El gobernador electo de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, hizo manifiesto su rechazo a la figura de coordinador estatal que pretende implementar desde la presidencia del país Andrés Manuel López Obrador, y adelantó que no tratará con Carlos Lomelí Bolaños, quien fue designado con esa función en esta entidad federativa.
Así lo señaló Alfaro Ramírez en redes sociales: “Mi relación con el gobierno de la república será directa con el presidente y con sus secretarios de estado, no habrá en Jalisco autoridades intermedias simplemente porque eso vulnera principios constitucionales básicos y lastima el espíritu del pacto federal”.
Mi postura es clara: mi relación con el Gobierno de la República será directa con el presidente y con sus secretarios de estado, no habrá en Jalisco autoridades intermedias simplemente porque eso vulnera principios constitucionales básicos y lastima el espíritu del pacto federal.
— Enrique Alfaro (@EnriqueAlfaroR) 31 de julio de 2018
A decir del próximo mandatario de Jalisco, el cargo de coordinador estatal que proyecta López Obrador violenta la arquitectura institucional del país, puesto que: “no existe en nuestro marco legal ninguna figura que funja como vínculo entre entidades federativas y el ejecutivo federal, los delegados federales nunca han tenido facultades de decisión ni autonomía técnica; existen, siempre y cuando sean indispensables para prestar servicios o realizar trámites en cumplimiento de los programas a su cargo, incluso hay que entender que dotar a las delegaciones o cualquier otra figura de carácter administrativo de facultades de control, fiscalización del ingreso y gasto público federal sería una violación flagrante al orden constitucional”.
No existe en nuestro marco legal ninguna figura que funja como vínculo entre entidades federativas y el ejecutivo federal, los delegados federales nunca han tenido facultades de decisión ni autonomía técnica.
— Enrique Alfaro (@EnriqueAlfaroR) 31 de julio de 2018
El 20 de julio pasado Lomelí Bolaños dio declaraciones en las que confirmó que estará a cargo de 83 delegaciones federales en Jalisco, y que vigilará la aplicación correcta de los recursos federales que son transferidos al estado desde la Federación. En aquella ocasión se le preguntó qué iba a pasar si Alfaro Ramírez decidía no tratar con él, sino directamente con López Obrador, a lo que respondió el morenista:
“Que lo busque, a ver si lo recibe, así de fácil. Andrés no es un hombre que simule, Andrés es muy claro, y el gobernador electo estará en la posición de buscar a quien él desee. Aquí hay un representante del Ejecutivo Federal que soy yo y si él quiere buscar al presidente que lo haga, no hay ningún problema, no hay ningún problema”.
En su posicionamiento sobre los coordinadores estatales, Alfaro Ramírez hizo alusión a Lomelí Bolaños, al señalar: “Respecto a la persona que se ha presentado como el designado para cumplir tareas extra constitucionales ya no tengo nada más que decir, hace un mes los jaliscienses pusieron a cada quien en su lugar; quienes están esperando un escenario de confrontación política se van a quedar esperando, Jalisco tendrá un gobierno cuya misión será trabajar para beneficio de sus habitantes, que sabrá dialogar y coordinarse de manera directa y efectiva con el gobierno de la república”.
Con respecto a la relación que tendrá con López Obrador, Alfaro Ramírez refirió: “sabremos exigir respeto al proyecto de estado que habremos de impulsar a partir de la responsabilidad que nos otorgaron con sus votos los ciudadanos jaliscienses; como lo dije en campaña: con el presidente de México coordinación y voluntad para construir acuerdos, siempre; subordinación y sometimiento al margen de nuestras leyes, jamás”.
También señaló que hará “valer ese pacto federal con energía y con respeto”, y finalizó con estas palabras: “En México se ha luchado durante décadas contra el centralismo, el autoritarismo y el uso faccioso del poder público, Jalisco ha sido pilar, ejemplo en esta lucha, y lo seguirá siendo”.