En Argentina sí pesa el castigo
La Unidad de Información Financiera de Argentina se ha unido a la marea de multas internacionales en contra de HSBC por lavado de dinero.
Este país impuso una multa por 13.9 millones de dólares al banco británico por no reportar transacciones sospechosas de posible lavado de dinero.
En 2007, HSBC reportó operaciones realizadas con la firma Zerllafot Campos Salto valuadas en alrededor de 6.73 millones de dólares.
Jesús M. BadiolaLa Unidad de Información Financiera de Argentina se ha unido a la marea de multas internacionales en contra de HSBC por lavado de dinero.
Este país impuso una multa por 13.9 millones de dólares al banco británico por no reportar transacciones sospechosas de posible lavado de dinero.
En 2007, HSBC reportó operaciones realizadas con la firma Zerllafot Campos Salto valuadas en alrededor de 6.73 millones de dólares.
El banco falló en sospechar que la firma pudiera estar lavando dinero aunque las señales fueran evidentes: una firma sin empleados, ni instalaciones propias, y sin facturación.
Del monto total de la multa, la mitad de ella se impuso a HSBC como institución, y la otra mitad fue directamente al funcionario que era el responsable de reportar transacciones sospechosas.
Esta situación ocurre a unas semanas de que en México también se impusiera una multa a HSBC por lavado de dinero, con el valor cercano a los 25 millones de dólares, sobre los 7.46 mil millones de dólares de transacciones ilegales.
De la misma forma, se le acusó al banco británico de lavar dinero para el crimen organizado en México y Latinoamérica.
La investigación del Senado de Estados Unidos revela que la filial mexicana de HSBC envió más de 7 mil millones de dólares en efectivo a Estados Unidos entre 2007 y 2008, cuyo origen estaría en operaciones del narcotráfico.
Cabe recalcar que mientras en Argentina se castigó al banco con una multa de más del 200 por ciento del valor de la transacción ilegal, en México se les sanciona con un castigo de 0.34 por ciento del valor del crimen.
También destaca que en México el castigo solo se extendió a sanciones administrativas, sin indagar sobre los agentes responsables.