El gobernador Graco Ramírez, confió en que el conjunto arquitectónico que albergará el Museo Morelense de Arte Contemporáneo, Juan Soriano, el cual tuvo una inversión de 300 millones de pesos y que se convierta en un orgullo no solo de los morelenses sino de todo el país.
Recordó que Morelos cuenta con espacios de primer nivel para la creación y el disfrute de las artes y de la cultura como: el Museo Morelense de Arte Contemporáneo, el Centro Cultural Teopanzolco y el Centro Cultural Comunitario Los Chocolates.
Dijo que el patrimonio cultural que hemos construido en cinco años en Morelos es histórico, y con ello además de que se fortalece a la sociedad, los artistas locales ahora cuentan con más espacios para la creación y la gente para su disfrute.
La secretaria de Cultura, María Cristina García Cepeda afirmó que con este tipo de proyectos México recupera el valor de sus artistas y de su historia, y se dijo privilegiada de participar desde el principio y ver concluida esta obra que es un orgullo para México y Morelos.
Expresó su reconocimiento al gobernador Graco Ramírez, a su secretaria de cultura, Cristina Feasler por hacer realidad este espacio cultural que ofrecerá a sus visitantes, el amplio y rico horizonte del arte que fortalece a México.
Coincidió con Graco Ramírez en el sentido de que en este proyecto tuvo mucho que ver el impulso de Elena Cepeda, titular de Sistema DIF Morelos, a quien calificó como, una mujer comprometida con la cultura y al propio mandatario quien ha reafirmado con esta causa.
Por su parte el arquitecto Javier Sánchez Corral, explicó que el Museo cuenta con tres edificios, 7,621 m2 de construcción, una inversión de 300 millones de pesos, más de 20 millones en acervo y 7 millones de equipamiento.
Explicó que en junio se inaugura la exposición de la colección Juan Soriano integrada por más de mil 200 obras, pinturas, esculturas, grabados y dibujo. Destacan 229 esculturas (18 de gran formato) y 54 pinturas.
El archivo incluye libros de la biblioteca Soriano, escritos personales, fotos, diseños de vestuario y escenografías, y la correspondencia que intercambió con María Zambrano, Rufino Tamayo y Octavio Paz.
