“Bochornosa”, “triste”, “deplorable”… Estos son algunos de los adjetivos que ha recibido la pachanga de los dipu-tables panistas celebrada en la lujosa mansión Villa Balboa, en Puerto Vallarta.
A estos calificativos se agrega uno aceptado ayer por el dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), Gustavo Madero.
El líder albiazul reconoció en entrevista telefónica con Ciro Gómez Leyva que el video de la fiesta con escorts revelado por Reporte Indigo es un duro golpe para el PAN.
“Nos afecta a todos y estamos haciéndonos cargo de un golpe de esta naturaleza de la mejor manera en unidad y tomando decisiones, pero tratando también de ver cómo resolverlos y reencontrarnos nosotros mismos como grupo, como partido. Cómo identificarnos también para poder salir a la calle a pedir el voto”, dijo Madero, quien precisó que es un golpe muy duro en dimensiones personales, políticas y legislativas.
“Todos tenemos algunas fallas, excesos que podamos cometer, pero más allá yo no tengo más que el propósito de fortalecer y defender al partido, no voy contra nadie ni puedo hacer un deslinde de esta naturaleza”, agregó el dirigente cuando se le preguntó por los diputados Luis Alberto Villarreal y Jorge Villalobos.