Para Morena se podrían complicar las cosas el próximo Periodo Ordinario de Sesiones, pues como grupo mayoritario, los 60 legisladores deberán elegir el miércoles entrante al presidente de la Mesa Directiva del Senado que sustituirá a Olga Sánchez Cordero.
En el caso de Gabriel García, el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal Ávila dio a conocer que el senador “se bajó” de la contienda para presidir la Mesa Directiva, por lo que la competencia sólo se concentra entre José Narro, Alejandro Armenta e Higinio Martínez.
De Martínez, último en levantar la mano para presidir el cargo legislativo, se dice que podría ser el elegido como “premio de consolación” por haber aceptado, sin contratiempos, la candidatura de Delfina Gómez a la gubernatura del Estado de México por Morena.
El senador Elí Cervantes Rojas destacó que será mediante la emisión del voto libre y secreto que se elija al próximo presidente de la Mesa Directiva del Senado, sin presiones o “cargadas”, pues todos los senadores tienen derecho a aspirar y no es conveniente que se le coarte este derecho a nadie.
En este sentido, Monreal Ávila destacó que “el Gobierno nunca se ha involucrado, metido o intervenido con nosotros y va a seguir así, cada uno tiene su propia conciencia y su propia libertad”.
Por parte de la oposición, el PAN, en voz de Julen Rementeria, solo ha exigido ese lugar como alternancia parlamentaria, pero no ha manifestado quién podría sustituir a Sánchez Cordero.
Desaire
Además de que Morena no cuenta con la mayoría calificada para aprobar reformas constitucionales, se agrega el desaire del secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, quien de último momento canceló su participación a la Plenaria del Grupo Parlamentario del Movimiento de Regeneración Nacional prevista para este martes junto con otros secretarios de Estado bajo el argumento de que tiene otros compromisos.
No obstante, confirmó la asistencia del Gabinete de Seguridad a la Reunión Plenaria porque la seguridad es un tema que preocupa bastante a la sociedad y los senadores simplemente hacen eco de ese reclamo social, dado que tienen la facultad de revisar la Estrategia Nacional de Seguridad Pública.
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