El silencio de Pemex por las explosiones de Guadalajara

A más de un año de distancia de que el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, solicitara al Gobierno de México y a Petróleos Mexicanos (Pemex) una disculpa pública por las explosiones ocurridas el 22 de abril de 1992 en Guadalajara, ninguna instancia federal ha respondido.

Fue el 12 de febrero de 2020 cuando el mandatario emitió la comunicación que tiene por asunto: “Petición de Disculpas por las explosiones del 22 de abril de 1992”, y la cual se dirigió tanto al presidente, Andrés Manuel López Obrador, como a Octavio Romero Oropeza, director General de Pemex.

La Oficina de la Presidencia de la República recibió el oficio de Alfaro Ramírez el 18 de febrero de 2020, mientras que la Dirección General de Pemex lo hizo unos días después, el 20 de febrero de 2020, según consta en los sellos de recepción que plasmaron ambas instancias federales en el documento oficial.

En su oficio, el gobernador le expresa al Presidente de México: “Me dirijo a usted en representación del pueblo de Jalisco para solicitarle que, en su calidad de Presidente de la República, llame a la empresa productiva del Estado denominada Pemex a ofrecer una disculpa pública a las víctimas de las explosiones acontecidas en la ciudad de Guadalajara el día 22 de abril de 1992. Como usted sabe, ese día emergieron de las entrañas de la ciudad una serie de explosiones que dejaron una profunda herida en la vida de miles de familias y que, lamentablemente, sigue abierta”.

Durante este tiempo en que la misiva del gobernador ha permanecido sin respuesta por parte de las instancias federales, el mandatario federal encabezó los siguientes eventos de solicitud de disculpas: “Petición de perdón por agravios al pueblo maya. Fin de la Guerra de Castas”, del 03 de mayo de 2021; “Petición de perdón por agravios a la comunidad china”, del 17 de mayo de 2021; y el 18 de mayo de 2021 también les solicitó perdón a las víctimas del colapso de la Línea 12 en la Ciudad de México.

Perdones presidenciales

El 18 de mayo de 2021 en que el presidente López Obrador les solicitó perdón a las víctimas de la Línea 12 de la Ciudad de México, se le cuestionó durante su conferencia matutina: “Presidente, y con todo respeto, el día de ayer usted pidió perdón al pueblo chino, ¿cuándo pedirles perdón a las víctimas de la Línea 12?”.

A lo que respondió el presidente: “No, yo les pido perdón y además todos los días, y lamento mucho estas desgracias, no como autoridad, sino como persona, yo deseo que nadie sufra, esa es mi convicción, deseo que nadie pierda la vida”.

Y sí, en efecto, un día antes, el 17 de mayo, el presidente había encabezado el evento de “Petición de perdón por agravios a la comunidad china”, donde se refirió a “La Toma de Torreón”:

“En medio de esta efervescente realidad marcada por la polarización clasista y racista, tuvo lugar el llamado pequeño exterminio, que causó la muerte a 303 sinomexicanos, chinomexicanos de Torreón en los aciagos días del 13, 14 y 15 de mayo de 1911. (…) Un par de días más tarde, y habida cuenta del problema político que se avecinaba, el maderismo triunfante recolectó los cuerpos, algunos fueron remitidos a una fosa común en las inmediaciones del cementerio; otros, terminarían semihundidos en las norias del pajonal”

“Los más destacados jefes revolucionarios que participaron en La Toma de Torreón ni siquiera fueron investigados. (…) En 1930 la población china en México era de 15 mil 960 personas y en 1940, según cifras oficiales, se había reducido a sólo cuatro mil 859 personas o habitantes”.

Y concluyó´: “Considero que este acto en el que el Estado mexicano pide perdón a los familiares de las víctimas de la represión autoritaria cometida por movimientos, organizaciones y gobiernos de nuestro país, no sólo nos obliga a asumir nuestra responsabilidad y culpa, sino también a aceptar el compromiso con el pueblo y la República Popular de China de que el Estado mexicano no permitirá nunca más el racismo, la discriminación y la xenofobia”.

En tanto, en el evento del 03 de mayo de 2021, el presidente dijo: “Aquí, por un imperativo de ética de gobierno, pero también por convicción propia, ofrecemos las más sinceras disculpas al pueblo maya por los terribles abusos que cometieron particulares y autoridades nacionales y extranjeras en la Conquista, durante los tres siglos de dominación colonial y en dos siglos del México independiente”.

Disculpa ignorada por Pemex y Gobierno Federal

Las explosiones del 22 de abril de 1992, que se atribuyen a la filtración de combustibles de Pemex al drenaje de la ciudad, dejaron a su paso 212 personas fallecidas, 69 en estatus de desaparecidas y otras mil 470 lesionadas; además de afectaciones en mil 142 viviendas, 450 comercios, 100 centros escolares, ocho kilómetros de calles afectadas, y 600 vehículos, según lo presenta el gobernador en su oficio.

No obstante, hasta ahora sólo ha habido silencio por parte de las instancias federales, según lo confirma el secretario particular del gobernador del estado, Óscar Omar Bernal Hernández, mediante su Oficio SP/883/2021 emitido el día 3 de mayo de 2021, en el que señala, tras referir que el comunicado del mandatario “fue presentado al Presidente de la República y Petróleos Mexicanos (Pemex) el 20 de febrero de 2020”:

“Ahora, se le comunica que no se ha recibido respuesta alguna al oficio referido en el párrafo anterior”, indica la respuesta oficial.

Sin embargo, también es cierto que Alfaro Ramírez, al igual que otros gobernadores que ha tenido Jalisco (Alberto Cárdenas Jiménez, Francisco Ramírez Acuña, Gerardo Octavio Solís Gómez, Emilio González Márquez y Aristóteles Sandoval Díaz), se ha abstenido de demandar a Pemex por la vía civil, no obstante que así lo solicitó la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ), desde el año 2000 (Recomendación 16/2000).

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