de subir, y ¿qué traía en la mano?… era una pistola’”, narra la vecina Marisela Hernández.

“Les expliqué que no era una pistola sino un paraguas. Pero lo sacaron y a fuerzas lo querían estrujar y él se negó. Yo realmente me siento más segura con los soldados”, continúa Marisela, ama de casa con cuatro hijos, quien asegura vivir con revisión diaria y acusa de abuso de autoridad a Fuerza Civil.

Uno de los jóvenes catequistas que colabora con el padre Agustín Martínez fue detenido por Fuerza Civil solamente por su aspecto.

“Él venía de su trabajo y por su aspecto, una sudadera y el chavo con su mochila, lo revisaron y le quitaron la quincena. Porque le dijeron: ‘tú andas vendiendo droga’. Entonces es algo injusto, que incluso hiere a la comunidad”, dice el vicario parroquial del Santuario Guadalupano.

La presencia de las fuerzas antagónicas que circulan en lo alto de la colonia Independencia, ha hecho de la libertad de los vecinos una prisión.

Circular por la vía pública se ha vuelto un gran peligro.

Tanto por los criterios la corporación policial, como por el crimen organizado y el aislamiento en que están los residentes de este sector.

Dos meses ‘calientes’

5 de diciembre:
Ejecutaron a dos mujeres con cuernos de chivo en pleno mediodía, entre la calle 2 de Abril y José R. Peña.

24 noviembre:
Decomisan a un menor un lanzagranadas, una pistola revólver calibre .38, dos AK-47 y un AR-15. El joven se encontraba con otros cinco sujetos en el cruce de Lago de Chapala y Colima.

19 noviembre:
Detienen tras persecución a tres personas con armamento y vehículos robados en Lago de Pátzcuaro y Tabasco.
Los tripulantes arrojaron por la puerta trasera un arma larga y en el cruce de 5 febrero y Francisco Zarco tiraron dos cargadores.

16 de noviembre:
Acribillan a cuatro integrantes de una familia en lo alto de la colonia Independencia, tras ser engañados por un sujeto vestido de Policía, quien tocó a la puerta para luego disparar ráfagas de fusil.

29 octubre:
Fuerza Civil presentó a un hombre de 34 años, quien dijo ser ayudante de mecánico y a quien se le encontró una bolsa con 142 envoltorios de cocaína en piedra. La detención fue en la calle Cazadores.

26 octubre:
Acribillan a un estudiante de criminología de 23 años de edad, justo a un lado de un negocio de hamburguesas sobre la calle Laguna de Tamaiahua, entre Veracruz y Oaxaca.

23 octubre:
La Procuraduría ejecuta una orden de aprensión contra tres ‘halcones’ que fueron detenidos por Fuerza Civil en el cruce de la calle  Zacatecas y Dos de Abril.
Acribillan a taxista ‘pirata’ de 30 años con múltiples disparos frente a un centro comunitario estatal. En el cruce de Jalisco y Laguna de San Marcos.

20 octubre:
Presentan en la Agencia Estatal de Investigaciones a seis delincuentes por asesinatos y robos de vehículos en la colonia Independencia.

18 octubre:
Asesinan a joven en la parte alta de la colonia Independencia con un balazo justo atrás del oído izquierdo. El cuerpo fue encontrado en una vereda que colinda con la escalinata de la calle Yucatán.

11 octubre:
Muere Francisco Márquez ‘El Borre’, de 22 años de edad,  líder de un grupo criminal de la Independencia.

Síguenos en Google News para estar al día
Salir de la versión móvil